Fastidioso YuGyeom

01.- Bambam

-Oye, Bambam.

-¿Sí? - contestó el de cabellos rubios.

-¿Quieres salir conmigo hoy por un café?, y quizás después podríamos ir a mi casa. - sonrió el menor con picardía.

Bambam rodó los ojos con fastidio. Aquello ya era tan normal en su día a día que ya no le molestaba del todo.

-Quisiera, pero no se me da el salir con niñitos mimados y arrogantes.

Yu fingió indignación ante las palabras del Tailandés.

-¿Cómo piensas siquiera eso de mi?, yo que te cuidó y protejo con cada poro de mi piel. - exageró.

-¿Necesitas algo más?, tengo trabajo que hacer y tú solo me estás quitando el tiempo.

El mayor tomó las carpetas del escritorio así como la taza de café que ahí se encontraba. YuGyeom se levantó de su cómodo sofá mientras sonreía.

-¿Sabes algo?, mientras más te hagas el dificil, más me gustas Kunpie.

-Ya me voy Kim...

Salió de la gran oficina con unas enormes ganas de regresarse y romperle la nariz a ese idiota que tenía por jefe, ¿Por qué seguía trabajando ahí?, ¿por qué no simplemente renunciaba y se iba a otro lado?, ah si claro, YuGyeom le pagaba una millonada.

-Idiota. - susurró a la puerta de la oficina para luego sentarse con la cabeza diciéndole miles de groserías.

Más tarde se desquitara, de mientras tenía que organizar la agenda del imbécil.

Más no pasaron ni 5 minutos cuando su celular sonó. Lo tomó y contestó de mala gana el mismo número de todos los días.

-¿Ahora qué?

-Quiero un capuccino doble y galletas de fresa.

-Estoy ocupado. - dijo. - además, eso no es una comida decente. Mejor encarga algo Yu.

-Que bueno que te ofreces a pedirme de comer, Bambam. Creo que unos rollitos de sushi me vendrían bien. Gracias bebé.

-Pero yo no dije... - Y se quedo hablando solo de nuevo. -Estúpido...

En verdad estaba considerando asumir su papel como mayor hacía ese niño insufrible.

✩

-Ten y ya deja de hacerme perder el tiempo Kim YuGyeom.

-Oh, muchas gracias Kunpie, por preocuparte por mi.

A Bambam le fastidiaba la manera en la que su jefe le llamaba y más porque el menor se aprovechaba de esa situación. Aún sabiendo que los diminutivos jamás fueron, soy o serán de su agrado.

-Ya me voy.

El tailandés dio media vuelta dispuesto a irse a terminar de realizar sus actividades del día y asi poderse ir a comer junto a Mark, pero sabía de sobra que el menor le detendría para pedirle algo así que se detuvo y espero unos segundos.

-Bambam, ¿ya revisaste que tengo para esta noche?

-Sí, tienes una cena con los inversionista que tu padre tenía.

-Hmm...

Bambam sabía que al menor no le gustaba hablar de su papá. Ni que se lo mencionaran en lo absoluto.
Pero en su defensa; el menor le había pregunto que tenía agendado para la noche.

-Yu, Yu por favor no estés triste. - dijo cuando se giró a verlo.

Aquella mirada perdida y las cejas fruncidas. Los labios en la linea recta y la mandíbula tensa eran cosas que Bambam no quería ver.

No en el menor.

-Prepárate para esta noche. Irás conmigo como mi acompañante. - ordenó.

-Esta bien..

Bambam se alejó del muchacho sin darle la espalda y cerró con cuidado la puerta para luego continuar con sus cosas pendientes.

Corrigiendo: 03/ marzo 2021