Cap 4

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—Piper, permíteme presentarte. En ese momento Alex se volvió al escuchar el nombre.— Alexa, es mi hija Piper...........

Piper solo se quedó ahí, parada junto a la puerta, del nervio se llevó uno de sus dedos a la boca en cuanto sus miradas quedaron fijas la una en la otra, sintió como todo se le aflojaba incluyendo sus bragas, la mujer de la que habló con Nicky la ...

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Piper solo se quedó ahí, parada junto a la puerta, del nervio se llevó uno de sus dedos a la boca en cuanto sus miradas quedaron fijas la una en la otra, sintió como todo se le aflojaba incluyendo sus bragas, la mujer de la que habló con Nicky la noche anterior, esa a la cual describió como vieja y se bañaba solo con perfume, era la mujer más hermosa que había visto, sus ojos verdes eran penetrantes, y profundos, como si detrás de ellos se escondiera un abismo en el cual estaba dispuesta a caer. Y con esos lentes de secretaria la atracción fue inevitable, con esa mirada que le impedía moverse, súbitamente vio como Nicky sonreía, primero vio su boca que decía "Loser", después su dedo índice que movía discretamente hacia abajo al igual que su mirada picara, indicando sus zapatos, Piper frunció el ceño sin comprender, hasta que le llego oxígeno al cerebro, recordando "La horma de tu Zapato"


Piper

Me había pasado la mañana resolviendo algunos pendientes, entre ellos buscando un buen restaurante, pero sobre todo algo que me diera algún dato de la Francesa, Nicky no podía ganarme, no estaba dispuesta a perder, así que me sumergí buscando información. Pase algunas horas en la web, pero nada relacionado con ella hasta que me di por vencida en la búsqueda , pero al menos encontré un buen restaurante, al poco rato entro mi papa apareció. Había llegado la famosa Alexa, solo le dije que iría en un momento, a propósito me tarde, realmente no quería ni conocerla, que podía tener esa mujer que tanta fiesta le hacia mi padre, por un momento me dieron celos. Deje mi lugar, me prepare mentalmente para recibirla como había prometido. Solté todo el aire de mis pulmones y salí de mi oficina, al caminar por el pasillo, vi como algunos de los empleados estaban platicando o más bien cuchicheando, al verme volvieron a sus lugares, el aroma de un delicioso perfume llego hasta mí, envolviéndome con esa fragancia tan deliciosa. Seguí el rastro, vi como Kelly venia en mi dirección, así que la pare preguntándole si ella era la que usaba ese perfume, pero al decirme que no, puse los ojos en blanco, no, no podía ser de ella.

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