Capítulo 20.

352 23 4
                                    

/ Narra Emilia. /
Miré el reloj. 2:30 p.m.

Me di la vuelta para seguir durmiendo. No tenía ganas de levantarme hoy.

Xxx: ¡A despertarse Emilia de Pimentel! - Gritó y caí al piso asustada.

Me pare enojada. Había dolido y mucho la caída, pero lo que más me enojaba era el nombre que me había puesto.

Emilia: ¡¿Qué quieres?! - Dije acostándome nuevamente y tapándome la cabeza con la almohada.
Stephanie: Quiero que te levantes porque son las dos y media de la tarde y sigues acostada.
Emilia: ¿Qué tiene de malo dormir hasta la tarde? ¡Déjame dormir, Stephanie Hernandez! - Grite frustrada.
Stephanie: No. ¿Recuerdas que hoy es la fiesta?
Emilia: ¿Qué tiene que ver la fiesta con mi necesidad de dormir más horas? - Dije sacándome la almohada.
Stephanie: Debemos ayudar a organizar todo. - Dijo suspirando.
Emilia: Ellos tuvieron la idea de hacer una fiesta, ellos organizan. - Volví a taparme la cara con la almohada.
Stephanie: ¡Puedes entrar! - Dijo y yo la miré confundida.

Joel entró sonriendo maliciosamente y me cargó en sus brazos.

Me llevó ¿hacia afuera? Y lo que menos entiendo, ¿por qué se dirigía a la piscina? ¡Oh no! ¡Oh no!

Emilia: ¡Joel! ¡Espera! - Dije abrazandolo fuertemente. - ¡No me sueltes!
Joel: ¡Muy tarde señorita! ¡Debe aprender su lección! - Me soltó y caí a la piscina.

Estaba en el fondo de la piscina, y por mi mala suerte, nunca había aprendido a nadar.

/ Narra Joel. /
Emilia estaba tardando demasiado en subir a la superficie, entonces decidí tirarme a la piscina.

Había olvidado, ¡no sabe nadar!

La tomé en mis brazos y ella me agarró fuertemente.

Subimos a la superficie y nos sentamos en el borde de la piscina mientras ella tosía.

Joel: Hey, ¿estás bien? - Dije preocupado.
Emilia: Sí. Casi y me haces ahogar pero sí, me encuentro bien. - Dijo parando de toser.
Joel: Que suerte y, lo siento. - Le dije y la abracé.

Nos separamos del abrazo y nuestros rostros quedaron a centímetros.

Ambos nos acercábamos cada vez más, hasta rozar nuestros labios.

Unimos nuestros labios comenzando un beso tierno y dulce.

Sus labios eran perfectos.

Nunca había probado unos labios tan suaves y deliciosos como son los de ella.

Besaba tan bien.

Nos separamos y unimos nuestras frentes.

Ambos oímos aplausos y llantos falsos y nos separamos bruscamente.

Nos habíamos olvidado que estaban los chicos ahí.

Stephanie: ¡Arriba Joemilia! - Gritó y todos comenzaron a aplaudir y gritar.
Christopher: ¡JOEMILIA MANDA! - Gritó y todos lo miramos confundidos. - Lo siento, soy Joemilia shipper. - Dijo y todos comenzamos a reír.

Éstos chicos no podían ser más locos.

/ Narra Emilia. /
Toqué por milésima vez mis labios recordando el maravilloso y encantador beso que me había dado con Joel unas horas atrás.

En verdad me había gustado y mucho.

Miré el reloj que colgaba en la pared y marcaba las 7:10 p.m. La fiesta comenzaba a las 8:00 p.m.

Comencé a alistarme.

Me bañé aproximadamente 30 minutos y cepille mis dientes. No debía demorar mucho.

Salí con una toalla enrollada en mi pelo y con la ropa interior que me había puesto en el baño.

Saqué el vestido de mi armario y me lo puse para luego ponerme los tacones.

Solté mi cabello, lo peiné y lo sequé con el secador.

Comencé a hacerme unos rulos en la terminación de mi cabello. Se veía bien.

Proseguí para maquillarme y luego mirarme al espejo. Me veía bien, más de lo que llegase a imaginar.

Bajé y me encontré con unos tres chicos muy lindos, pero uno me llamaba muchísimo más la atención. Joel.

Vestía una campera de color rojo, blanco y negro. También traía unos pantalones negros, zapatos blancos nike y el pelo natural y sin nada en él.

Se veía tremendamente bien.

Stephanie: Creo que alguien a quedado babeando. - Dijo cantando.
Joel: Estás completamente hermosa. - Dijo mirándome. Me sonroje.
Christopher: Ay, ¿no son tiernos? - Dijo sonriendo.
Emilia: Tú también te ves muy guapo. - Dije mirando a Joel y sonriendo.
Erick: ¿Acaso no nos escuchan o qué? - Les dijo a Stephanie y Christopher. Rieron.

La fiesta sería adentro y afuera de la casa. Estaba todo decorado adecuadamente para la dicha fiesta.

Habían dos mesas grandes llenas de comida y bebidas.

También se encontraba un dj y una barra.

¡Quedó excelente!

La fiesta comenzó y luego de una hora ya algunos bebían alocadamente.

NO SOY YO.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora