Mi Joven Obsesión

Capítulo 13

Christopher

Doy vueltas en mi cama tratando de dormir, miró el cielo raso de mi habitación, me concentro en él, trata de tener sueño, me digo a mí mismo.

Nada funciona, quiero dormir, olvidar está noche y si se puede, olvidar que la conocí.

No quiero involucrarme con ella, no sé qué le pasó antes, pero sé que fue doloroso y sé que si me meto con ella en algún momento la voy a lastimar, porque se lo que soy y aunque en este momento este loco por ella, por su cuerpo, sus labios, su olor, su cabello negro entre mis manos mientras devoraba su cuello su dulce cuello.....

-YA NO MÁS CHRISTOPHER DEJA DE PENSARLA..-me digo a mi mismo, pero no puedo, quiero más de ella, la necesito, quiero obtenerla y también quiero saber qué es lo que no la deja estar conmigo, ¿Por qué cada vez que intento estar con ella, termina reaccionando así? Está claro que sufrió abuso sexual, pero tuvo que pasar algo más para que su trauma sea tan grande.

Como desearía abrazarla en mi cama , llevarla a otro mudo con placer, quiero que ella disfrute conmigo el gusto de hacer el amor, acariciar cada centímetro de su piel, me obsesiona conocer su cuerpo desnudo, cada detalle de él.

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Terminó de hacer el nudo de mi corbata azul, me coloco el saco gris de mi traje.

Hoy tendré una reunión importante con la constructora, tengo que exponerles lo que quiero en los diseños de las obras que van a realizar para mí.

Tomo mi portafolio y teléfono, veo un mensaje de Anderson y otro de Sabana, no entiendo por qué todavía me escribe. Abro el mensaje de Anderson recordándome de la reunión con la constructora a las 8, entrevista en una emisora a las 10 y visita a centros comunitarios partir de las 12:00, hoy almorzare en uno de ellos.

Ni siquiera pude desayunar, la cena de ayer con Abigail me dejó sin apetito, de camino a la constructora pasaré por un Starbucks por café.

Salgo del apartamento y entro al elevador, marcó el piso del estacionamiento y la espera siempre se hace larga es lo malo de vivir en un penhouse, el tiempo que se tarda el elevador en bajar.

Busco el auto que usaré hoy y me apresuró a salir.

Al llegar a la constructora Anderson me espera en la entrada.

-Buenos Días señor-su entusiasmo al saludarme hoy es algo extraño.

-Buenos Días, ¿Por qué me miras de esa manera?-parece un niño emocionado.

-Discúlpeme señor-toco el botón para el elevador y Anderson sigue extraño se que algo tiene que decir.

-Ya habla- le digo seco y tangente esperando que ocurrencia me va a decir.

-Como le fue con su cita de anoche.

-¿Qué?, Bueno mira 1° no tengo por qué decirte nada y 2° no me lo recuerdes.

-Cómo puede estar así, si ella es un encanto- y valla que lo es.

-Si lo es, nunca salí con alguien como ella, ni siquiera cuando era joven.

-Si lo imaginé.

-Quiero que al finalizar el trabajo de hoy vallas a mí departamento, necesito hablar contigo acerca de ella.

-¿Quiere mis consejos?

-No, sé que sabes más sobre ella de lo que me comunicaste y quiero que me lo digas todo.

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-Ok, siéntate ahí- le señalo a Anderson una silla junto a la isla de la cocina.