Amores Anónimos.

28-Deseos De Venganza.

—Reporte oficial — ordenó el teniente James enfundado en un traje negro y corbata al mismo tiempo que mostraba su placa.

Las luces de las patrullas policíacas junto al de las ambulancias iluminaban todo. Uniformados iban y venían, paramédicos, bomberos y rescatistas con perros entraban y salían del edificio. El oficial al que se dirigió el teniente era un hombre alto, ojos cafés que brillaban con el centelleo de las luces y se dirigía hacia el.

—Al parecer se trató de un robo y...—.

—Como que, al parecer...— interrumpió el teniente.

—Si. Porque las cajas con todo el capital están aseguradas y los peritos determinaron que los ladrones ni siquiera tocaron las cajas con el dinero, lo que parece raro, pues al tratarse de un banco es obvio que el objetivo es el dinero ¿no cree?—.

—Entonces, ¿que se llevaron de aquí? —.

—Aún no se sabe, los guardias dicen que lograron frustrar el robo pues la alarma se activó antes que los ladrones llevaran a a cabo lo que sea que buscaban —.

—¿Y que dicen las cámaras de seguridad?—.

—No hay nada, al parecer, a medio día comenzaron a fallar y ordenaron su mantenimiento, lo que también es raro ¿cree que tengo que ver con esto?—.

—Tienen que considerarse todos los factores ¿hay testigos?—.

—Si. Hay nueve muertos, tres de ellos murieron por disparos y posteriormente la explosión los alcanzó junto a otros cuatro y dos murieron aplastados por la parte del estacionamiento que colapsó. Hay veintidós sobrevivientes de los cuáles seis fueron testigos de como escaparon los delincuentes enmascarados —.

—¿Enmascarados? — exclamó con sorpresa James.

—Si. Ellos traían una mascara blanca con sonrisa ladina, esa que ha estado en las noticias durante los últimos meses...—.

James sintió un tirón en el estomago y un cosquilleo se extendió por su cuerpo, sin duda no era otra cosa más que excitación.

—¡Traeme a esos oficiales inmediatamente y no los dejes hablar con nadie, ordena una búsqueda exhaustiva e identifiquen lo que se robaron, además, quiero un operativo en los alrededores, de aquí a seis cuadras a la redonda, ahora!—.

—¡Si señor!—.

El oficial se fue y enseguida James se adentró en el edificio con un solo pensamiento en mente, estaba más cerca que nunca de atrapar a los enmascarados y más de una vez se había imaginando que tenían que decir a todos sus crímenes, si, ese día llegaría muy pronto.

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—¿Cómo está doctor? — las manos temblorosas de Dant se movían contra su voluntad.

—No le voy a mentir joven. Logré extraerle la bala con éxito y por suerte no perforó ningún órgano vital pero perdió mucha sangre antes que pudiera atenderlo y su estado es crítico, tiene que llevarlo a un hospital o puede morir en las siguientes horas —.

Dant se dio la vuelta y las lágrimas corrieron fuera de sus ojos, Dylan lo abrazó por la espalda en un acto de solidaridad.

—¿Hay algo más que se pueda hacer?— intervino Matt.

—Ahora mismo no puedo hacer más, necesito equipo...—.

—Le conseguiremos todo...— exclamó Dant mirando a Matt y Dylan.

—Estamos contigo, solo di que tenemos que hacer — contestó Matt.

Dylan asintió también pues ahora estaba mas comprometido que nunca a no dejar morir a Sebastian ya que mientras el doctor le extraía la bala Dant le había contado todo. Por un momento había dudado que todo aquello fuera cierto pero la desesperación y las lágrimas no podían serlo, en verdad estaba sufriendo al recordar lo de su hermano gemelo, la madre de Sebastian, Alcatraz y todos sus crímenes cometidos con el fin de ver libres a sus seres queridos.

Nunca había simpatizado con Dant, nunca había llegado a sentir algo de aprecio o lástima por el aún al saber que era huérfano, cosa que ahora comprobaba como una total mentira dicha con el único propósito de infiltrarse en la universidad, nunca llegó a caerle bien y con lo que pasó con Irina, menos, pero había algo que ambos tenían en común y eso era Alcatraz: cuando tenía diez años asesinaron a su padre en un atentado del que después Alcatraz se responsabilizó. Su padre era lo mejor del mundo a sus ojos, el padre que volvería a elegir mil vidas mas si pudiera pero en un abrir y cerrar de ojos se fue para siempre y esa maldita organización era la culpable.

Alcatraz destruyó su infancia y así como a él, habían destruido la vida de muchas personas, ahora, aunque no simpatizara completamente con Dant o confiara del todo en él, tenía la oportunidad de ayudar a alguien que lo necesitaba y sobre todo, tenía la oportunidad de venganza, algo que jamás creyó posible al tratarse de una organización poderosa y ahora estaba tan cerca de lograrlo que incluso lo sentía: Alcatraz caería y no habría nada que pudiera evitarlo.

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Hola mis Anónimos estoy de vuelta... Es un capítulo un tanto corto pero los estoy preparando para lo que se viene ... Nos leemos luego y no olviden decirme su opinión o lo que sea que quieran ... Si les gusta pueden votar también...

Los ama su Anónimo ...