Una historia de amor y vampiros a través de los siglos en 31 capítulos con alrededor de 500 palabras.
He tomado las palabras basadas en la temática del Fictober del grupo Motín Fanficker como inspiración.
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Año 1870
Inglaterra.
El agua estaba helada y Todoroki se mecía en el putrefacto pantano, sus pies continuaban atorados en el fango, tenía los labios azules y su pálida piel un tono verde musgo. Perdido y enfermo había decidido renunciar a la vida. Su madre a quien tanto adoraba se suicidó por su culpa, su amante con quien se casó se volvió cenizas por salvarlo y su primogénito a quien disfrutaba humillar y sodomizar lo traicionó. Quinientos años de derramar sangre y sufrir eran suficientes...
Siglos atrás, creyó que los vampiros eran capaces de ser felices pero era mentira. La inmortalidad solo te transforma en una criatura sucia, que se arrastra y se mutila tal cual ahora lo hacía su padre Enji Todoroki siendo un nosferatu; recordó su voz severa y sus maltratos cuando las primeras veces lo obligaba a tener transfusiones con Bakugou. Tocar y ofrecer teta a la reencarnación de quien asesinó a Inasa lo ahogaba de rabia pero con el tiempo lo disfruto.
Sonreía vengativo al penetrar a su vástago con deseos de partir su cuerpo, le estiraba el cabello rubio hasta arrancarle trozos y despedazaba su carne. Bakugou suplicaba que lo soltara de la misma manera que él un día le pidió a su padre, quien siendo un maldito lo sodomizaba con más rudeza. Todoroki odiaba a su creador por ser un villano sádico pero termino siendo igual.
"Si yo hubiera sido diferente..." el vampiro divagó en el acmé de su muerte. "...quizás Bakugou me hubiera amado incondicionalmente".
Todoroki se retorció en el agua a causa de sus venas coaguladas, la circulación era lenta y tapaba sus arterias, la sangre casi no llegaba a su cerebro y a ratos perdía el conocimiento. Necesitaba una transfusión o la ayuda de Lucifer para salvarse. Si no limpiaba su sangre se convertiría en un salvaje.
"Si lo hubiera visto con otros ojos tal vez también lo amaría..." pensó mientras débil veía desde el fondo la luna llena apareciendo entre el agua y los nenúfares. "Al final no éramos tan diferentes, ambos perdimos a un amante, crecimos con malos padres que nos robaron nuestra humanidad..."
Todoroki cerró dulcemente los ojos, iba abrazar el delirio, la enfermedad y la muerte pero un último pensamiento surgió de sus entrañas:
"Y porque soy el único que sufre el castigo..."
El coraje, la furia y el odio incremento la adrenalina de su torrente. Todoroki apretó sus puños, rechinó los dientes y su mirada se encendió con un rojo nacido del mismo infierno y comenzó a liberarse de su prisión de tierra.
"Mi vida se arruinó gracias a la guerra creada por cazadores y vampiros porque ellos van a ser felices y yo no..."
Todoroki se arrastró a la orilla del pantano como un demonio saliendo del río Estigia y la luna sombreó su rostro con horror.
"Si esos bastardos son herederos de All Might entonces que mueran y renazcan como ese asesino, así los degollaré una y otra vez como el heredero del rey Enji Todoroki..."