53. Viaje

3.5K 120 35
                                    

Capítulo cincuenta y tres: Viaje

Dos semanas después:

Abigail


Empaco las pocas pertenencias que pienso llevar a la casa de la madre de Chris y dejo escapar un pequeño y hondo suspiro.

No pienso llevar muchas cosas ya que sólo estaremos unos pocos días allá. Por lo cual solo empaco lo necesario en un mochila... bueno, también las pertenencias de Emma puesto que hace una semana empezaron las vacaciones de verano así que no habrá problema con la escuela.

Yo, sin embargo, he pedido permiso en el trabajo y, gracias al cielo no tengo una mala relación con el jefe por lo cual este aceptó sin dudas que me ausentara por pocos días.

Siempre y cuando esté pendiente del celular y redacte uno que otro correo desde mi laptop.

—Mamá —Emma entra a la habitación con un chocolate que, supongo Chris le dió.

—¿Si, bebé? —termino de doblar una blusa rosa pastel y la dejo sobre la cama para prestarle atención a mi hija.

—¿Quieres? —me ofrece el chocolate haciéndome sonreír.

Uno por qué aún no asimilo del todo que ya pueda hablar sin enredar las palabras.

Y dos por qué le encanta compartir sus dulces y chocolates con Chris y conmigo.

—No cariño, pero gracias —se encoge de hombros dándole un mordisco al chocolate.

—Papi dice que...que.. —arruga el ceño frunciendo su nariz, luego de unos segundos parece recordar ya que sonríe —. Que no tardes mucho por qué vamos retra...retra...

Se queda en silencio no sabiendo como seguir.

—¿Retrasados ?—le doy una sonrisa. Me devuelve el gesto.

—Si, mami —asiente.

—Bien, dile a Chris que ya bajo y que por favor no se desespere... Mami ya va.

Mueve su cabesita asistiendo y luego de darle otro mordisco a su chocolate sale corriendo sin darme tiempo de regañarla para que no corra por los pasillos por qué ya ha pasado que se ha caído y eso definitivamente no nos gusta a ninguna de las dos.

Suspiro y cierro el cierre de la maleta para encaminarme hacia la salida.

***

—¿Falta mucho? —pregunto por enésima vez observado por el espejo retrovisor a Emma dormir. Noto por el rabillo del ojo como él rueda los ojos.

—Abby...

—No digas que estás cansado de escucharme preguntar —me acomodo en el asiento —. Tengo derecho a hacerlo.

—Si, tienes derecho —dice cansado —. Es que has preguntado lo mismo más de diez veces y por si no lo sabías cansa y exaspera que solo preguntes "¿Falta mucho?" —bufo por lo bajo —. Es demasiado frustrante, por que ya te he repetido las mismas diez veces que no...

—Pero es que me duele el trasero de tanto estar sentada —me quejo tomando mi celular del portavasos —. Siento que he perdido el poco trasero que tengo y he quedado tan plana como una tabla por atrás.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 08, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Nuestra Hija © [Christopher Vélez] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora