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-¿Papi, estás seguro de que appa Woo vendrá a seguirnos? No lo veo.

-HongJoong toma asiento.-Dijo al ver que aquel menor se ponía de pie queriendo buscar a su otro padre, pero rápido lo tomó San para sentarlo bien.

Le había dicho aquella mentira para que aquel no se sintiera mal, por lo que simplemente dejó soltar un suspiro tratando de relajarse.

Cuando llegaron a su destino HongJoong estaba dormido sobre sus piernas, así que trataba de despertarlo moviendo lo y diciendo su nombre.

El menor abrió sus ojos de forma pesada y le ayudó a su padre con el equipaje para juntos irse.

-¿a dónde vamos?.-En un bostezo habló el menor para luego mirar a su padre.

-A buscar un lugar para dormir. -Dijo mientras tomaban su equipaje y caminaban por la estación, hasta que topó con alguien.  Por venir distraído, ya que no recordaba la verdadera dirección donde era aquel sitio.-Lo siento.

Dijo el chico viendo a la persona con la cual se había golpeado.

-¿San?.-En el momento que aquel sujeto lo reconoció, HongJoong lo tomó de la mano más fuerte pues le asustaba que le conocieran estando fuera de la ciudad.

-Disculpa, ¿nos conocemos?.

-Por Dios, ¡pasó mucho tiempo! ¿Ya no te acuerdas de mí? Soy yo YeoSang. Aquel chico que estaba contigo en la casa hogar.

-¿YeoSang? Wow disculpa no te reconocí, estás muy diferente a cuando te vi por última vez.

-Si, el día en que me adoptaron y después cuando estudiamos en Seúl la secundaria. ¿Recuerdas? Incluso fuimos pareja durante un año.

Con el pasar de los años, San había olvidado todo.
YeoSang era su mejor amigo en la casa hogar, ambos lloraron cuando el sujeto se alejó, debido a que lo habían adoptado, pero después se volvieron a encontrar en Seúl siendo estudiantes de secundaria e incluso durante esos años sólo lograron mantener uno con una relación amorosa.

HongJoong se sentía asustado así que abrazó las piernas de su padre ocultándose.

-¡oh! ¿Es tu... Hermanito?.

-Es mi hijo HongJoong, saluda cariño. No suele ser  callado, creo que sigue cansado, porque se durmió a medio camino.

-Hola pequeño.-Sonrió agitando su mano para luego borrar su sonrisa.-Así que... ¿Te casaste no?. Tienes un lindo hijo.

-Gracias y si... Me casé pero.-Recordando lo que había pasado se puso un poco triste agachando su cabeza. Logrando que YeoSang logrará entender, por lo que decidió cambiar la conversación.

-Debió de ser difícil, en fin... ¿Qué haces aquí?

-Yo amm... Quería empezar una vida nueva, aquí.

-¿vida nueva? Eso significa comenzar desde cero, ¿tienes dónde quedarte? Tengo un departamento, es pequeño pero podemos estar ahí los tres. Comenzar de nuevo...

San al principio se negó pues no quería incomodarlo, pero este se ofrecía aferrado a su casa, por lo que principalmente aceptó debido a que HongJoong seguía bostezando por el sueño que tenía.

-Solo será esta noche ¿si? Quisiera buscar algo por mi propia cuenta.

-No me molesta que estén aquí, al contrario hacen que mi departamento esté mejor, ya que así no me siento solo.

-Pero dormirás en el sofá, es injusto.

-¿Quieres qué me duerma contigo?

-No me quería referir a eso.-Hablaba nervioso para luego prefirir irse.-Adiós, ten linda noche.

Casi corriendo se dirigía hasta su habitación designada para dormir, sacó sus pijamas y comenzó a vestirse para recostarse en cama. Viendo cómo descansaba aquel niño durmiendo tan pacíficamente. Debido a todas las lágrimas que  había soltado le fue sencillo dormir por lo que descansó como nunca.

Al salir los primeros rayos solares se despertó el menor y como le era de costumbre salió de la habitación explorando el sitio en el que se encontraba hasta que vio al hombre en el sofá se asustó y corrió hacia él tomando su mano.

-¿señor está vivo o está muerto?.-Preguntó pero no recibió repuesta así que comenzó a asustarse por lo que agitó su mano para que este se despertará y que de esta forma comprobar si aún respiraba o no.

YeoSang despertó y lo miró escuchando la pregunta que el menor hacía, por lo que sonrió para sí mismo y se puso de pie como si fuera un zombie.

-Estoy muerto.-Hablaba como si fuera un muerto viviente y se comportaba como uno.-Te voy a comer el cerebro.

HongJoong pegó un grito en alto y corrió alejándose del chico pero este de aquella forma lo estaba siguiendo, por lo que el menor se divertía mucho, gracias a ello San se había despertado asustado de escuchar tales gritos, por lo que corrió en busca de lo que sucedía y soltó un suspiro al ver que solo jugaban.

-¡Te atrapé! Me comeré tus sesos.-Dijo comenzado a hacerle varias cosquillas.-¡Oh! Al parecer me faltó uno...-Dijo de la misma forma zombie para ir caminando donde se encontraba aquel invitado de hogar.

-¡appa! Ya me convertí en un zombie también.-Dijo imitando la voz del mayor y realizar los mismos movimientos atrapando a aquel que no huyó, ambos sujetos le hicieron cosquillas simulando que comían su cerebro para que de esta forma rieran juntos.

-Los invito a desayunar, ¿tomamos todos una ducha y vamos que dicen?

-¡Siii! Quiero comer pizza de cerebro.

-No, es decir... No creo, pienso que si de una vez comienzo a buscar una nueva casa desde ahora, la tendríamos muy pronto.

El menor hizo un puchero y miró de forma triste a YeoSang quien era la persona con la cual se había divertido ya que su appa Woo no estaba.

-Vamos cariño, ustedes pueden quedarse todo el tiempo que quieran aquí, no me molesta y creo que a HongJoong tampoco. No gastes en una casa o departamento están seguros aquí, así que vamos a divertirnos por ahora y relájate, despreocupate de todo lo que te tenga tenso.

¿Tan fácil había sido convencer a San?, en realidad, sí pues sin esperarse ya se encontraba duchando a su hijo.

En el auto del sujeto se dirigieron a un buen restaurante para desayunar algo delicioso, el menor estaba encantado con el sitio pues tenía su propia área de juegos por lo que corrió a este para entretenerse dejando a ambos adultos solos.

-Escucha.-Hablo YeoSang tomando la mano de su acompañante y mirarlo de frente mientras esperaban que la comida llegara.-No me importa que ya tengas un hijo, considero que verdaderamente sigues igual de guapo como siempre, no recuerdo bien la razón por la cual terminamos nuestro noviazgo, pero si recuerdo que te amaba demasiado, y si alguien te hizo mucho daño, te aseguro de que si volvemos a intentarlo nadie te tocará, ningún pelo. Amaré a Hong como si fuera nuestro hijo e incluso si tenemos suerte tendremos más.

Claramente San se había sonrojado ante la petición del chico pues había sido muy repentino, así que solo soltó un suspiro y bebió un poco de su café llenando de espuma sus labios, ya que bebía de un cappuccino.

YeoSang, de igual manera no perdió la oportunidad y retiró con sus labios aquella mancha. Sin embargo no contaba como un beso pues, había sido solo un roce.

San no había presentado aún su respuesta, así que continuó sonrojando.

-Sin duda te ves hermoso de esa manera, siente.-Dijo aquel tomando la mano del teñido de negro y colocándolo en su corazón donde se dejó ver como se agitaba rápidamente, de la misma forma YeoSang colocó su propia mano en el pecho de San sonde se ubica aquel órgano bien distinguido por ser el que bombea la sangre y palpita, tras tener la corta distancia. YeoSang no dudó en tomar sus labios con los del sujeto frente suyo provocando que recordarán sus viejos momentos juntos en la adolescencia. A decir verdad, San se sintió bien ya que le hacía olvidar lo que había pasado, por lo que continuó el beso para separarse y hablar.

-Acepto.

DON'T MARRY ME (WooSan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora