DON'T MARRY ME (WooSan)

11

Iniciando el plan con un desayuno.

Ambos se dirigieron al restaurante y tomaron sus asientos, San soltó una risita al ver que su marido solamente miraba a su alrededor y no al menú.

-¿de nuevo pedirás algo como yo?

Mencionó al ver que el sujeto a su lado no hacía nada, pero con una risita hizo su pedido.

A lo lejos, cuando su comida les fue entregada, observó como había una persona simulando ser un turista con su cámara en la mesa, de seguro era un paparazzi por lo que WooYoung tenía que tener extremadamente cuidado con sus gestos y forma de comportarse.

En el momento en que su contrario se llevaba una cucharada de su comida a la boca este le detuvo sujetando sus manos.

-Provecho, come todo para que estés sano. Tal vez saliendo de la comida demos un paseo por la ciudad ¿te gusta la idea?.

-Por supuesto que ¡sí!.-Sin dudar San no se había percatado de que alguien los espiaba por lo cual se comportaba de manera natural como siempre suele ser.

Su comida continuó hasta que ambos terminaron, de igual forma lo hizo el reportero.
En el momento de pagar San había sacado su cartera, a WooYoung no le molestaba aquello pero ahora no quería quedar mal frente a todo Corea, por lo que este de inmediato puso su tarjeta pagando.
San se entermeció ante aquel acto y juntos salieron de ahí.
Donde estaban sujetándose de las manos.

Comenzaron con su paseo por la ciudad y procuraban no separarse de sus Manos, San estaba tan contento, que ambos parecían ser una pareja realmente feliz.

-¡oh! Mira que lindos, llevaré unos para mis padres y hermana, de seguro les gustará.-San se encontró una tienda de recuerdos así que rápido comenzó a ver que había ahí para decidir que objeto comprar formando parte de los recuerdos.-¿crees que este imán de un camarón se verá bien en nuestro refrigerador?.

-Compra lo que tu quieras, me da igual.-Habló en su tono de siempre y prefirió esperar a fuera, observó como había gente con su cigarrillo en mano por la ciudad y nadie les decía nada así que aquello le motivó en querer uno, así que con valentía y un inglés no tan bueno se decidió pedir uno a el sujeto fumador, este le sonrió y se lo entregó de la misma forma que le ayudó a prenderlo.

Aspiró de aquel y expulsó su aire sintiéndose aliviado ya que pasar tanto tiempo con San de verdad le estresaba demasiado y aquel producto con nicotina  le ayudaba de verdad.
No entendía porque el sujeto tardaba mucho comprando, así que caminó este mismo por la ciudad.

Cuando San terminó sus compras salió sumamente feliz pero asustando  al no encontrar a su marido, tampoco tenía su número telefónico para que este le llamara por lo que entró en pánico y  comenzó a caminar sin rumbo tratando de encontrarlo, estaba del otro lado del mundo, en un país del cual no conocía, con un lenguaje diferente del cual no hablaba y su inglés era pésimo por lo cual mientras caminaba comenzaba a sudar por lo nervioso que estaba. Su teléfono celular no tenía Internet así que solo caminó sin rumbo.

Por otro lado aquel de cabellos morados regresó a la tienda observando que San se había ido, sin dudar pensó en que este debía de estar asustado bajo a una mesa. Pero no se alarmó tanto, pues aquello le había dado más facilidad de hacer lo que quisiera solo.
Y su primer propósito era encontrar una playa nudista, así que llegó al hotel y con el Internet de ahí comenzó a buscar encontrando uno por lo cual se vistió de la manera perfecta para el mar y tomó su protector solar y toalla junto a sus gafas para irse a aquella playa.
Tal cual como eran las imagines en las páginas de Internet las mujeres tenían un cuerpo perfecto desde aquella parte del mundo así que rápido sus hormonas le dijeron que se apresurara al entrar, dijo que era soltero y les dio el número a muchas chicas, las cuales unas les habían dicho que sí irían al hotel donde se hospedaba. Dejándolo muy feliz e incluso un grupo de chicas le invitaron la comida ese día.

La noche se aproximaba lo cual indicaba que las fiestas iniciaban en los clubes nocturnos. Las chicas le insistieron tanto a WooYoung para que asistiera pero este no dudo en aceptar y rápido se sumergió al auto de las chicas donde dos de ellas se la pasaban apreciando su cuerpo, mientras que otra tomaba fotografías y la última restante conducía.

Se encontraron en un semáforo y WooYoung divertido miró a su alrededor, ahí estaba en cuclillas San llorando, un oficial de policía se le había acercado pero este no sabía cómo comunicarse por lo cual lloraba con mayor intensidad.
WooYoung soltó un suspiro, tenía la oportunidad de ser infiel e irse a divertir o de ir en busca de su esposo llorón.

Soltó un suspiro y le susurró algo a la chica de su lado izquierdo, está asintió y le permitió el pase para que bajara del auto, el semáforo se puso en verde por lo cual el auto partió donde ellas no podían ver a que se había bajado.

-¿jamás te dijeron que si no encontrabas a tu familia te quedaras en el sitio?.-Habló acercándose al sujeto, San no pudo más se encontraba feliz de verlo que le abrazó.-Gracias oficial, lo estuve buscando como loco.-El sujeto asintió y se alejó, para luego retirarse bruscamente del abrazo.

-Felicidades arruinaste mi día.

-¿qué? No... Tú eres el que se fue no Yo, solo quise buscarte pero no estabas y luego me perdí totalmente.

-A causa de esto ya no saldremos más ¿oíste? Yo solo fui a una tienda que estaba en frente y tu te diste un paseo por la ciudad lloriqueando.-Dicho aquello le tomó de la muñeca y de esa forma caminaron hasta el hotel de vuelta.

-WooYoung... Quiero volver a Corea.

-Descuida cariño obviamente lo haremos.-Hablaba con su voz sarcástica frunciendo su ceño para irse a su propia habitación de hotel.

Soltó un suspiro el mayor por unos cuantos meses y también se encerró en su habitación, necesitaba hablar con alguien por lo cual llamó a su hermana pero está no contestaba, así que llamó a su madre y esta sí contestó.

-¿hijo? Es muy temprano, recuerda la diferencia de horario ¿sucedió algo?.

-Lo siento madre, no me percaté de la hora, solo quería hablar con alguien.

-dime cariño, ¿qué querías hablar? ¿Ya hicieron lo que en toda luna de miel se hace?.

-madre, no digas esas cosas.-Dijo un poco avergonzado, abrió la puerta asomándose un poco a la habitación de su marido y este se encontraba sin camiseta recibiendo a dos chicas muy sonriente, en cuanto WooYoung observó que San lo veía rápidamente cerró la puerta dejando entrar a las mujeres.-Si madre ya lo hicimos.

Dijo un poco triste y molesto, su madre gritó feliz pues creía que la relación iba excelente.

-¡MI HIJO YA NO ES VIRGEN!.-Gritó contenta despertando a todo el personal.-Pronto cariño, quiero nietos.

-Si madre, descuida saldrán a su tiempo.-Dijo un poco disgustado, soltó un suspiro y decidió terminar con la llamada pues pensó que era una mala idea así que solo comenzo a guardar su equipaje, no le importaría nada este volvería a Corea por su propia cuenta al día siguiente.

No pudo dormir, sólo lloraba, quería estar solo con su familia, ya no quería estar casado con esa persona que sabía que no era bueno para él.

Si se suponía que en Corea tenía a su novia ¿por qué invitaba a la habitación a chicas?. No lo entendía por lo cual se dio cuenta de la clase de hombre que era asi que prefirió cortar su distancia y de la misma forma prepararía su discurso para mencionarles a sus padres que quería un divorcio.