30 Días [De Spiritshipping]

Nuestra boda es la más hermosa

Johan estaba de verdad frustrado, no faltaba más que dos días para su boda y sentía que todos habían conspirado contra él. Comenzando desde el sastre hasta el dueño del lugar del evento. Todos habían tenido un problema que los obligaba a cancelar el acuerdo que habían hecho con él.

La frustración de Johan se transformó en tristeza al sentir que su boda soñada no se realizaría. Ni siquiera tenía su traje. Suspiró mientras se repetía una y otra vez que encontraría solución. Tocaron a la puerta y Johan fue de inmediato a abrir.

–¡Johan!-Dijo en tono cantor Judai mientras lo abrazaba, pero luego vio el estado del otro.–¿Sucede algo malo?

–Todo.-Respondió en un suspiro.–El lugar del evento me canceló, el sastre olvidó pedir la tela para mí traje, el repostero tuvo que hacer un viaje urgente y el pastel está inconcluso, cómo van las cosas no me sorprendería que en el registro me digan que ese día estará cerrado.

–Pero... ¡Oh! ¿Y si haces la boda aquí?

–¿De qué hablas?

–No hay dinero y cancelaciones de por medio.

Dijo con una gran sonrisa mientras Johan dejaba de observarlo con el ceño fruncido para comenzar a reír.

–Bien, bien. ¿Y cómo lo haríamos?

Judai observó a su alrededor mientras comenzaba con mover el juego de sofá a un lado, la mesa fue puesta en una esquina mientras el castaño después dibujó unas flores en un papel para decir que allí iría el centro de mesa. Johan sonrió al preguntar si solo habría uno para todos los invitados.
Judai también sonrió mientras sugería que debía organizar mejor a los invitados.
Luego fue a la habitación de Johan mientras escogía algunas prendas para forma un atuendo elegante.

–Listo. Ahora solo falta el certificado... ¿Podemos hacer uno?

–Eso es imposible. Pero gracias por intentarlo.

Ambos carcajearon mientras Judai sacaba su teléfono. Johan lo entendió y lo dejó continuar mientras negaba con la cabeza fingiendo molestía.

–Creo que lo replique lo mejor que pude. Ahora, ¿tienes tus votos?

–¿Votos? Es un matrimonio civil no creo que sea necesario... ¿O sí?

–He oído que si hay en algunos. Y yo que quería escucharlos.-Hizo un puchero el castaño mientras Johan asentía y comenzaba a escribir.

–Aquí está.

–Y éste es el mío.

Dijeron al unísono mientras ponían los votos a un lado del papel que había rayado Judai con anterioridad.

–Ahora... ¿Qué hacemos?

Johan observó las hojas y luego a Judai mientras levantaba los hombros y los bajaba de inmediato.

–Podemos comprar un pastel también.

De todas las respuestas que podría darle del castaño, en definitiva esa no era la que esperaba. Johan sólo sonrió de forma contagiosa mientras le decía a Judai que fuera por un trozo de pastel que tenía en la nevera.

Luego de su regreso, Johan le informó lo que había encontrado por internet sobre las bodas civiles.

–Entonces ¿Qué esperas? Vamos a casarnos.

Johan mostró una dulce sonrisa mientras asentía.

Ambos leyeron sus votos para después mirarse a los ojos, levemente emocionados mientras tomaban los bolígrafos otra vez para firmar la réplica que había hecho el castaño de un papel de matrimonio.
Luego del pastel, Judai extendió su mano hacia Johan para invitarlo a bailar.
No había música pero ambos estaban bailando mientras seguían el ritmo de sus pasos. Judai tomaba el hombro de Johan con delicadeza mientras con su mano libre se tomaban de las manos, Johan a su vez sostenía la cintura del castaño.