Elemental Redemption: Origin (libro nº1)

Capítulo 10: Sin Sentimientos

Una mañana, a las 10, nublada, dejaba caer un pequeño rayo de luz sobre cuatro tumbas colocadas en fila, una a una. Varios familiares miraban asombrados la escena. No por el rayo de luz, no, sino por el hombre de pelo blanco que se encontraba mirando las cuatro tumbas. La madre de uno de los difuntos se acercó a ese hombre.

-Buenos días- le saludó la señora.

-Siento la molestia, si quiere me voy ya- respondió Coldshot mirando las tumbas igualmente.

-No se preocupe, ¿usted es el de la tele, no? El del hielo...

-Sí, ese soy yo- dijo tajante. No parecía querer tener conversación.

-¿De qué conoce a 2bass y Khalim?

-Eran amigos míos... Muy buenos amigos míos... Una pena que ya se hayan ido ahora y no más tarde.

-Una pena por ellos. ¿Qué pasó ahí dentro?

-Un hombre atacó. Ni siquiera sé si era un hombre... Luego se marchó sin más.

-¿Y los familiares de Khalim? ¿No han venido?

-Khalim ha sido huérfano desde que a los 4 años sus padres murieron en un accidente de tráfico. Entró en el programa de acogida y de ahí no se sabe nada de sus padres que los adoptaron.

-Vaya, eso no lo comentó a nadie...- la mujer estaba sorprendida con la noticia.

-¿Y usted qué hace aquí y no en Argentina?

-Es mi hijo el que está muerto... Tenga un poco de respeto.

-El respeto es lo de menos ahora si una madre abandona a su hijo en un país desconocido al primer año de su vida. ¿Por qué?- Coldshot preguntaba intrigado pero parecía no estarlo porque miraba fijamente a las tumbas siempre, como si le hablaran.

-No tenía otra opción- confesó la madre, rendida a la pregunta de Coldshot- Era una época difícil en Argentina. Una crisis económica allí es una de las peores cosas que pueden ocurrir. No podía dejar que estuviese en ese país. Al año, vine aquí a España para cuidarle.

-Ya veo...- Coldshot parecía haber respondido sus dudas- Si no le importa, me quedaré aquí. Supongo que tendrá que hacer cosas hoy.

-¡Anda! ¡El trabajo! ¡Se me olvidó por completo!- gritó la señora, dándose cuenta de la hora- Disculpe, tengo que irme.

-Que pase buen día- se despidió Coldshot en vano, ya que la señora se fue corriendo.

Continuó mirando las tumbas con una mirada nostálgica y de culpa. Una voz detrás suya interrumpió esa mirada.

-Entiendo por lo que pasas ahora mismo Coldsh-

-No lo entiendes, Kraken. Nadie lo entiende y nadie lo entenderá. Solo puedo arreglar esta mierda yo, el que ha liado este barullo.

Coldshot dejó de mirar las tumbas y decidió irse de esa zona pero se paró al escuchar de nuevo a Kraken.

-Sabes que ahora no estás solo. Tienes a Cryo y a mí de tu lado.

Coldshot escuchando lo que dijo, pensó por un momento y se dio la vuelta para encarar a Kraken.

-¿Y por qué estás tú siguiéndome todo este camino si ni siquiera te conozco?

-Porque aunque tú no me conozcas de nada, yo te conozco de hace bastante tiempo. Te conozco a tí y a tu padre.

-Es bastante graciosa esa mentira- murmuró Coldshot a lo bajo.