Capítulo 31: El otro yo

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Diez minutos habían pasado y Sawler aún seguía cortando raíces de la planta carnívora y esquivando todas sus pequeñas plantas de estas raíces. Su tiempo se agotaba, se notaba el cansancio de los movimientos de Sawler y poco a poco decaía en un pozo de veneno eterno.

-¿Qué pasa, Sawler? ¿Estás cansado?- reía Poison mientras continuaba atacando sin dar descanso a Sawler.

Él no podía soportar más ningún ataque y retrocedió bastante lejos de la planta. Una vez hecho eso, empezó a analizar la situación actual. Ahora no solo su brazo izquierdo estaba envenenado y totalmente inservible sino que, ahora, su pierna derecha también decaía sobre el efecto del veneno. Había probado de todo con la planta: intentó congelar su piel pero no era nada efectivo.

-¿Crees que no he aprendido de tus habilidades por si las usabas? La piel de mis plantas está hecha a prueba de tu frío- fardeaba Poison.

Sawler también había probado a intentar trocear lo más posible la planta carnívora pero siempre que partía una raíz salían dos más con más plantitas pequeñas. Era imposible destruir su defensa y Sawler no podía mantener su energía estable. Si continuaba atacando, en algún momento colapsaría y ella tendría una ventana para acabar con él, y eso quería evitarlo. Retrocedió hasta una distancia segura y miró a la planta desde lejos.

-Se me están acabando las ideas, Cryo. ¿Alguna pasa por tu cabeza?- preguntó Sawler buscando ayuda mientras miraba ahora el hielo que se esculpía en el suelo.

-Hace casi una semana que no combato, realmente estoy bastante desconcertado y oxidado en estos aspectos.

-Llevas casi 4000 putos años sin despertar y no estabas tan oxidado antes. ¿Qué pasa ahora? ¿No te acuerdas ni siquiera de los combates antes de la incubación o qué?- se quejó Sawler mientras recobraba el aliento.

-No es eso. Antes el poder era limitado, tenías un cierto límite. Ahora el límite lo impones tú, a tu propia manera. Por eso no sé qué podemos hacer. Además, aquí el estratega eres tú- el hielo se volvía a esculpir.

-Yo seré el estratega pero cuando las cosas van mal, una estrategia no es siempre la solución. Un momento...- replanteó sus palabras Sawler- Una estrategia no siempre es la solución, pero si la creatividad.

Sawler se reincorporó para mirar a la planta carnívora. Literalmente andaba a la pata coja hacia donde estaba la planta carnívora y esta la miraba.

-¿Otra vez vuelves a atacar? Una técnica bastante inútil el persistir- mencionó Poison mientras ordenaba a la planta carnívora moverse.

La planta carnívora lanzó sus raíces hacia Sawler y lo atrapó sin resistencia alguna. La planta lo atrajo hacia su boca y la abrío mostrando su interior.

-Vaya, yo pensaba que tu portador era más inteligente, Cryo. Y yo pensaba que tu eras más listo de lo que pareces ahora. Sinceramente, has cogido un portador completamente inútil- declaró Poison- Amiga mía, empieza a comer cuando quieras.

La planta carnívora abrió aún más su boca para meter a un Sawler que tenía los ojos cerrados. Sawler simplemente suspiró profundamente y abrió los ojos para encontrarse a una planta sin congelar que se encontraba totalmente estática. Poison se quedó inédita.

-¿A qué estás esperando, plantita? Tu comida ya está lista- repitió Poison mientras miraba la escena.

-Me parece que tu plantita no tiene apetito ahora. O mejor dicho, su interior está congelado a una temperatura de 4000 ºC bajo cero- dijo Sawler sin apartar la mirada de la planta- Sí, fue inteligente por tu parte poner resistencia al frío en la piel... Pero el tejido del interior del cuerpo de cualquier ser vivo no es el mismo que el de la piel. Igualmente, por mucha resistencia al frío, cualquier ser vivo no se puede mover con una temperatura menor de 273ºC bajo cero, temperatura en la cual todo átomo deja de moverse. Cualquier ser vivo, menos yo.

Elemental Redemption: Origin (libro nº1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora