Reencarnado como Neji

Prólogo

¿En donde estoy? ¿Qué sucedió? No lo recuerdo. No puedo acordarme. Solo recuerdo... Un niño... Un autobús... Un accidente... ¡Eso es! He recordado. salvé a un niño de ser atropellado por un autobús. La gente me miraba. ¡Lo recuerdo! Me miraban llenos de respeto y admiración por haber salvado a aquel niño. Pero... Luego, la expresión en sus rostros cambió. ¿Qué pasó después? ¿Yo me salvé de aquel accidente? Creo que no, porque no puedo mover ninguna parte de mi cuerpo. ¿Me encuentro en un hospital? Creo que así parece ser.

Estoy escuchando voces. Escucho voces ¿de quienes son? ¡Espera! Reconozco una de ellas. Es la voz de mi mejor amigo Tomás, esta conversando con alguien, creo que es... con una enfermera.

- Lo siento pero ya es muy tarde, no se salvará - escuché como le explicaba la enfermera a mi amigo Tomás.

- ¿Como qué no se salvará? ¡Debe hacer algo enfermera! Él es mi mejor amigo.

- Lo siento pero hicimos todo lo que pudimos. Ya no le queda mucho tiempo.

- ¡No! ¡No! - escuché pronunciar entre gemidos a Tomás. Sentí que la cama en la que estaba dió un leve temblor. Por lo que supe que Tomás se puso al lado mio.

- Señor por favor - le pidió la enfermera a Tomás.

- Déjeme solo con él - le pidió Tomás a la enfermera - ¡Vayase!

- Señor...

- ¡Hagalo! - le gritó Tomás ya harto de la incomprensión por parte de la enfermera.

Escuché los pasos de la enfermera salir de la habitación. Entonces Tomás se dirigió a mi diciéndome.

- ¡Vamos amigo! No debes morir tienes que luchar. Me duele verte así. Quiero que todo vuelva a ser como antes.

- Yo también Tomás pero no puedo moverme, no puedo mover ninguna parte de mi cuerpo - le respondí dentro de mi mente.

- Recuerdas como nos divertíamos juntos, mirábamos lucha libre, jugábamos videojuegos o mirábamos anime juntos. Death Note, Dragón ball, Saint Seiya, Naruto... Recuerdas que nuestro favorito era Naruto. Mi personaje favorito era Sasuke y el tuyo era Neji.

- ¡Claro que lo recuerdo estúpido loquillo! A cada momento discutíamos.

- Yo te decía que Sasuke y Naruto tenían que ser los más fuertes de los jóvenes de Konoha, pero tú me decías que Neji debió ser más fuerte que ellos, al igual que otros personajes como Rock Lee, y me decías que Hinata merecía ser más fuerte que Sakura.

- Porque así es viejo - le respondí en mi mente - muchos personajes debieron tener mas participación a parte de los protagonistas.

- ¡Vamos amigo, levantate! Volveremos a discutir como antes lo hacíamos, haremos cosas juntos, jugar nuevos videojuegos, observar animes, pero debes levantarte. Debes salir de aquí.

De pronto sentí acelerarse mi pulso cada vez más y más rápido para luego ir disminuyendo y hacerse cada vez más lento. Tomás al ver esto entró en pánico y comenzó a llamar a la enfermera.

- ¡Enfermera! ¡Enfermera! ¡Ayuda por favor, ayuda!

Escuché la voz de Tomás alejarse y hacerse cada vez más y más débil. Luego escuché los latidos de mi corazón, latiendo cada vez más lento, más lento, hasta que sentí que en cierto momento se detuvo.

De pronto, volví a escuchar voces de nuevo y sentí las manos de personas rodear mi cuerpo. Me sorprendí de que dichas manos puedan abarcar todo mi cuerpo. Pude abrir levemente mis ojos y ver el lugar en el que estaba, parecía ser un hospital.

Los llantos de un bebé recién nacido se escuchaban, pero esos llantos ¡eran mis llantos! No podía parar de llorar ¡Era un bebe! Habían médicos por todos lados y escuché como se referían a una mujer que estaba tendida en una cama. Para ese entonces no comprendí lo que decían pues se comunicaban en japones pero recuerdo las palabras de cada quien así que se las narraré traducidas al español.

- Felicidades, es un varón - le expresaron los médicos a la mujer.

Al cabo de unos momentos los médicos salieron y dejaron a la mujer sola conmigo, podía sentir como me sostenía abrazandome, podía sentir su calidez. ¿Qué estaba pasando? Podía recordar mi vida pasada, recuerdo que había muerto ¿Acaso, he reencarnado en otra vida? ¿Es eso posible?

Un hombre atravesó la puerta luego de unos momentos y se posicionó al lado de la mujer que parecía ser mi madre. Escuché como comenzaron a tener una conversación.

- No me queda mucho tiempo Hizashi.

- ¡Hizashi... Ese es el nombre del padre de Neji! - pensé para mis adentros sorprendido al escuchar dicho nombre.

- No digas eso mi amor, tienes que resistir - le pidió él. Miré el rostro de aquel hombre y era cierto, a pesar de verse como alguien en la vida real era idéntico a Hizashi el padre de Neji. Era evidente que era él.

- Ya no podré resistir mucho más tiempo Hizashi - le respondió ella. Al parecer el parto había tenido complicaciones y no le quedaba mucho tiempo de vida a la mujer - prometeme por favor que cuidarás de Neji, por favor prometemelo.

¿Se refería a mi? Sin duda soy el bebé al que se refiere. Pero entonces yo... ¡Soy Neji Hyuga!

Hizashi apretó su rostro como si le costara aceptar la realidad pero luego le respondió:

- Te lo prometo, mi amor.

La mujer manifestó una sonrisa en su rostro para luego cerrar lentamente sus ojos entre los llamados de Hizashi pronunciando su nombre una y otra vez sin obtener ningún resultado, echándose entonces a llorar desconsoladamente.

Al parar de llorar, Hizashi me miró y me tomó en sus brazos con un gesto de ternura y lo escuché referirse a mí diciéndome.

- Mi pequeño Neji, ahora eres lo único que me queda. Te prometo que te protegeré con mi vida.