Tsukino Ruri no puede aceptar los finales dados por la escritora Koyoharu Gotouge, expresando siempre su descontento. Un día normal de feria, un idiota grosero, todo parece estar bien más terminan envueltos en un gran accidente
El despertar en un m...
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Me sorprendía ver el cambio en mi resistencia y velocidad, este sentimiento es ser un cazador de demonios. Aunque iba rápido la preocupación en mi no disminuía para nada ¿Shinjuro-san estaría viendo por él? Senjuro es un niño muy fuerte, pero a veces ignora su propio malestar para no causar molestias a otros
— ¡Con permiso! —exclamé mientras entraba a la residencia de la familia Rengoku como si se tratara de mi casa, voltee a ver pero Kyojuro no estaba ahí ¿fui muy rápida?— ¡Shinjuro-san! ¿Se encuentra? —intenté buscarlo, mientras recorría el pasillo hacia la habitación de Senjuro.
— ¡Cállate mocosa! —me gritó al asomar su rostro desde la habitación de Senjuro, al parecer si se preocupaba por su hijo menor.
— No lo puedo creer... Shinjuro-san tiene un paño frio en su mano en vez de una botella de sake ¿se va a acabar el mundo? —intenté bromear, pero solo gané que me fulminara con la mirada.
— Recuerdo haber dicho que te callaras y en vez de ver que hago, mejor ayúdame a curar a Senjuro —se quejó haciendo una mueca.
— Sí, si, yo también te extrañé —le respondí, mientras le daba un abrazo— entiendo que esté preocupado, pero no tenga miedo. Senjuro definitivamente va a estar bien —intenté tranquilizarle, al final pude oírlo suspirar de alivio, mientras me daba unas palmadas en la espalda.
— Entonces te lo encargo, gracias Ruri —me cedió dando una última mirada a la habitación de Senjuro para luego proceder a retirarse y perderse por el pasillo.
Ver a Shinjuro-san de esa forma me hacia dar cuenta del gran temor que tenía por perder a su familia. Lamentablemente no llegué a conocer a Ruka-san en persona, pero por las escenas del manga pude sentir que era una madre muy amorosa y que amaba profundamente a su familia pese a tener siempre un semblante serio y elegante
Creo firmemente que no es sencillo ser la esposa de un cazador de demonios y mucho menos de un Pilar, ellos que luchan cada noche contra los demonios sin que alguien les asegure su propia vida. Ruka-san para mi era una mujer muy fuerte y valerosa que impulsó a Kyojuro a ser quien es hoy en día
Por eso quiero permanecer un poco más aquí, deseo que Shinjuro-san pase más tiempo con Senjuro porque durante todos estos años Rengoku-san ha hecho lo mejor por apoyar y guiar a su hermano menor, así que si puedo ayudar a aligerar la carga del corazón de este pequeño niño, lo haré.
— Pequeño Senjuro —le llamé suavemente mientras dejaba caer una de mis manos sobre su frente
No puedo evitar que al verlo dormir en su futón con la cara roja me dieras unos enormes deseos de protegerlo. Pude comprobar que tenía fiebre y su respiración era agitada e irregular. Agradecí internamente que en los últimos meses haya ido a ver al equipo de saneamiento de los Kakushi, sin embargo Ubuyashiki-san no tardó nada en enterarse
Al final no fue algo que llegara a molestarle, sin embargo me pidió que confiara más en el y que si necesitaba algo le avisara, así que me recomendó con dos personas que me enseñaron primeros auxilios, algunos tratamientos sencillos, identificar hierbas medicinales como ungüentos y ciertos venenos
