Capítulo 13 Límite de Consciencia ꪜ

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Ruri definitivamente odiaba aquellos momentos incómodos en donde solo el silencio se percibía en el ambiente y todo gracias a una pequeña botella que a simple vista podía parecer muy inocente, lo cual de no haberle prestado la debida atención lo h...

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Ruri definitivamente odiaba aquellos momentos incómodos en donde solo el silencio se percibía en el ambiente y todo gracias a una pequeña botella que a simple vista podía parecer muy inocente, lo cual de no haberle prestado la debida atención lo hubieran seguido creyendo, pero ahora ambos se sentían apenados por dicha situación

Si bien para la joven era una situación extraña e inesperada guardaba la calma a diferencia de Sanemi que parecía haber corrido todo un maratón completo en cuestión de pocos minutos, sin embargo no le servía de mucho que ambos se mantuvieran en silencio a la espera de que pasara algo

Los ojos algo violáceos del joven no le quitaban la vista a aquella botella que residía en las manos de su compañera, quien destacó el frasco para intentar oler su contenido liberando una suave esencia floral que incluso Sanemi al otro lado de la pequeña mesa logró percibirla. Lo mejor era que se deshicieran de eso

— ¡Dame esa porquería! —declaró Sanemi arrebatándole la botella a la joven

Ruri agradecía internamente que ese incómodo silencio finalmente llegara a su fin al ver a Shinazugawa levantarse del cojín con frasco en mano en dirección a la ventana. Para su grata sorpresa Sanemi vació el contenido que de seguro terminaría en la tierra por donde crecían algunas flores que eran cuidadas por la dueña

— Tsk, no nos culpen si sus plantas hacen algo raro —masculló Sanemi molesto— en tal caso es gracias a su maldito afrodisíaco

— Shinazugawa-san... —habló Ruri captando su atención con una expresión que reflejaba sorpresa más no pasó mucho para que terminara rompiendo en risas

— ¿Qué mierda te sucede? —le cuestionó el pilar confundido mientras ponía la botella vacía sobre la mesa.

— No tenías porque tirarlo —negó la joven intentando calmarse— eso no representaba ningún peligroso para nosotros y aún así... jajajaja

— ¿Qué?

— Shinazugawa-san... ¡eres muy inocente y tierno! —declaró Ruri antes de volver a explotar en risas

— ¡¿Hah?! —Sanemi evidentemente lucia ofendido— no digas tonterías sabiendo que soy mayor que tu —le reprochó cruzándose de brazos

— Pues basándome en tu última acción... tal parece que la edad y el nivel mental son diferentes en ti, Shinazugawa-san —negó Ruri a duras penas limpiando las lágrimas que escapaban de sus ojos de tanto reír

— Sea mental o no, al menos puedo deducir que sus plantas han de absorber muy buenos nutrientes —soltó Sanemi con una vaga sonrisa de lado

— ¡Oh, es cierto! —recordó Ruri mirándole divertida— ¿cómo era? "Si sus plantas hacen algo raro culpen a su maldito afrodisiaco" ¿no?

Los ojos verdes observaban alegres al chico frente a si quien parecía meditar sus palabras antes de terminar anchando su sonrisa mientras Ruri nuevamente se desbarataba en risas sosteniendo su estómago debido al dolor. Después de unos segundos se recompuso sorprendida de ver a Sanemi sonriendo

𝙁𝙪𝙚𝙜𝙤 𝙚𝙣 𝙩𝙪𝙨 𝙊𝙟𝙤𝙨 - 𝙍𝙚𝙣𝙜𝙤𝙠𝙪 𝙆𝙮𝙤𝙟𝙪𝙧𝙤 ꪜDonde viven las historias. Descúbrelo ahora