Capítulo 10

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—C-Creo que aquí estaremos bien...¿Kacchan?

El rubio no respondió se tiro al pasto donde estaban y apoyo su espalda en la pared.

No paso mucho hasta que Deku hizo lo mismo.

— ¿Quieres hablar?

Bakugou extendió sus rodillas y apoyo su cabeza en el hombro de el más bajo, sus brazos estaban cruzados sobre su pecho.

—Dame diez minutos —susurro débil en su oído.

Izuku sonrió triste y le acarició sus cabellos.

—Pueden ser más de diez, yo por hoy me voy a saltar las clases.

Bakugou soltó algo como una gruñido pero fue tan bajo que Izuku temió por un momento habérselo imaginado.

El único lugar que se le ocurrió para esconder a el rubio por al menos unas horas fue la parte trasera de el edificio de Música, Camie le había comentado que ni un alma pasaba por ahí y que se podía escuchar el sonido de distintos instrumentos.

Como en ese momento, parecía un piano lo que sonaba a la distancia.

Una melodía dulce, triste y nostálgica.

Encaja con Kacchan.

A diferencia de su relación con Todoroki la de su amigo había durado más, mucho más y era complicada.

Al menos las partes de su historia que estuvo dispuesto Katsuki a compartir con él.

—Deku.

El pecoso se asustó un poco cuando lo escucho hablar había creído que el rubio estaba durmiendo ya que sus ojos se habían cerrado.

Pero estaba equivocado.

Vio como las lágrimas solitarias caían de sus ojos, pocas pero llenas de sentimientos.

El dolor de Kacchan era mucho más profundo de lo que dejaba ver, por eso no lloraba a no ser que realmente lo necesitara.

Como en ese momento.

—Gracias.

Izuku sonrió y tomó su mano, no hacía falta un "De nada".

Izuku sonrió y tomó su mano, no hacía falta un "De nada"

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Uraraka Ochako estaba furiosa.

Ojalá tuviera rayos láser en los ojos para poder quemar a la persona que estaba delante suyo con la cabeza inclinada.

Sabía que estaba destrozando la mano de Tenya, apretándola y clavando sus uñas pintadas de rosa en ella pero no podía evitarlo.

Si soltaba su mano iba a lanzarse a destrozar la linda cara de Yaoyorazou Momo.

La pelinegra no había cambiado nada en el año que no la había visto y eso le enfurecía aún más.

Parecía la misma dulce y amable chica que había conocido en la Yuei.

¿Contigo? ¡Nunca! [TodoDeku] [KiriBaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora