¿Contigo? ¡Nunca! [TodoDeku] [KiriBaku]

Capítulo 33

Vio lo que tenía en la mano como si fuera la peor porquería de el mundo aunque solo fuera una cosita blanca y chiquita, supuestamente destinada a ayudarlo.

Odiaba depender de unos estúpidos fármacos, creía que con la comida de Deku y la dieta que seguía estrictamente estaría bien, que los desmayos no volverían más.

¡Pero, no, maldita sea su sangre!

Aguantando la mueca de asco que se formó en su rostro trago las pastillas y procedió después a comer el sándwich de pollo con chili que se había llevado para su expedición a la montaña.

Para ser la primera vez que lo hacía no estaba nada mal, lo repitiera incluso en sus vacaciones tal vez.

Subir la montaña no fue tan difícil como todos lo pintaban, además a él le gustaban los retos pero también disfruto de los paisajes tranquilos dónde la montaña le permitió subir con facilidad.

Un estanque como en que el estaba por ejemplo donde pudo sentarse en una roca y comer viendo desde esa altura el hotel de los Kirishima que parecía una torre pequeña solo distinguía el color negro de el hotel y sus ventanas.

Si...estaba siendo un día agradable aunque tuvo que tragarse sus fármacos con asco.

Bakugou alzo la mirada encontrándose con que el sol estaba siendo tapado por unas cuantas nubes grises, no había viento y los truenos tampoco estaban así que no creía que fuera llover.

Seguro que después el cielo se despejará.

Tomando su mochila, cuerdas y ganchos se puso en marcha ya que su meta era llegar a la cima antes de que su alarma sonara indicando que tenía que bajar porque Fatgum lo llevaría a su casa.

Iba bien de tiempo subir la mitad de la montaña le había tomado unas dos horas, el resto de ella debía tomarle la misma cantidad de tiempo y solo tenía que llegar al hotel antes de las ocho de la noche.

Llegaría con tiempo de sobra, tal vez.

Decirle a Takumi que era gay no fue tan difícil comparado con soportar la mirada de su abuelo.

Y Eijirou estaba seguro que eso no tenía que ver con que su madre se lo halla facilitado o otra cosa, directamente su padre e abuelo no se parecían en cuestiones de personalidad.

Eso era lo que hacía que estuviera temblando en aquellos momentos en la silla de el comedor.

Takumi era como padre bastante comprensivo, tranquilo y un poco divertido claro que podía ser estricto cuando quería pero cuando le dijo que era gay el mayor solo se encogió de hombros y sonrió con cariño, luego le dio una palmada en su espalda y pregunto si le gustó el chico rubio que había estado en la fiesta de ayer.

La mandíbula se le cayó hasta el piso cuando vio a Takumi sonreír pícaramente como si hubiera dado en el banco.

Dios, si su padre supiera que ese chico lo traía enamorado desde la Yuei se le hubiera reído en la cara y dicho que un hombre de verdad ya hubiera actuado para conquistarlo.