Capítulo 11

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Ya era temprano cuando Mika se sentó en una de las mesas largas de la biblioteca del palacio. Los asientos más cómodos, y las mantas más gruesas lo arropaban mientras tomaba en sus manos libros y más libros.

Amaba leer, pero esta vez era diferente ya que se vio obligado a hacer una investigación sobre algunos miembros de su familia... Bueno, algunos de los miembros de la corona solían dejar diarios sobre consejos y estrategias de gobierno, para dejar todo el conocimiento de la vida a futuras generaciones.

Entonces, todos estos tomos estaban con Mikaela ahora. Él tomaba nota y daba fuertes suspiros debido al estrés y fastidio que cargaba. ¿Él estaba haciendo esto por él o sólo por Yuu? Vaya que le habían interesado más las entradas de vampiros compartiendo los mejores consejos para conquistar demonios y también humanos. Tenía el doble de oportunidades de usarlas con Yuu.

Miró con las mejillas rojas una de las recomendaciones de un predecesor suyo. "Muchos demonios se alimentan de deseos, viven más tiempo y más felices si hacen esto, y dependiendo de la intensidad y pasión del sentimiento ellos comerán. Algunos suelen alimentarse de ambición, codicia, odio, lujuria y el más fuerte; el amor... El amor de verdad hace a los demonios tener una fuente de alimento duradera y pura. A diferencia de la lujuria, por ejemplo"

El rubio bajó la mirada, cerrando aquel libro.

-- Así que... Amor de verdad --Suspiró un poco recordando también el dato de que los demonios tienen mayor probabilidad de infidelidad-- Puede ser más fácil seducirlo a que note que me gusta -murmuró con una pose pensativa-- ¡Waaah! ¡No! ¡No podría...! Oh, qué te pasa Mika, tú no eres así --suspiró cubriendo su rostro sonrojado-- Va contra tus principios, además tú no tienes nada de sensual.

El rubio tenía una discusión con él mismo, una discusión realmente tonta. Oh vamos, todos saben que el primogénito de los Tepes es el vampiro (y posiblemente el príncipe) más hermoso y deseado de todos.

Sin embargo, en realidad Mika era un total desastre en temas del amor, se ponía nervioso y vaya que era muy muy lento y torpe. Frustrado es poco para describir la emoción que sentía, mierda, siempre pensó que al conseguir pareja él tendría que esperar, pero tener que tomar la iniciativa le hacía ponerse tenso. Todo era diferente con Yuu, estaba contra el reloj ya que ese tonto ya quería casarse... ¡Por Drácula! Sólo tenía veinte. Su padre se casó a los doscientos sesenta. ¿Si quiera tenía posibilidad?¿Yuu era bisexual o era heterosexual?

-- Demasiada lectura por hoy --suspiró, bebiendo otro de ése desagradable té de hierbas que Krul le había traído, vino acompañado de una regañada de parte de ella, diciendo que la dichosa enfermedad era letal para cualquier Tepes. Cosa que hacía enloquecer al rubio--.

¡SOLO ES UN CHICO, MALDITA SEA!

Mika apilo todos los libros que aún no leía y tomó su capa antes de irse de la biblioteca.

-- Akane —llamo la atención a la chica que estaba a pocos metros de él, con un libro en manos también. Ella se le acercó con una sonrisa ante el llamado— lleva los libros a mi habitación, y pide que me preparen ese pastel de sangre que me gusta por favor --ella Asintió y tomó los libros que ya había leído el rubio y los coloco en una pequeña carreta para guardarlos en sus lugares correspondientes--.

Ahora el rubio se encaminaba a la habitación donde ahora estaba Yuu, se paró en frente y miró a los guardias en la puerta del azabache, conservando su semblante serio.

-- Déjenme sólo con él --murmuró mirándolos, haciendo el mayor esfuerzo por mantener la calma, que su voz no tiemble o algo así--.

Cuando se alejaron lo suficiente, suspiró y tocó la puerta. Esperando a que el menor le atienda, lo vio sin el chaleco, ni la banda, ni la capa. Solo la camisa y una toalla en el cuello, al parecer recién había terminado de bañarse.

Royals [YuuMika]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora