CINCO

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Sarah estaba teniendo una mañana confusa, estaba en el comedor de su edificio desayunando con Adam, hablaban de varios temas, una parte de ella quería contarle lo que estaba sucediendo, pedirle su opinión o incluso su ayuda, pero también le asustaba que el proyecto le pareciera atractivo y aunque creía conocer a Adam, también sabía que la ambición era poderosa y era capaz de transformar a una persona en su peor versión. Prefirió guardarse el tema y limitar a sus personas de confianza en Maia.

— ¿Sarah, estás escuchándome?

Miró a Adam — Si claro— mintió

— ¿Y estás de acuerdo?

Sarah se tomó unos segundos para pensar en las consecuencias que podrían tener contestar aquella pregunta, pero tampoco quería admitirle a su acompañante que llevaba casi media hora hablando solo

— Si — dijo insegura

Adam le dio una sonrisa de satisfacción

—  ¿Puedo preguntarte algo? — dijo Sarah después de una pausa

— Por supuesto — el puso ambos brazos sobre la mesa e inclinó la cabeza

— ¿Qué serías capaz de hacer por la ciencia?

— ¿A qué te refieres?

— A los sacrificios ¿Has sacrificado algo hasta ahora?

— Por supuesto, desde el inicio, dejar mi hogar fue difícil.

— ¿Y has sacrificado a otros?

Los ojos de Adam la estudiaron — No— soltó aire — ¿Y tú Sarah? ¿Sacrificarías a otros en nombre de la ciencia?

— No

— ¿En que estás metida?

— En nada, vi un documental el otro día sobre la segunda guerra mundial y me dejo pensando — miró a otro lado para no hacer contacto visual mientras mentía —creo que es hora de irme a clases

Adam asintió y ambos se levantaron

En el transcurso del día Sarah debatía internamente acerca de buscar al Dr. Tanner, no quería ver a sus compañeros de proyecto pero tampoco quería dejarlos sin darles explicación alguna.
Sarah llegó al departamento de profesores, había varias oficinas pero no tuvo que buscar mucho para encontrarlo; Tocó suavemente la puerta y la abrió cuando oyó el permiso

— ¿Dr. Tanner?

El hombre asintió — ¿Qué necesitas?

— Necesito resolver unas dudas acerca de mi proyecto

— ¿Soy asesor de ese proyecto?

— No... no lo creo.... no lo sé

Thomas alzó una ceja

— Leí su artículo sobre el Vibranium y sé que es un metal escaso así que quería saber cómo lo consiguió — Sarah soltó un quejido inaudible, en su cabeza había soñado mejor

— ¿Disculpa?

— No me mal interprete— se apartó el cabello que caía sobre su frente — Estamos trabajando con nanoparticulas y necesitamos el Vibranium, creí que usted sabría cómo

— ¿Con quien estás trabajando?

Sarah se mordió el labio, solo sabía el apellido de uno de ellos — Michael Morris y otros estudiantes

Si soy asesor de ese proyecto

— Oh — Sarah de repente se sintió incómoda

— Soy el encargado de distribuirles el material, así que no hay nada de que preocuparse, lo tendrán

— De acuerdo — Sarah se dio la vuelta y abrió la puerta, pero antes de que la atravesará el Doctor la llamó

— ¿Cómo te llamas?

— Sarah Benson

— Bueno Sarah Benson si yo fuera tú, no haría tantas preguntas

Ella arrugó el ceño y salió de la oficina. Se arrepintió al instante quería volver y decirle que no tenía ningún derecho a decirle que hacer y que no

— Hola Sarah — Michael Morris llegaba al edificio, la encontró aún con la mano sobre el picaporte — ¿Qué haces aquí?

— Vine a buscar a un profesor pero no está — mintió aún aturdida

— Yo vine a buscar al Doctor Tanner, el es el asesor de nuestro proyecto — señaló la puerta

Sarah trató de lucir sorprendida

— Te veré luego

Rebuscó en su mochila, tenía la mala costumbre de no llevar el celular cerca, cuando lo encontró marcó el número de Andrea, su  madre, mientras caminaba por el campus

Hola cariño ¿Está todo bien?— Eran inusuales las llamadas de Sarah entre semana

— Hola ma ¿Cómo puedo asegurarme de que algo se esté realizando legalmente?— Su madre era abogada y junto a su padre habían construido un bufete en Boston, aunque actualmente estaban separados y Andrea no vivía allí, aún solía llevar casos de fraudes 

La madre de Sarah río era la menos cariñosa de sus hijos — ¿Hay alguna situación en especifico?

Se mordió el labio — No

— Hay muchos factores cariño y todos varían respecto a las circunstancias, si compraste algo y no estás segura, debe haber algún código o número de barras que valide su autenticidad, además puedes solicitar un recibo o constancia

— Entiendo — En realidad Sarah lo entendía, pero no sabía si podía aplicarlo con sus compañeros de equipo 

— ¿Seguro todo está bien?

— Si, gracias ¿Cómo está Robert? — cambio de tema inmediatamente para evitar más preguntas

De maravilla, iremos a Nueva York  dentro de una semana  a finalizar un proyecto, quizá también visitemos a tu hermano

— Ojalá pueda verte pronto

Así será cariño — dicho eso colgó, Sarah sabía que su madre era una mujer ocupada

Después del divorcio Robert Miller llegó a la vida de su madre, en compañía de Zackary resultado del antiguo matrimonio de Robert,  y aunque era su hermanastro, habían tenido una gran e increíble conexión desde que se conocieron. Sarah guardó su teléfono en el bolsillo trasero de su pantalón y caminó en dirección al laboratorio de nano, aún no decidía entre renunciar o continuar

— Michael dijo que cuestionaste al Dr. Tanner — dijo Ethan en cuanto la vio entrar

— No lo cuestioné, fui a preguntar un par de cosas solamente— defendió molesta

— Hey, entiendo tu preocupación, es completamente normal, y olvídate de Mike siempre es exagerado y energético — Ethan se sentó frente a ella

— Aún no entiendo como conseguirán el maldito Vibranium — miró el laboratorio vació

— El Dr. Tanner lo hará, solo preocúpate por mantener toda la información aquí— con la punta del lápiz tocó suavemente la frente de Sarah

Annie entró en compañía de Michael y Sarah mantuvo la vista fija en el chico

— Deberíamos empezar

KINGDOM; T'Challa UdakuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora