CAPÍTULO ALTERNO II

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— ¿Hablas enserio? — preguntó Sarah—Tienes un ejército entero de Dora Milaje ¿Y decides llevar a tu ex novia a la misión?

— Salimos durante un año a distancia, Sarah— respondió el —¿Y ahora que estamos casados desconfías de mi?

Estaban en un pasillo alejados del resto; La iluminación era poca y su escolta de Dora Milaje se había alejado. Llevaban discutiendo casi diez minutos

— Durante todo ese año me ocultaste tu linaje — soltó Sarah. Después se arrepintió, no le gustaba echárselo en cara pero estaba enfadada

T'Challa suspiró y cruzo los brazos — No es decisión mía; Nakia se ofreció

Sarah estuvo apunto de soltar un comentario sarcástico pero T'Challa interrumpió — Es una espía excelente, conoce puntos de intercambio y a los traficantes. Pero tú eres mi esposa y no la pondré antes que a ti. Así que, si quieres que no asista a la misión, pídemelo y no lo hará

Sarah soltó un bufido. Sabía que estaba actuando irracionalmente— Odio cuando haces eso — giró sobre sus talones y empezó a alejarse — Buena suerte en la misión

T'Challa se movió con rapidez y se colocó frente a ella deteniéndola. La tomó de la cadera y la acorraló contra el muro con suavidad. Colocó una mano a la altura de la cabeza de la chica y Sarah apenas tuvo tiempo para reaccionar. 

— ¿Estás celosa?— susurró divertido mientras se inclinaba para acercarse

Sarah no respondió y trató de salir. Con agilidad T'Challa colocó una rodilla entre las de la chica y le separó las piernas. Sarah sintió que el corazón le martilleaba con fuerza y la piel empezaba a cosquillearle

— ¿Estás celosa? — repitió T'Challa

Sarah alzó la vista y dijo — No

El ladeó una sonrisa y dirigió la otra mano hacia el dobladillo del vestido de Sarah y comenzó a jugar con el; Después alargó la mano y le acarició el muslo. La oyó contener la respiración

— Haré lo que quieras — murmuró T'Challa sobre su oído, acarició con la nariz el cuello de Sarah hasta detenerse en sus clavículas — Solo tienes que pedírmelo

— Eres un tramposo — mustió Sarah

Lo oyó reír levemente y preguntar en voz baja — ¿Quieres que me detenga?

Sarah dejó salir un suspiro nervioso antes de responder — Claro que no

***

¿Majestad?—preguntó Teela mientras Sarah se tambaleaba

— Estoy bien — respondió sacudiendo la cabeza — Otra vez — blandió la lanza pero Teela no atacó.

Estaban entrenando como todos los días, pero la Dora Milaje la notaba pálida y débil.

—Creo que deberíamos detenernos por hoy; La llevaré con la princesa

— Solo es un mareo — dijo restándole importancia.

Sarah oyó la puerta de la habitación abrirse pero no pudo ver de quién se trataba. Todo a su alrededor dio vueltas ; Alargó una mano para tratar de sujetarse pero no lo consiguió. Oyó la voz de Teela a la distancia antes de que unas manos familiares la tomaran de la cintura y la colocaran de pie nuevamente.

— Ven aquí— murmuró T'Challa colocando una mano en la parte trasera de las piernas de Sarah y levantándola del suelo.

Caminó con ella hasta sentarla sobre una banca a la orilla de la habitación. Y se hincó frente a ella

— Teela — habló T'Challa — Una compresa fría y un balde, por favor

Teela asintió y salió a paso rápido de la sala

— Volviste antes — habló Sarah recuperando claridad en la vista y mirando a T'Challa

— No hables, preciosa — respondió apartándole el cabello del rostro

Teela llegó con lo que T'Challa había pedido. El rey colocó la compresa fría en el cuello de Sarah y esta suspiró ante la frescura. Acercó el balde a sus pies pero no hizo ningún comentario

— Estoy mejor — habló Sarah — Gracias

— ¿Necesita algo majestad? — preguntó la Dora Milaje. T'Challa negó con suavidad y Teela abandonó la sala de entrenamientos

— No puedes volver a entrenar de esa manera, Sarah

La chica frunció el ceño — Entrené igual que siempre

— Debes descansar del entrenamiento en general — respondió el rey — Al menos unos meses

Sarah arqueó una ceja — ¿De qué estás hablando?

— Tu brazalete detectó anomalías en tu cuerpo — explicó —Debes descansar hasta que descubramos que es

Sarah abrió la boca para protestar pero T'Challa la tomo de las manos y las apretó. Ella soltó un suspiro rendido y asintió finalmente.

KINGDOM; T'Challa UdakuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora