~ALIUM~ |BTS&BP|

-VEINTICINCO-

La película terminó en un gran final esperado por toda la sala, era más que obvio que ambos protagonistas iban a casarse en Hawaii.

Taehyung ganó en el futbolito y Jungkook no dejaba de acusarlo de usar magia para mover la pelota, mientras Hoseok se había pasado la tarde riéndose de la situación.

Los bizcochos salieron más que deliciosos, gracias a la ayuda de la vampira que luego de una siesta larga se levantó para ayudar a Jennie, París y la cocinera.

El día libre había sido relajante para todos, o bueno casi. Jimin no se había movido de la biblioteca leyendo cada página del Signa, aún que se sabía todas las palabras escritas en el.

Salir con un vampiro no sería algo fácil, pensaba el rubio mientras esperaba a que el sol se fuese desvaneciendo por la ventana de la biblioteca.

Un segundo... ¿Estoy saliendo con Yoongi?

Su cerebro, al igual que el de Rose, podía llenarse de preguntas en tan sólo dos segundos.

¿Yoongi recordará que le había prometido salir esta noche?

-Aquí están nuestros guardianes.- Bromeó Rose al ver como los tres chicos caminaban sin rumbo, parecían divertirse al mirar distintas vidrieras.

-No parece que nos hayan necesitado mucho.- Mencionó Taehyung observando cómo ambas chicas comían los últimos restos del bote de palomitas dulces. -El mundo Hominum es completamente seguro.-

-Y divertido.- La voz de Hoseok salió para asombrar a ambas chicas, ninguna de las dos se esperaba a que el brujo de cabello naranja hablara y mucho menos con una sonrisa en el rostro. -¿Qué haremos ahora?-

-Pues, en la lista queda comprar ropa.- Recordó Rose, emocionada por el hecho de usar otro material que no fuese cuero. Sin decir mucho más los cinco chicos se encaminaron a las tiendas.

Taehyung fue el primero en desaparecer entre unos puestos de ropa cara y excéntrica con dragones bordados por todos lados, luego Lisa se perdió en una joyería.

-¿Que estas buscando?- Rose quería hablar con Jungkook, después de todo ambos chicos se encontraban en paz. El la observó casi de reojo.

-Unos pantalones deportivos.- Jungkook en realidad no estaba interesado en comprar nada, solo estaba ahí junto a ella siguiéndola sin mucho sentido. -¿Y tu?-

-No lo sé... Algo lindo, creo.-

-Esa es una repuesta algo amplia.- Se burló Jungkook, intentando buscar algo entre los puestos gigantes de ropa. Rápidamente eligió un sombrero y se lo colocó para posar con el. -¿Qué tal?-

-Eso no es lindo.- Reprochó la castaña al ver como el sombrero antiguo de color café combinaba perfectamente con los ojos azulados de Jungkook.

-Seguramente para alguien en esta tienda es lindo.-

Rose bufo intentando contener la risa, Jungkook no se había molestado en sacarse el sombrero y consiguió llamar la atención de las señoras que caminaban por la tienda.

-Es lindo para mí.- Comentó Hoseok. -Me recuerda a las películas viejas.-

-¿Ves?- El matademonios parecía más que orgulloso de su hipótesis, su sonrisa algo egocéntrica volvió a mostrase pero nada parecía ser arrogante con ese gorro emplumado. -Lo lindo es subjetivo.-

-No sabias que detras de esa capa de músculos y arrogancia existía un Jungkook profundo.- Bromeó Rose, pero Jungkook sólo sonrió aún más satisfecho de escucharla.

-¿Te parezco profundo?-

-Ahgs, ya basta.- Rose empujó con poca fuerza el cuerpo del pelinegro y ambos soltaron carcajadas cuando una señora se alejo de ellos.