~ALIUM~ |BTS&BP|

TREINTA Y OCHO

-Ese no es mi padre.- Interrumpió Jimin, quien ni siquiera podía creerse a mi mismo, el vampiro se encontraba a su lado y con suavidad lo rodeo con su brazo.

-Lo siento, Jimin.- Susurró el chico del cabello blanco. -También lo siento, Rose. Debí decírtelo antes pero sentí miedo.-

Silencio, otra vez esa horrible sensación de que el mundo se va a caer frente a tus ojos y no puedes hacer nada, porque es tu culpa.

-Lo entiendo.- Contestó la rubia, sorprendiendo a todos en el comedor, mientras escuchaba las lágrimas de su hermano que se escondía en el pecho de Yoongi. - No estoy molesta contigo.-

Después de todo, Rose nunca tuvo una buena imagen de sus padres y aveces solo con verlos ella podía sentir que había algo malo dentro de ambos.

-Eso no es todo.- Taehyung se lleno de valor también. - Luego de que ese día, tus padres me buscaron para saber que había sucedido contigo. Querian entender porque habías sobrevivido al ataque.-

Jungkook resistió sus ganas de matar a Taehyung, al igual que Lisa.

-Te examine por casi un año entero, eras tan solo una bebe.- Rose trago saliva nerviosa al escucharlo recordar con tanta claridad. -Y note que había algo extraño en tu sangre, no era sólo humana y angelical.- Taehyung miraba a Rose con miedo, deseando que está no lo odiara por el resto de su vida. - Tu no sólo soportaste el ataque de Malic, sino que lo hiciste tuyo.-

-¿A que te refieres?-

-Tenias solo dos años cuando comenzaste a tener control sobre el agua. Cuando la mayoría de los Greys comienza a los doce.-

Y rose recordó, ser tan pequeña y poder crear figuras de animales con moléculas de agua en los ríos o arroyos.

-Pero luego otras habilidades comenzaron a nacer... Habilidades que nadie nunca ha visto ni tenido jamás, así que Bland me pidió ayuda para reprimir tu magia y...-

-¡¿Tu ocultaste mis poderes?!- Gritó Rose al pararse de la silla, la chica buena y amable se esfumó de su cuerpo.

-Solo te hice creer que solo controlabas el agua, pero siempre tuviste tus dones.- Taehyung tuvo que alejarse de la mesa, al ver como los ojos verdosos de Rose comenzaban a adquir el mismo tono que en la mañana, cuando una gran parte de su magia salió.

-¡Te metiste en mi mente!- Rose sintió esa misma adrenalina que la había invadido unas horas antes en la lucha contra los Elfos.

-Tenía que salvarte, de otra forma el consejo te hubiese asesinado.-

Lisa, Yoongi y Jungkook se miraron automáticamente al ver que Rose no parecía calmarse. La rubia tenía los ojos brillantes de un color tan verde que intimidaba.

-Rose, calmate...- Susurro la bruja, colocándose con movimientos suaves cerca de Taehyung.

Ella ni siquiera la escucho, estaba tan repleta de ira que en lo único que podía pensar era en las mentiras de Taehyung. En cómo el pelirrojo la había estado mirando a la cara todo este tiempo, fingiendo que nada malo pasaba con ella.

Todo lo malo estaba dentro de Rose y ella lo sabía.

-¿Ahora me tienes miedo?- Preguntó con la frialdad que brotaba de su piel, mientras un pequeño camino de agua subía por sus talones como serpientes.

Se veía tan amenazante que Jimin se encondio entre lágrimas bajo la mesa, preguntandose como podía ser tan inútil. Lisa se sintió obligada a hacer fluir su magia y chispas azules brotaban de sus dedos. Yoongi tenía sus colmillos y uñas filosas al aire, mientras que Jungkook sacó por completo su daga.