Empire I ( Metamorphosis ) [ Finalizada ]

Episodio 67

Jennie rasgó los vaqueros de Lisa y deslizó sus dedos alrededor del clítoris de Lalisa. Instintivamente ella masajeó las glándulas debajo de cada golpe rápido. Lisa rugió cuando Jennie la obligó a vaciarse. Sus feromonas brotaron, fusionándose con Jennie, encerrándolas en una sensual niebla de hormonas sexuales. La mordedura de su pecho palpitaba, cininas que se filtraban por las heridas punzantes que se habían reabierto cuando Jennie la estimuló.

— Tengo que correrme. – Jennie suplicó, lamiendo y chupando el pecho de Lisa. Ella marcó la espalda de Lisa, sus caderas un borrón en la mano de Lisa.

— Por favor. Por favor. Lisa…

— Sí. Sí. –  Lalisa gimió, inflamada por el calor de la boca de Jennie, ahogándose en su esencia.

— Sí. – Lisa enterró sus colmillos en el triángulo suave en la unión del cuello y el hombro de Jennie.

Mía. Mía.

Jennie se sacudió en el mordisco y explotó sobre el brazo de Lisa. Las caderas de Lisa bombeaban y los dedos de Jennie estaban inundados con la esencia caliente y gruesa de Lisa. Pero Jennie sabía que había más. Ella quería más. Quería algo que no sabía cómo nombrar. El instinto la instó a hundir sus caninos en la mordedura del pecho de Lalisa, pero Lisa mantuvo su rostro afuera.

— Tranquila, tranquila. –  Susurró Lisa, abrazando a Jennie contra su pecho hasta que la liberación de Jennie se redujo.

Lisa se curvó protectoramente alrededor de Jennie, a pesar de que Jisoo y Darren estarían de guardia en el bosque cercano. Sus ropas yacían esparcidas en el suelo. Una franja de estrellas brillantes y una brillante luna de tres cuartos iluminaron el claro. Contenida sólo para ver las sombras de plata jugar a través de la cara de Jennie, Lisa trazó el ángulo de la mandíbula de Jennie con su pulgar y dejando sus dedos correr sobre la marca que había hecho en el cuello de Jennie. Su marca. Suya.

— Yo soñé con esto.–  murmuró Jennie, alisando su palma hacia abajo por el abdomen de Lisa.

— ¿Qué soñaste?

Lisa contuvo el aliento cuando Jennie le acarició el clítoris. Debería decirle que se detuviera, pero no quería que lo hiciera. No se había vaciado por completo. Ella no lo haría sin la mordedura, y ella no podía arriesgarse a otro mordisco. Aún así, estaba más satisfecha de lo que había estado con otro Were. Incluso cuando Ariana la agotó hasta el punto de debilidad, nunca había tenido tal placer. Así que no protestó cuando Jennie la acarició de nuevo.

— Soñé que cazamos juntas.

Jennie besó la garganta de Lisa, y su boca. Rodó la dura y satinada cabeza del clítoris de Lisa entre sus dedos y se burló, su lengua dentro de la boca de Lalisa. Cuando Lisa gimió, Jennie empujó su lengua más profundamente. Lisa todavía estaba dura e hinchada, y Jennie quería más. Ella siguió burlando mientras hablaba.