Episodio 84

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Jisoo agarró el brazo de Roseanne y la atrajo por el pasillo y fuera de la enfermería.

– ¿Qué está pasando ahí dentro? – Roseanne envolvió sus brazos firmemente alrededor de su cintura y se apoyó contra una de las columnas del porche.

– Creo que deberías preguntárselo a la Alfa.

– Te lo estoy preguntando.

Jisoo se apretó cerca de Roseanne, su boca casi rozando el cuello de Rosé. Rosé se estremeció, y Jisoo sintió necesidad, temor y confusión. Instantáneamente protectora, agarró los hombros de Roseanne y la empujó contra su pecho.

– Qué Sucedió ¿Alguien te lastimó? – Suspirando, Rosé se relajó contra Jisoo, como si diera la bienvenida al apoyo.

– No. Nada como eso. Fue sólo... difícil.

– ¿Qué te hizo Jennie?

Jisoo recordó su advertencia a Jennie." Encuentra a otra persona para aparearte." Jennie se había unido con la Alfa hace poco, pero podría fácilmente estar en frenesí otra vez y buscar la liberación. Liberarse con una mujer no apareada como Rosé. Jisoo retumbó con una inesperada oleada de hormonas territoriales y su sexo subió a la prontitud. Envolvió sus brazos alrededor de la cintura de Roseanne y la giro para abrazarla por detrás y le susurró al oído.

– ¿Te tentó con su llamada? – Roseanne se arqueó en los brazos de Jisoo e inclinó la cabeza hacia atrás, gimiendo suavemente cuando Jisoo le lamió el cuello.

– Sabes a quién ella quiere. - Dijo Rosé. 

– ¿A quién quieres? –Jisoo tiró del lóbulo de la oreja de Rosé con los dientes y sacudió la pelvis contra el culo de Roseanne.– ¿A quién quieres, Rosé?

– Por favor. - Dijo Rosé.

Roseanne se frotó contra ella, sus gritos lamentables de necesidad obligando a las garras de Jisoo y los caninos y el clítoris a palpitar. Jisoo trató de pensar. Ella era más dura de lo que debería haber sido tan pronto, casi como si hubiera estado corriendo con la Alfa durante horas y absorbiendo sus poderosas feromonas. Roseanne, siempre tan cuidadosa de no quedar atrapada en un frenesí, incluso cuando corría y cazaba con la Manada, estaba lista. Demasiado lista.

– Es la Alfa. - Dijo Roseanne.

Jisoo respiró profundamente, entendiendo por qué ambas estaban al borde del frenesí sexual. Lalisa estaba transmitiendo sexo y furia. Todos los que estaban en las cercanías probablemente estaban sintiendo la llamada.

– ¿Ella está bien? – Pregunto Jisoo. Roseanne se apartó abruptamente, con el pecho agitado.

– ¿Es lo único que te importa? ¿No te importa lo que Jennie está pasando? ¿Cuánto dolor tiene?

– No, no me importa un Were con el poder de lastimar a la Alfa. – gruñó Jisoo, enfurecida por la necesidad de Roseanne y sabiendo que no podía tomarla. – Sólo me importa la Alfa, y a ti también.

– Eso no es justo. – dijo Roseanne suavemente, frotándose los brazos como si estuviera fría cuando tenía que arder.

– Haría cualquier cosa por ella. Todos lo haríamos, ya lo sabes.– Ella alargó la mano, pero se detuvo antes de tocar la mejilla de Jisoo.

– Sé que morirías por ella. Pero tal vez eso no sea suficiente.– Dijo Roseanne y Jisoo gruñó.

– Es lo mejor que tengo que darle. - Dijo Jisoo. 

– No. – dijo Roseanne con un suave movimiento de cabeza. – No, no lo es.

— No me confundas con otra persona. – dijo Jisoo en tono oscuro. — No he nacido para tener ternura. - Roseanne empezó a protestar cuando la puerta principal se abrió de golpe y Lalisa salió disparada, sin camisa, con la sangre brotando de las rajaduras superficiales en sus hombros, su rostro y cuerpo a medio cambio.

– El Rover. – Ordenó Lisa, con los músculos de la garganta y el pecho tensos. – Consíguelo.

– De inmediato. – dijo Jisoo, señalando a través del Compuesto a Merihan, quien estaba parada en cautelosa atención al lado del vehículo. Lisa se acercó a Roseanne.

– Jennie. Obsérvala. Cuida de ella.

– Por supuesto. – dijo Rosé.

– Lo siento si lastime...

– No. – dijo Lisa. – No hiciste nada mal.

– Espera. – Jisoo agarró el brazo de Roseanne, impidiéndole volver a entrar.

– Si Jennie está en frenesí...

–No lo está. – gruñó Lisa. Las laceraciones en sus hombros ya se habían cerrado, pero el moretón púrpura sobre su pecho izquierdo permanecía oscuro y enojado. Tiró el brazo de Jisoo y le dijo a Roseanne: – Ve a verla.

– Ella preguntara por ti, – Roseanne dijo en voz baja. – ¿Qué debería decir? – Lisa bajó las escaleras mientras Merihan tiraba del Rover frente al edificio. Abrió la puerta trasera y Jisoo saltó detrás de ella.

— Dile que me he ido.

Empire I ( Metamorphosis ) [ Finalizada ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora