Capítulo 38

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Carlos.

Es como si volviese a estar vivo.
El corazón me late a doscientos por hora cuando nuestros ojos se encuentran por unos segundos. No me había vuelto a sentir así desde la ultima vez que estuve cerca de ella, ahora ya vuelvo a entender por que me dolió tanto renunciar a lo nuestro.

Con el tiempo se me había olvidado todo lo que está pequeña persona me hizo sentir. Había logrado mantenerme alejado de los recuerdos y sentimientos que me traían pensar en ella, lo había conseguido y tenía la esperanza de no volverla a ver, y no exactamente porque no quisiese.

Me siento como si después de mucho tiempo bajo presión pudiese al fin respirar tranquilo.
Me siento tan bien de verla que tengo ganas de levantarme e ir hacia ella ahora mismo.
Pero con este último deseo vuelvo a la realidad.

- ¿Qué os pongo?.- recorre la vista por toda la mesa hasta volver a mirarme fijamente a mi, como esperando a que me atreva a decir delante de todos quien es para mi.

Intento todo lo que puedo desviar la mirada, pero me es inevitable volver a recorrerla de arriba a abajo.
Sigue estando igual de increíblemente adorable que siempre.

Ya no tiene el pelo tan largo como cuando la conocí, ahora lleva una melena que le llega un poco más abajo de los hombros. Sus rizos le caen hasta abajo y hacen que parezca más adorable junto con la pajarita del uniforme.
A pesar de seguir igual, se nota que han pasado tres largos años. Noto madurez en su manera de comportarse, noto que algo ha cambiado en ella.

-¿Qué queréis?.- me toco el pelo nervioso y rezando para que esta situación termine.

Está enfadada conmigo. Se le nota bastante en cómo me mira frunciendo el ceño y como coge el lápiz con fuerza hasta el punto de que sus dedos se vuelven blancos.

- ¿Qué pasa entre vosotros dos?.- dice de repente Óscar metiéndose siempre dónde no lo llaman.- os estáis mirando raro, ¿qué le has dicho a la chica ya? hay maneras de rechazar a una chica ...- continúa.

Estando en otra situación me hubiera reído y seguido la gracia. Ahora está claro que no es el momento si quiero seguir vivo.

- Cierra la boca Óscar.- le espeto cortándole el rollo.- ¿Queréis pedir ya o nos vamos a otro sitio fuera del hotel?.-

Cada vez estoy más nervioso.
No sé qué está haciendo aquí, no tendría que estar cerca de mi. Me gustaría saber cómo ha sabido que justamente estaría aquí. ¿O habrá sido solo una coincidencia?

- Yo quiero agua gracias... pero oye, no te desanimes, él puede estar pillado ya, pero yo no.- le dice guiñándole el ojo.

Resopla mientras veo como arruga un poco la hoja de la pequeña libreta que lleva en la otra mano.
Le pego una patada por debajo de la mesa.

- ¡Ah! ¿qué? ¿es que no sabía que tenías novia? Solo estoy de broma relájate.- me mira confuso para volver a seguir la conversación que había dejado a medias con Javi.

Dirijo mi atención a Carla nuevamente y veo como el color de su cara se ha ido completamente.

- Cuando sepáis lo que vais a pedir llamad a mi compañero, no voy a estar perdiendo mi tiempo con vosotros.- nos suelta a todos, pero mirándome a mi.

Todos se quedan en silencio mientras se va, y cuando ya está detrás de la barra Daniel que está a mi lado se acerca y me susurra;

- ¿Es ella verdad?.-

Asiento.
Desgraciadamente si.
Ojalá no lo fuera.

- Deberíamos poner una queja, ¿No creéis que se ha pasado un poco? se supone que debe ser amable.- dice Javi.
- Dejarlo estar, simplemente tendrá un mal día.-
- Nosotros no tenemos la culpa, ¿Has visto como miraba a Carlos? parecía que le iba a arrancar la cabeza.-
- No pasa nada, ¿podemos pedir para comer ya? tengo hambre.- le intento quitar importancia.

Maldito desastreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora