Sasuke aún se preguntaba ¿que le estaba sucediendo? Desde que inicio su clase por la mañana no ha podido despegar su vista de la ventana, la cual daba al campo de fútbol, donde los alumnos estaban haciendo educación física, pero quizá la razón sea ese rubio.
Ese rubio que llevaba unos shorts un poco arriba de sus rodillas y que mostraban sus esculturales piernas, una playera que se adhería a la piel por el sudor, era tan hermoso y tan sexy, el azabache no dejaba de fantasear con ese lindo rubio y su enorme trasero.
—¿Eh, profesor? El timbre sonó hace diez minutos ¿nos podemos ir? -el azabache parpadeo un par de veces y observó con el ceño fruncido a su alumno.
—Largo -fueron su secas palabras y solo basto eso y los alumnos salieron despavoridos del salón.
El azabache al ver el salón vacío volvió su vista a la ventana, maldijo al no ver al rubio en el campo.
Una semana había pasado desde que comieron juntos, ahora era una costumbre encontrarse en la cafetería para almorzar. Una semanita donde se daban toques inocentes o decían comentarios en doble sentido.
Aún recuerda cuando el rubio le dijo "Que sexy se ve comiendo de lado, se le nota mejor el..." El chico se había callado al ver que el azabache levantó una ceja, Sasuke deseaba que continuara pero el rubio solo saco una risita y se encogía de hombros.
El azabache aún no entendía por qué le llamaba la atención ese rubio. El chico era grosero, vulgar, obstinado, terco y jodidamente sexy en la forma en que camina, en el modo juguetón que habla. Tan travieso y genial.
—Mierda -maldijo al notar de nuevo sus pensamientos al rubio.
—Un maestro no dice graserías -escucha la voz burlona de su alumno.
—Un alumno tampoco pero igual lo hacen -dice el azabache levantando la mirada.
—Uhg ¿que hace? ¿se salta sus clases? -pregunta el rubio mientras se adentra al salón.
Sasuke pudo ver el meneo de caderas que lo volvían loco, tragó saliva al ver a su alumno llegar donde estaba sentado, tras el escritorio, y se sentó en la mesa dejándolo entre sus piernas.
—¿Que crees que haces? -preguntó.
—Nada, solo me senté -respondió inocente.
—Pudo hacerlo en otro lugar -le dijo tratando de sonar nervioso.
—¿Cualquier otro lugar? -pregunta juguetón.
—Cualquier otro -confirma.
—Bien -dice el chico. Se un salto se baja del escritorio pero al estar de piernas abiertas calló en el regazo de su profesor.
El azabache aguanto la respiración. Eso no era lo que esperaba.
Naruto pasó sus manos por su cuello para pagarse más al azabache.
—Se que me observaba desde la ventana, se que le atraígo -susurró lentamente el rubio, quitó una mano del cuello para buscar una de las manos del azabache y llevarla a uno de sus redondos glúteos. El azabache jadeo al sentir ese lugar tras las telas.
—N-Naruto -dice nervioso mirando la puerta. El azabache temía si alguien entraba y los descubría.
—No pasa nada. Cerré con seguro -dice el rubio acercándose al rostro del mayor.
Sasuke traga saliva. No se esperaba lo siguiente, no esperaba ese beso por parte del rubio. Sus labios suaves y tibios se unían a los suyos. Las manos del mayor se aferraron estrujando el trasero de su alumno. El rubio jadeo y eso hizo que el azabache se calentara.
Todo lo que parecía incorrecto lo mando a volar. Ya nada importaba.
El beso se intensificó y ambos querían seguir si la puerta no hubiera sido golpeada. Se separaron jadeantes.
—Profesor -la voz una mujer llamo.
—Sakura -dijo el rubio con una mueca.
—Si, esa mujer -dice el azabache volviendo atrapar los labios del chico. Naruto no se negó y devolvió el beso.
En unos minutos sus labios se volvieron adictos y no podían parar.
—Sasuke. Mi clase va iniciar. Necesito que tú y ese chico salgan -ambos de sorprendieron. Sasuke se asustó.
—No pasa nada. Yo me encargo. Nos vemos en el almuerzo -el rubio dejo un corto beso y bajo de su regazo.
Comenzó a caminar a la salida y el azabache guardó sus cosas y arregló un poco su cabello.
El rubio abrió la puerta y miró a la maestra de ética con una sonrisa arrogante.
—Ni si te ocurra decir algo. Bueno si aprecias tu trabajo o...tu vida -dijo en un susurro tan escalofriante que la mujer sintió como sus vellos se erizaban —Nos vemos -dijo alegre pasando a un costado.
El azabache también pasó sin dirigirle la mirada. La chica observó como ambos se marchaban en direcciones opuestas. Mordió su labio inferior, Naruto la amenazó, tenía que tener cuidado. Y mucho.
[...]
—¿Qué? -pregunta el rubio al ver que el azabache no dejaba de verlo.
Ambos se encuentran en la cafetería almorzando como ya es costumbre. Ninguno ha mencionado lo ocurrido en aquel salón.
—¿No te asusta que nos delate? -pregunta alzando una ceja.
—¿Por qué? Ella no hará nada -asegura Naruto.
—¿Como lo sabes? -replica —no quiero perder este empleo -dice suspirando y cubriendo su rostro con sus manos.
—Confía en mi cuando te digo que no hará nada -dice sin tanta importancia.
—No eres tú el que se quedará sin empleo -murmura molesto.
Naruto se ríe mientras gira sus ojos.
—Ya, tranquilo -dijo sonriendo.
El azabache no cree en sus palabras pero tampoco quiere seguir discutiendo. Siguen con su comida hasta que un maestro se acerca al rubio.
—Acómpañame -le susurra al oído. El rubio asiente y se levanta.
—Nos vemos -se despide del azabache y se va junto al maestro de química. Kabuto.
Al estar en un salón vacío, el rubio mira interrogante al peliblanco.
—¿Que sucede? No se me ha olvidado mi horario -dice sin interés.
—No es eso -responde —hoy iras a una misión. Te acompañará Deidara, no hagas nada mal, él te dirá los detalles, el auto te recogerá al salir -anuncia mientras se gira para salir —espero que no falles. Por tu bien.
El rubio saca un bufido, y sale molesto, odiaba que le dijeran las cosas sin anticipación. Al cerrar la puerta se encuentra con Sasuke, la cual estaba con el ceño fruncido. El rubio sonríe juguetón.
—¿Que hacías con él? -pregunta molesto, el rubio se encoge de hombros como respuesta —Naruto -reclama al ver que el rubio pretendía irse.
—¿Quiere ir a una cita conmigo este sábado? -pregunta de repente.
Sasuke se quedó sin palabras.
—Así podemos, no se... seguir con lo que hacíamos en el salón -murmura cerca de sus labios. Sasuke sonríe y pasa su lengua para mojar sus labios.
—¿Una cita? Suena bien -dice el azabache.
El rubio besa la mejilla del azabache para luego marcharse.
Sasuke aún no sabe en qué se ha metido pero pronto lo descubrirá.
Continuara...
Gracias por leer 3!!
-H 🍉
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Mi chico malo [SasuNaru]
FanfictionSer maestro no es fácil. Y tener un alumno "problema" no mejora la situación. -Cierre la boca viejo amargado. -¡No me hables así mocoso! SasuNaru \uwu/ #1 SasuNaru 08/03/21 #1 Homosexual 01/04/21 #1 Homosexual 07/12/21 Si no te gusta esta pareja ¡N...