15) Bonita experiencia

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Naruto fruncia su ceño a cada segundo, maldijo en voz baja, su sudor bajaba por su frente y sostenía su teléfono con  fuerza.

---¡Maldito infeliz! -grito pateando la guantera del auto de su profesor.

Hace cinco minutos que llegó al automóvil y para no aburrirse se puso a jugar una partida de parchís y su amigo de Corea ya le estaba ganando.

---¡Coreano de mierda! -vociferó con molestia.

Sus reclamos y maldiciones se detuvieron cuando golpearon el vidrio oscuro, Naruto se tardó unos segundos en identificar al individuo, quito el seguro del piloto y la atractiva figura de Sasuke tomo asiento a su lado.

Sasuke al verlo molesto sonrió, le gustaba ver a Naruto rojo de cólera.

---¿Podrías dejar de agredir mi auto? -pregunta divertido.

Naruto pone los ojos en blanco y pone de nuevo su vista en su teléfono. El azabache ríe bajo al ver lo infantil que es su alumno.

---Ese estúpido de Sai me ha ganado -murmura aún molesto.

---No se de que hablas -le hace saber Sasuke.

Naruto deja de prestarle atención al teléfono y lo guarda de forma brusca en su chaqueta. Observa de reojo al azabache, que conduce con tranquilidad. Están en silencio, no es uno incómodo, todo lo contrario, es relajante y sereno.

---Iremos a un supermercado algo lejos. No creo que nos reconozcan -sugiere Sasuke.

Naruto asiente y se siente un poco cansado. Ayer apenas pudo dormir y hoy le ha tocado educación física, y ni decir la acción que tuvo con su profesor. Sin más se deja caer sobre el hombro del azabache.

A Sasuke no le molesta y se siente cómodo que Naruto haga esos gestos involuntarios.

Naruto mira la mano desocupada del azabache y una idea pasa por su mente. La timidez que nunca pensó tener, vuelve, su cara se torna roja y con su mano temblorosas entrelaza sus dedos con los de Sasuke.

La sorpresa recorre el rostro del azabache, pero no lo aparta. Siente su pecho latir con fuerza y su estómago hacerse un nudo. No comenta nada y deja su mano junto a la de Naruto.

Esos gestos son los que lo vuelven loco, tan sinceros y tímidos.

---Ya llegamos -avisa el azabache, no quiere bajar del auto y dejar de sentir el toque de Naruto.

El rubio no responde de inmediato, deja que su cuerpo nervioso vuelva a la normalidad para poder enderezarse.

---Claro -dice y baja del auto seguido del azabache.

Sasuke no pierde tiempo y sujeta la mano de Naruto y eso hace que el rubio de vuelva a sonrojar. Llegan donde están los carritos y la sonrisa de Naruto se ensancha.

---Quiero ir en uno de esos -señala emocionado a los carritos.

---No creo que lo permitan -menciona.

---Oh vamos, siempre he deseado hacerlo - le ruega.

Sasuke no puede evitar ver esos hermosos ojos llenos de ruego, quería negarse pero ante esa mirada, Sasuke podía jurar que entregaría su vida por el rubio.

---Bien -acepta.

Naruto se suelta y salta feliz. Parece un niño admite Sasuke.

Sasuke tomo un carrito y ayudo al rubio a subir en el. Los empleados observando la escena con sorpresa pero ninguno se atrevió a decirles algo.

¿Y como no? Sasuke era muy alto y corpulento y el rubio tampoco tenía una cara de ser amigable.

Naruto sonrió complacido por a ver cumplido su deseo. Sasuke comenzó a recorrer el super y el rubio volvió su atención a su teléfono, quería la revancha.

Mi chico malo [SasuNaru] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora