Esto estaba resultando demasiado incómodo, jamas me paso por la mente que mi madre apareciera frente a esa puerta. Estaba enfrente de ella observándola detenidamente, no podía creer que después de tanto llegaría a volver a verla, si no se preocupo por mi durante los pasados once años, dudo que de la nada le tomara importancia; pero ahí estaba ella, como la señora de un gran empresario, observando la casa como si fuera lo más insignificante para ella, apostaba que le recordaba aquellos tiempos antes de que vistiera ropa de marca.
—Es muy sencilla, pero linda—exclamó apenas con educación.
—Bueno, no todos podemos vivir en un palacio como tu—ataque.
—Tu tía podía vivir con buenas comodidades, pero siempre a sido conformista.
Me limité a responderle.
—y, ¿tu quien eres jovencito?—hablo con interés hacia Jungkook.
—Jeon Jungkook, amigo de su hija, un gusto—saludó educadamente.
—El gusto es mío, Yong Seung. Disculpa a mi hija—me miro—suele ser algo...
No termino ya que la puerta de la casa se abrió dejando ver a mi tia, Jimin y Kwang entrar. En cuanto vio a mi hermano se levantó para abrazarlo.
—¿Qué haces aquí mamá?—preguntó mi hermano una vez que pudo zafarse de sus brazos.
—Acaso no estás feliz de verme, que no puedo venir a ver a mis hijos—exclamó.
Bufe ante su comentario, en verdad que se sacaba el premio al oscar, era tan buena actriz. Solo aparentaba porque Jungkook estaba aquí, ni siquiera le hubiera importado si Jimin estuviera presente.
—Seung—mi tia llamo su atención.
—Sujin—la miro—si que los años te han favorecido—camino hasta ella.
— y tu estas...tan, Elegante—se podía notar la tensión en ambas.
Ambas se abrazaron por un corto tiempo, paso de ella para saludar a Jimin quien al igual que su madre se sentía incómodo.
—Espero que no les moleste, pero, quiero invitarlos a cenar—propuso alegre o su intento de alegría.
—Te lo agradeceria hermana, pero creo que n...
—Tonterias—movió las manos—no te preocupes, yo pago.
Sabía que eso fue una burla hacia su propia hermana, incluso en la cara de mi Tía lo notaba pero decidió dejarlo pasar y aceptar la oferta. Mande a Kwang a cambiarse junto a los demás.
—Podemos hablar afuera—caminé hasta ellas dirigiéndome hacia mi madre.
—por su puesto—ambas caminamos hacia la salida, recibí un apretón de mano por parte de mi tia.
—Bien, soy toda oídos—prendió un cigarrillo.
—¿Ah qué has venido? Y quiero la verdad—acuse.
Viro los ojos—Ya se los dije, quería venir a verlos. Acaso es un delito—le dio una calada a su cigarrillo.
— y Taeyang, ¿No vino?—pregunte dudosa.
—No pudo venir, ya sabes, trabajo—contestó sin man.
No me fiaba de ella, no después de que prefiriera mandarme lejos. La deje afuera, camine hasta mi habitación.
—Todo bien—Jungkook se asomó por la puerta de la otra habitación—asentí.
🍴🍵…
No me sorprendía que nos llevará a un restaurante de lujo. Aunque se tratara de llevar una conversación entre nosotros, era casi nulo. Realmente quien diría que de pasar a comer en platos de plástico, ahora podía comer en vajillas que costaban quien sabe cuanto dinero.
Sobre todo ella, con esos modales. Creo que realmente nunca la conocí como debía.
— entonces Hara, ¿Que has estado haciendo?—me miró con interés.
—Tengo un empleó—dije sin más.
—Interesante, y ¿de que?
—asistente en una empresa.
—Trabaja conmigo—esta vez fue Jungkook quien hablo.
—Vaya, vaya. No me lo hubiera imaginado cariño—podía distinguir diversión en sus ojos—¿Son novios?—nos señalo ambos.
No pude evitar atragantarme al escucharlo.
Rio—Ya entiendo, veras Jeon, Hara siempre fue una niña muy obediente en casa. No solía tener muchos amigos, pero si hablamos de chicos, si que tenia suerte—la mire desconcertada.
Que pretende esta mujer.
—siempre venía de la escuela con cartas de amor por sus compañeros, creo que no te sorprenderia—lo miro—¿No crees que es hermosa?
Mentirosa.
—Lo es—contestó el.
Asi transcurrio la noche, inventando quien sabe que tantas mentiras. Aunque tapes el sol con un dedo, nunca podrás ocultar lo que hay detrás.
Nos despedimos de ella, pues lo más normal era que preferiría dormir en un hotel.
—Vaya Seung, en verdad eres una gran actriz—aquella voz salió de un callejón.
—solo cuando es necesario.
—Siempre me he preguntado por qué odias tanto a tu hija, ya ha pagado por algo que tu muy bien sabes como paso. Y aun no es suficiente para ti.
—Por dios Euwoon, no me digas que ahora te preocupas por ella. Recuerda que te la estoy poniendo en charola de plata, o es acaso que no quieres desquitarte por todo lo que no pudiste hacerle de niña—Prendió un cigarrillo.
—Realmente no necesito tu ayuda para obtener lo que quiero—se asomó dejando ver su rostro—Dime algo Seung, ¿Tu esposo sabe la verdad?—ante aquello la mujer se tensó.
Aquello le dio la respuesta, se volvió a esconder dejando oír su risa mientras se alejaba.
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