—No creo que sea curiosidad, solo quieres andar metiendo las narices donde no debes—expliqué—desde que llegue aquí lo único que haces es molestarme.
—y como te vuelvo a repetir, eso se debe a que me causas mucha curiosidad…eres como un bebé que apenas puede caminar, te fascinas con cualquier cosa que ves; aunque tu cara no lo exprese pero lo puedo notar en tus ojos. Yo nunca supe que Jimin tenia una prima el nunca te mencionó y luego llegas tu de la nada y suele pasar que eres su familiar.
—y eso a ti que te importa, no creo que sea obligación de Jimin decirte si tiene primos o no—reproche.
—Tienes razón no es obligación de Park hablarme de sus familiares pero aquí entre nos la gente suele contar recuerdos del pasado cuando eran niños—alzo una ceja para luego bebe de su taza.
—Me largo—me Levante bruscamente lanzando la silla unos centímetros lejos de mí.
—Asustada “Cerebrito” –se cruzo de brazos recostándose en el respaldo de la silla.
—Yo no me asustó con facilidad—agarre mi bolsa.
—No sabes mentir, te a puesto a que no sabrías como reaccionar si te hago preguntas—junto ambas manos sobre la mesa.
—Tu dirás—me senté esta vez apoyando los codos en la mesa y viéndolo directamente.
—¿Dónde están tus padres?
—En Seúl…
—¿Qué hacen haya?
—supongo que cosas.
—¿Ah que viniste?
—a buscar una mejor vida, supongo.
—¿Dónde estudiabas?
—Estudie toda mi vida en casa…
— así que, jamás has asistido a una escuela de verdad—negué—¿Por que?
—No lo se
—No sabes o no me quieres decir—imito mi posición
—un poco de ambas, ya terminaste—me hice hacia atrás.
—Eres demasiado mala para mentir, estoy seguro que solo el dos por ciento de lo que me dijiste es verdad.
No dije nada más era obvio que me había descubierto y era cierto lo único verdadero era sobre mis padre y lo de estudiar en casa o bueno algo así, pero no quería darle la razón ya que era un motivo mas para que siguiera indagando en mi pasado y era lo que menos quería.
—y ¿Cómo sabes que te miento? Tu no me conoces—Me crucé de brazos.
—No hace falta conocerte bien para saber cuando mientes, eres como el agua tan transparente.
—Eres un idiota ¿sabias?—no dijo nada ya que solo se limito a sonreír y si que daba miedo, es decir; en lo poco que llevo viéndolo nunca sonríe siempre esta con su semblante serio. Estaba apunto de hablar cuando un zumbido provino de su celular, al parecer era un mensaje. El cual deduje que no era nada bueno lo que le habían Enviado, aquella sonrisa se borro dejando ver de nuevo aquel semblante serio.
—El café esta vez corre por mi cuenta—dijo parándose y dejando dos billetes verdes en la mesa—vete con cuidado cerebrito—con eso se dio la vuelta y salió de aquella cafetería.
⌛…
Entre cuidadosamente cerrando la puerta, al parecer todos ya dormían puesto que las luces estaban apagadas. Camine puesta arriba queriendo solo tocar cama y caer en coma hasta el día siguiente. Entre a mi habitación dejando las llaves en la mesita del tocador me quite el abrigo y los zapatos dejándolos por doquier, gateé sobre mi cama tumbándome boca abajo. Sentí como la puerta de mi habitación era abierta pero estaba tan cansada que poco me importo quien fuera. Mi cuerpo fue cubierto por unas sabanas y sonoro Beso en mi cabeza.
Me desperté estirando todo mi cuerpo oyendo como algunos huesos tronaban, revise mi celular y eran exactamente las 6:00am, me levante buscando algunas prendas para luego meterme al baño y darme una ducha. Tome mis cosas metiéndolas en el pequeño bolso junto con mis llaves, baje las escaleras casi corriendo la verdad es que no quería llegar tarde y otra evitar toparme con mi tía… Cuando estaba apunto de bajar el ultimo escalón me de tuve, pude distinguir la voz de la tía Sujin hablando por teléfono, su voz sonaba mas subida de tono como si estuviera discutiendo con alguien, caminé con sumo cuidado asomándome un poco por la puerta de la cocina y ahí estaba ella, No tenia idea que quien podría estar detrás de la lineo pero por lo visto el tema era yo. Me retire pegando mi cuerpo en la pared como por instinto sentí que alguien mas estaba conmigo y en efecto al levantar mi vista pude ver como Jimin me miraba con un semblante triste pero a la vez serio, se acerco a mi y tomo mi muñeca…
—Tenemos que hablar…
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