ENSÉÑAME |JJK

CUARENTA🔑

Poco a poco fui recobrando la conciencia, una punzada se instaló en la parte trasera de mi cráneo. Sentía que me movía y en efecto, estaba en un auto en marcha. Con la poca visión que apenas tenía, mire a mi lado y pude ver a mi hermano inconsciente en el lado izquierdo.

Cuando quise acercarme para tocarlo, no pude, estaba atada de manos a mi espalda y de los tobillos también. Me queje tratando de liberarme pero estando acostada no me hacía fácil las cosas.

—Oh, veo que ya despertaste—escuche una voz femenina, parpadee dos veces para tener mejor visión.

Cuando sentí que no podía ser pero, me equivoque.

— ¡Que es todo esto! ¡Que le hiciste a mi hermano!—grite al borde de la desesperación.

— ¡Cállate! Tu hermano solo está dormido—el coche dio un giro brusco y dejo de moverse, quito el cinturón de seguridad y me encaro.

— ¿Qué planeas hacer?—dije con toda la valentía posible.

—Con tu hermano nada, pero contigo planeo muchas cosas—realmente no la reconocía, su mirada estaba llena de rabia y frustración.

Y sin pensarlo puso un pañuelo en mi cara, y volví a perder la conciencia.

JUNGKOOK

Lo primero que sentí fue al mover los dedos de mi mano, levante el rostro con pesadez y dios dolía como la mierda. Al tenerla completamente alejada del suelo, me apoye con mis brazos para levantarme. Una vez echo, mire hacia el piso y pequeño charco de sangre se había esparcido, desconcertado lleve mi mano hacia un costado de mi cabeza y al tocar la zona un dolor me hizo quejar, mire las yemas de mis dedos y en efecto, la sangre me pertenecía.

Entonces todo fue como flashback en mi mente, mire a todos lado y estaba solo, aquella persona ya se había ido. Reaccione buscando mi teléfono hasta encontrarlo debajo de un mueble, aunque la pantalla estaba cuarteada, aun serbia. Sin esperarlo tanto marque el número de Hará.

Un tono,

Dos tonos,

Tres tonos,

Directo al buzón.

—Carajo—vocifere.

Volví a repetir y era lo mismo, me levante completamente ignorando el dolor, pero me tambalee por unos segundos. Esto empezaba a desesperarme, así que opte por la última opción y esperaba que fuera buena.

Al segundo tono contestaron.

— ¿Qué pasa?—oí bullicio en el fondo.

—Jimin, escúchame atentamente. Necesito que vayas a tu casa y te cerciores si Hara sigue en casa—dije mientras rebuscaba entre todo los papeles.

—Jungkook me estas asustando, ¿dime que está pasando?—dijo en tono alarmado.

— ¡Joder Jimin!, deja de preguntar y solo ve a tu casa—dije alterado—te veo en mi apartamento y llámame cuando tengas respuesta—colgué.

Revise por todos lados pero ese maldito sobre no aparecía, maldecí con rabia. Estaba seguro de que ya sabían que este sobre llegaría Hara. No perdí más tiempo y me dirigí hacia mi apartamento.

POR OTRO LADO

El carro se estaciono en lo que era una fábrica abandonada, Seung bajo de él, camino hasta donde un hombre alto y algo corpulento fumaba un cigarrillo aconchado en un poste de luz. Este tiro la colilla pisándolo con el pie.