Sex Instructor | C.R.O | TERMINADA

catorce.

Me acurruqué junto a Valentín toda la película, cuando ésta terminó, fuimos a su cuarto y nos recostamos en la preciosa y hermosa cama frente a frente. Me acerqué y lo besé.

-Tus labios saben deliciosos.- susurró

- Los tuyos son adictivos, aunque quiera dejar de besarte, es imposible.

-Eres una traviesa.

"Y ni siquiera has visto lo que hago" pensé, me levanté un poco y me recargue en su pecho.

-¿Ésta es nuestra primera cita?

-Pues, sí, no me gusta ir a lugares tremendos en la primera cita, prefiero que mi chica conozca lo más interno de mí.

Sonreí, Valentín de verdad me quería.

-Te quiero preguntar algo.

-Adelante.- dijo

-Qué te gustó de mí?

Esa pregunta de verdad me intrigaba, sé que soy linda, pero Valentín apenas me conocía como alumna, era casi imposible que le gustara cómo soy, más bien le gustaba lo físico.

-Dios.. es una larga lista.

-Tenemos muchísimo tiempo.

Tomó un mechón largo de mi cabello y lo acomodó detrás de mi oreja.

-Todo empezó cuando la directora Sara me dijo que mi primera clase con tu grupo. ¡Diablos! Estaba realmente nervios, era mi primera clase impartida así que no sabía cómo iban a reaccionar ante mí, cuando entre a tu salón, todos estaban susurrando cosas de mí o de lo que harían después de clases y había una chica que me estaba mirando fuera del salón, viendo cómo las gotas de agua chocaban contra el vidrio de la ventana, eras tú. Recuerdo que llevabas una coleta, estabas triste, Los ojos llorosos, pero aún así volteaste para verme y me saludaste, luchaba contra mi mente en la noches, intentado sacarte de ella leyendo libros o aceptando invitaciones de otras chicas, pero nunca lo logré. Mi mente solo gira en torno a ti en este momento, me gustas mucho físicamente y emocionalmente, eres espectacular.

Estuvimos hablando de nosotros técnicamente toda la tarde hasta que la noche cayó, él me pidió que durmiera un rato y descansara, pero no pude hacerlo, su amigo se pegaba de una manera increíble en medio de mis glúteos y sentía cómo mi clítoris palpitaba, intenté calmar mis ansiadas de tener un buen sexo con él, pero no pude, me di vuelta y empecé a besarlo casi comiéndome su boca.

Sus manos viajaron hasta mi cintura y acaricio mi espalda con la yema de sus dedos, me pegó aún más a su cuerpo.

-No esperaba esto.- jadeó

Sonreí y seguí besándolo, con cuidado empezó a subir mi blusa bastó que me dejó solo en sostén, recargué mis manos en su pecho y me estiré.

-¡Dios! Tienes un busto perfecto.

-Ven.

Me levanté de encima de su cuerpo y llevé el mío hacia la silla que estaba en una esquina de la habitación, cuando llegó a mí, le di un beso, lo fui sentando poco a poco en la silla, sin dejar de apretar mis labios contra los suyos, mi mano acarició su entrepierna por encima de los jeans.

- Oh.- gimió

Subí mi mano hasta su miembro y lo empecé a acariciar, lentamente desabroché su pantalón y bajé el cierre, me detuve y me senté en sus muslos, me tomó de la cintura y con su mano libre acaricio mi rostro y me besó delicadamente.

Valentín y yo hicimos el amor, no puedo decir que tuvimos sexo porque no fue así, Valentín me hizo el amor, lo hizo con cuidado, delicadamente, que sus agarres fueran limpios delicados, me hizo sentir muy bien, nos quedamos dormidos, yo acurrucada en su pecho y él abrazando mi cuerpo.