dieciséis.

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-Tomás, muévete.- dije intentado empujarlo a un lado y salirme del auto

-¿Qué? ¿Qué pasa?- preguntó confundido

-Mi padre está aquí.- dije entre dientes

-¿Y?

-¿Estás loco o qué?

Me removí debajo de su cuerpo y me salí del auto cómo pude.

-Quédate aquí, yo creo que solo viene a recoger ropa para irse de viaje.

Asintió con la cabeza, rápidamente fui al jardín a "oler" algunas flores y disimular que estaba pasando el rato.

-¡¿_____?!- escuché el grito de mi padre desde dentro de la casa

Entré a la casa por la puerta de la cocina tarareando una canción y acariciando los pétalos de una rosa, mi papá escuchó mis pasos así que fue a mi encuentro, estaba un poco despeinado, pero siempre guapísimo.

-¿Qué hacías allá afuera? Vas a resfriarte.

Rodeé los ojos y le sonreí, me abalancé a su cuerpo y planté un beso tierno en su mejilla.

-Te extrañaba.- dije

-También yo mi vida, vine para despedirme, será mi último viaje de negocios antes del cumpleaños de tu madre, dónde estarán todos.

Le sonreí de oreja a oreja, lo empujé para que fuera a empacar, justo cuando escuché todo el desorden que estaba haciendo, corrí a la puerta de la entrada, busqué el auto de Tomás por todos lados pero no pude verlo, salí al porche y seguí sin recibir señal de su existencia.

-Te ves realmente sexy con ese vestido.

Me di vuelta para encontrarme con Campos, una sonrisa se asomaba por sus labios creando una imagen perfecta de él en mi mente, sé acercó a mí y besó mis labios ferozmente, acariciando mi trasero, inhalé su fresco y delicioso aliento mientras buscaba su lengua para juguetear con ella, cuando la encontré no dudé en hacer movimientos lentos y sensuales con ella.

-Ven.- le dije mientras lo había entrar a la casa, cerré la puerta detrás de nosotros y lo aventé al sillón de la sala de estar

Me puse encima de él, besando de nuevo sus carnosos labios, ahora yo tenía el control.

-_____, tu padre.- dijo interrumpió el beso -Puede vernos.

-Pensé que eso no te importaba.- sonreí maliciosa y seguí besando y lamiendo sus labios, me acomodó en sus muslos sin separar nuestros sexos y tomó mi cabello en su mano, haciendo que me llenara de excitación.

-¡____! ¿Has visto mi saco?- gritó mi padre desde arriba, seguí besando a Tomás, mordí su labio para que me dejara, pero en lugar de eso, comenzó a acariciar mi trasero

Me separé de su boca y reí en silencio.

-¡No!- dije evitando sonar acelerada gracias a la acción que estaba habiendo entre Tomás y yo -¡Búscala en el armario de mamá!- grité, Tomás mordió mi cuello y empezó a lamerlo deliciosamente

Solté mi cabeza hacia atrás y disfruté  las sensaciones que me hacía tener; placer, lujuria y excitación, puse mi mano encima de su miembro y lo empecé a acariciar por encima de su pantalón, soltó un suspiro dentro de nuestras bocas y me hizo temblar.

-Dios, ____, me pones muy caliente.- susurró

Cerró sus ojos y echó su cabeza para atrás, sentí cómo su masculinidad se puso dura y recta, sonreí y esperé a que hiciera algo para detenerme, pero en lugar de eso me invitó a continuar.

-¿Sabes que si mi papá baja y me ve tocándole el pene a un desconocido, nos mata?- susurré en su oído, puso sus manos alrededor de mi cintura y me miró

-Vayamos a un lugar donde no nis vea.- me invitó con voz pícara

-Pero, hoy no quiero aprender a esconderme.- pasé mi dedo índice por el centro de su tronco y lamí mi labio inferior -Me gustaría aprender a nadar.

Enarqué una ceja y le sonreí tentadoramente, él hizo lo mismo y rio un poco, me levantó de sus muslos para deposoitarme delicadamente en el sofá, se levantó y extendió su mano para que la tomara, lo hice y me levantó de un brinco.

-Te espero en el jacuzzi. Ponte algo lindo.

Me dio la espalda y se desapareció en la oscuridad del jardín, mordí mi labio y acaricié un mechón de cabello que cubría parte de mi busto, corrí escaleras arriba y metí cómo rayo al vestidor de mi cuarto, buscando algo que ponerme.

-¿Qué buscas?- dijo la voz de mi padre a mis espaldas

-Estaba.. buscado mí.. camisón.- tartamudeé

-Ah, ¿ya lo buscaste en la ropa de tu madre?

-Buena idea.

Intenté no parecer nerviosa así que fui lentamente al cuanto de mis padres y empecé a rebuscar en el armario de mi madre, sin encontrar nada me di vuelta, mi padre estaba detrás de mí.

-Parece que no está, tendré que dormir con la pijama de siempre.- hice una mueca de disgusto y regrese a mi habitación

-Bueno hija, cuando veas a tu madre dile que estaré de receso para su cumpleaños, ¿está bien?- me pidió

-Claro papá, cuídate, comprame algo lindo.

Bajó las escaleras y automáticamente me quité toda la ropa, quedándome totalmente desnuda, tomé un bikini y lo puse encima de mi piel, amarré los condoncitos del corpiño y del calzoncito también, me alboroté el cabello y antes de salir de mi habitación tomé una bata de baño, me cubrí con ella y baje al jardín.

Me asomé por el umblal que daba al jacuzzi y vi a Tomás metido en el jacuzzi, esperándome, sus brazos recargados en la parte exterior deo jacuzzi, admiré sus pestañas y sonreí, abrí el umblal y saqué un pie y después el otro, caminé delicadamente hasta la orilla del jacuzzi captando la atención de Tomás.

-Uhm, te trajiste una bata.- hizo un mohín

-A mí me parece linda.- dije mirando la batita con estampados de "Winnieh Pooh"

-Bueno, ¿te vas a meter o no?- preguntó algo fastidiado

-¿Vas a hacer que entre cuando salgamos?

-Te pondré más caliente que una parilla.

Mordí mi labio y sonreí

- Bien, pero no veas mi traje de baño, es ridículo.

-Venga, no veré.

Ni siquiera me quito la mirada de encima, peri aún así empecé a descubrir mi cuerpo solo cubierto por dos prendas diminutas, mientas más describía, más me miraba y eso me hacía sentir muy bien.

Cuando la bata quedó en el suelo, Tomás se acercó a mí y me dio la mano para ayudarme a entrar a la tina con agua caliente.

-Ese bikini te hace lucir aún más deseable.

Sonreí y sentí el agua caliente tocar mis pies, lueho mis muslos, mi feminidad por encima de mi ropa interior, mi pelvis, mi abdomen, mi pecho, mis brazos y mi cuello, Tomás me jaló hacia su cuerpo y besó mis labios ferozmente.

-¿Estás lista para no poder caminar dentro de tres días? Hoy te ves más sexy que nunca y no detendre el deseo que tengo de follarte más duro que nunca.

Sex Instructor | C.R.O | TERMINADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora