30. Señalar

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Agosto 2010

KiBum sabe que acaba de hacer la mayor idiotez de todas. Invitar a Hyeongseop a la habitación que comparte con JongHyun es de lo peor que se le ha podido ocurrir.

¿Y por qué? Simple. A su adorado Jjongie no le va a dar mucha gracia encontrarlo ahí, con su novio, que probablemente va a seguir insistiendo para que tengan sexo. Y sí, KiBum entiende que eso puede ser incómodo para todos, pero es la única cosa que se le ha ocurrido para que Hyeongseop no lo lleve a su casa.

Porque ahí van a estar solos, sin nadie que pueda interrumpirlos, y el decirle que NO a su novio lo va a hacer enojar, muy feo, como la última vez en que pasaron cosas poco agradables.

Cosas... que son mejores no recordar ahora.

Y tampoco es que a KiBum le agraden, al contrario, ya no quiere ser tratado de esa forma. Quiere que Hyeongseop vuelva a ser el chico que conoció hace un par de años. Así de dulce y comprensivo, el que le hacía sentir un poco feliz.

Pero bueno, por el momento ese chico parece no querer volver, así que por ahora tiene que hacer hasta lo imposible... para mantenerlo contento.

«Estoy afuera, cariño»

KiBum tiembla al leer el mensaje en su teléfono. Ruega a todos los cielos posibles para que JongHyun llegue rápido y pueda ayudarlo en éste lío.

Hyeongseop sólo se mantiene quieto cuando están frente a él.

«¿Qué pasa? Sal a abrirme la puerta»

KiBum suspira. Qué más da. Tiene que salir antes que se arme un escándalo.

Hyeongseop es completamente capaz de hacerlo.

Así que toma valor, acomoda su ropa y va hacia la puerta. Gira la perilla mientras pinta una leve sonrisa en su rostro para fingir una felicidad que no siente.

— Cariño - dice Hyeongseop, abrazandolo con fuerza, casi sacándole el aire - ¿Qué estabas haciendo que no salías?

— Estudiaba - responde KiBum. Su novio la ha soltado y se está escabullendo en la habitación mirando por todos lados - Mañana tengo que ir a trabajar temprano, en la tienda de flores que te dije ¿si recuerdas?

— Sí, claro - comenta Hyeongseop, verificando el lugar de arriba a abajo, como si buscara algo. KiBum aprovecha para cerrar la puerta - Y el huérfano ¿dónde está?

— Hyeongseop - habla el menor, enfrentandolo - Deja de llamar así a JongHyun, ya te lo he advertido. Si no voy...

— ¿Si no qué, KiBum? - el otro pregunta, mirándolo, haciéndole sentir pequeño en un segundo - ¿Qué vas a hacer?

KiBum no puede evitarlo. Su cuerpo está empezando a temblar ante esa voz enojada. Baja la cabeza con pena, porque no soporta que vea el miedo en sus ojos.

— N-nada.. - murmura, bajito.

Hyeongseop tira de él para darle un beso, pero KiBum gime de dolor porque lo está tomando con bastante fuerza por los brazos.

No quiere quejarse, ya otras veces lo ha tomado de esa forma. Y sí, sus brazos se ponen algo morados cuando lo aprieta demasiado, pero KiBum piensa que es por su piel sumamente pálida.

ᴄᴏʀᴀᴢᴏɴ ʀᴏsᴀ  | JongKey FanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora