Harry Potter y el guardián de reliquias (tomarry) (tomxharry)

CASTIGO (cap 21)

-¿Pero cómo le voy a mirar mañana a la cara?- Me susurra Ron por tercera vez en media hora, vigésima vez del día.

-Cállate Ron, ahora no. Remueve tres veces hacia la derecha.- Me estoy arrepintiendo de haberle dicho nada. Está bastante histérico desde ayer. Me obedece con la mano temblorosa, haciendo que la poción se torne azul oscuro... debería ser morado. Esta mañana Riddle no ha aparecido por el gran salón, y menos mal, capaz es Ron de desmayarse.

-¿Y si intenta matarnos?-Susurra un poco más fuerte. Escucho los pasos de Snape acercándose a nosotros. Mierda.

-Señor Weasley, ¿Qué cuchichea tanto?- Ron palidece aún más y me mira en busca de ayuda.

-Nada señor.- Respondo en su lugar. Ron suspira aliviado.

-Vaya, y yo que pensaba que usted se apellidaba... Potter.- Comenta con desprecio. Escucho las risas de los Slytherin y aprieto los puños a los lados.- Cinco puntos menos por interrumpir mi clase, dos por ese...-Señala con una mueca de asco nuestro caldero-... intento de poción, y usted señor Potter quédese después de clase. A ver si se le bajan un poco esos aires de grandeza.- Me trago mil respuestas posibles y asiento con la cabeza. Voy a matar a Ron. La clase se acaba y yo me espero en mi sitio a que Snape me diga qué hacer. Me pregunto dónde estará el alumno de prácticas. Tal vez hoy no podía venir... o está demasiado asustado como para hacerlo. –Acérquese.-Obedezco y me pongo frente a su escritorio. De por sí ya me odia, no le quiero dar más razones para enfadarle.-Deje su varita sobre la mesa y limpie todos los calderos empleados hoy.-Suspiro con cansancio. Como era previsible mi descansada noche fue solo una excepción. Anoche dormí tan poco como siempre. Malditas pesadillas. Cojo un trapo cualquiera y comienzo a limpiar los calderos. Tampoco es que me importe, en casa siempre me hacen fregar todos los platos y cacharros. Menos mal que es última hora y solo me estoy perdiendo tiempo libre. Si llego a tener un entrenamiento ahora Oliver me mata. Se me resbala el trapo y se me cae al suelo, bostezo antes de recogerlo y sigo con mi tarea.- ¿No duerme bien?- Su voz hace que me sobresalte, me giro intentando descifrar si lo pregunta para burlarse de mí o por verdadero interés. Su cara no me indica nada y tiene un periódico que parece haber estado leyendo sobre la mesa, así que me decanto por responder.

-No, duermo muy poco, y cuando lo hago solo tengo pesadillas.-Me mira pensativo y me indica que siga limpiando mientras vuelve a su periódico. Reflexiono unos instantes en mis posibilidades. No sé si Snape también es un mortífago o no, pero mi instinto me dice que lo intente.- Señor...- Me giro y trato de tranquilizar mi corazón mientras me mira con atención por encima del periódico.- El profesor Moody parece ser muy amigo de su alumno de prácticas... ¿Usted también?- Me mira con una ceja alzada, vale, eso se ha podido malinterpretar. Me aclaro la garganta e intento arreglarlo.- ¿Conoce al alumno de Moody?

-No, no especialmente.-Me responde escuetamente.

-¿Quiere conocerlo?

-A dónde narices quiere llegar, Potter.- Me pregunta molesto. Respiro profundamente rezando porque esto salga bien.

-Él es...-Mierda, esto es un error. Cierro la boca arrepentido y avergonzado por mi impulso estúpido de decirle algo a Snape. A Snape de entre todas las personas del castillo. Harry reacciona, no te quedes en silencio.- de Slytherin.- con bochorno observo su mirada que, claramente, me tacha de estúpido. Antes de que verbalice cualquier insulto me giro y sigo con mis calderos. Estúpido Harry, tenía que insinuar que es pedófilo, joder. Acabo el último de los calderos y me acerco hasta su escritorio. Le voy a avisar de que he acabado cuando una foto del periódico que está leyendo atrae mi atención. Es la librería de Hogsmeade, o bueno, lo poco que queda de ella. Le cojo el periódico y comienzo a leer.

-¿Qué hace?- Lo ignoro y sigo leyendo. Un ataque en la librería... ni rastro del encargado. ¿Qué cojones? Me miro con rabia la marca provocada por el collar de mi mano izquierda. Lo único que deseo ahora es gritar su nombre a los cuatro vientos, que alguien lo detenga... pero al mismo tiempo también siento justo lo contrario.

-Lo ha hecho él.-Le digo señalando la noticia. Me mira seriamente unos segundos.

-¿Quien-tú-ya-sabes?- Asiento con convicción. Y lo peor es que yo lo he vivido, en cierta manera siento que lo he causado.- ¿Cómo está tan seguro, Potter?

-Lo vi.- Se levanta de golpe apoyando las manos sobre la mesa.

-¿Dentro de su cabeza?- Me pregunta con un tono bastante grave. Asiento y frunce el ceño. -Intentaré contactar con Dumbledore. Harry, si algo así te vuelve a pasar acude a mí, ¿Lo has entendido?- Vuelvo a decir que sí, y Snape se sienta con suavidad. El que me haya tuteado hace que la propuesta parezca verdadera. Parece derrotado. Realmente no sé si cuando me vuelva a ocurrir lo buscaré justamente a él, pero al menos ahora existe esa posibilidad.