personal demon; [tysh]

0017

"—Me preocupo por tí, Josh, no quiero hacerte daño"

"—No se si podré protegerte de mi"

"—Yo también te amo, Josh, y estoy seguro de eso"

"—Te amo tanto"

"—Lo siento, Josh"

Josh no podía dejar de llorar. Había estado así por horas, pero parecía que su sufrimiento no acabaría jamás. Tenía tanto miedo. Estaba tan confundido, tan preocupado, que no sabía que otra cosa hacer más que dejar que las lágrimas siguieran corriendo.

No le importaba su dolor físico, ni el hecho de tener su pecho ensangrentado. Honestamente, lo que menos estaba pensando en ese momento era en él mismo. Por su mente pasaban mil y un veces todas las ocasiones en las que Tyler le había dicho lo mucho que lo amaba, o el miedo que tenía de no poder protegerlo de él mismo. El demonio siempre había puesto la seguridad de Josh primero.

Pero, ¿qué había de su propia seguridad?

¿Qué le sucedería a Tyler ahora? ¿Volvería a verlo alguna vez? ¿Qué pasaría si alguien lo ve así?

O quizá, aún peor, ¿qué le pasaría cuando su ataque terminara y volviera en sí? Él no era conciente ni responsable de lo que hacía en ese estado, ¿qué tal si había volado tan lejos que no sabría cómo regresar?

El rizado ni siquiera podía describir lo asustado que estaba. No sabía qué haría si algo le pasara al castaño. Se había convertido en una parte tan importante en su vida que no sabría como seguir adelante sin él.

Sólo quería que Tyler volviera a casa.

De todas formas -aunque en ese momento ese fuera el último pensamiento en su cabeza-, que el demonio volviera tampoco arreglaría las cosas. No podían seguir así, ninguno de los dos. Por más que todo pareciese color de rosa cuando estaban juntos, eso no cambiaba el hecho de que ese tipo de cosas seguirían sucediendo, y sólo les causaría más dolor a ambos.

¿Qué clase de vida podrían llevar?

¿Qué clase de vida podría llevar Josh, temiendo que el lado demoníaco de su pareja tomara el control y le hiciera daño?

¿Qué clase de vida podría llevar Tyler, teniendo siempre latente la posibilidad de potencialmente lastimar a la única persona que amaba, sin poder evitarlo?

A veces, sólo el amor no es suficiente.

Quizás simplemente estaban destinados a lastimarse.

Los primeros rayos de sol comenzaban a bañar la habitación y el rizado aún no lograba calmarse. No había dormido ni un poco, como tampoco había podido dejar de llorar. Sentía su corazón hecho añicos dentro de su pecho. Estaba temblando, tenía frío pero ni siquiera había reaccionado para vestirse, tenía sangre en sus manos por haberse tocado el pecho. Todo él era un desastre.

El sueño estaba a punto de vencerlo, cuando escuchó un golpe sordo proveniente de afuera de su ventana. Se levantó de la cama precipitadamente, casi cayendo de esta en el proceso, asomándose a ver. Su corazón dio un vuelco al ver a Tyler tirado en el pequeño techo de debajo de su ventana, inconciente. Y en muy mal estado.

—¡Tyler! —Gritó, oyendo su propio pulso acelerado latir en sus oídos.

Sacó mitad de su cuerpo por la ventana y se inclinó hacia afuera, subiendo al castaño con mucha dificultad. Una vez que logró entrarlo, lo dejó tendido en el piso de su habitación. Lo miró, y sus ojos se llenaron de lágrimas nuevamente al darse cuenta el estado en el que se encontraba.