➵DIECISIETE

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Capítulo 17

-Taehyung -le llamé una vez salí del baño al pelinegro que se encontraba tumbado en la cama viendo la televisión.

-¿Taehyung? -preguntó mirándome fijamente a los ojos apagando la TV.

-¿Qué, ahora te llamo abuelo? -bufé.

-Soy Papi, princesa. -se levantó y caminó hasta llegar a pocos centímetros de mi cuerpo para, seguidamente, tomar mi mano y guiarme al borde de la cama donde él se sentó colocándome en su regazo posando sus manos en mi cadera.

-Papi -pronuncié sintiendo como apretaba con suavidad mis caderas-, ¿Podemos visitar a Yugy?

Éste rodó los ojos,- ¿Tu amigo gay que quiere follarme desde el primer día?

Apenada asentí por lo que él suspiró y en un rápido movimiento me hizo acostarme en la cama para colocarse sobre mí sin pensarlo dos veces.

-Me traes loco desde aquella vez en la play-... -pausó su oración quedando pensativo, quedé confundida a lo que él sonrió como si nada.

-¿Qué ibas a decir?

-Que me encantas. -no bien dijo aquello y ya estaba besando mi rostro con delicados besos.

-Tú también me quieres follar las veinticuatro horas del día los siete días de la semana. -solté de pronto haciéndolo reír y parar con sus besos.

-No quiero follarte, cariño. -se negó viéndome a los ojos con una sonrisa.

-¿Entonces? -alcé una ceja.

-Quiero hacerte el amor, cariño. -pronunció con lentitud aquellas palabras que me dejaron boquiabierta.

-Joder, ¡pero si lo has hecho un montón de veces! -alcé un poco la voz- No dejas que mi pussy respire. -vacilé para hacerlo más entretenido.

Él carcajeó dejándose caer a mi lado. Volteó su cabeza para mirarme y tomó mi mano entrelazando nuestros dedos para después mirar al techo.

-¿Podrías...

-¿Qué cos-.. -no pude continuar hablando cuando mi mano siendo introducida dento de su pantalón de pijama me dejó perpleja.

Él soltó un gruñido acompañado de un profundo suspiro. Seguía con su mano sobre la mía ayudándome o más bien enseñándome en cómo hacer el trabajo.

-Sigue así~ -dijo a la vez que noté como acercaba su mano a mi short de pijama.

Por instinto crucé mis piernas con fuerza pero fue inútil, de igual manera introdujo su mano acariciando mi zona dando calor en la misma.

-Mierda Taeh-digo... Papi. -se seguro estaba algo colorada de la vergüenza y el calor que comenzaba a crearse en el ambiente.

-Eso es, bonita. -gruñó en sus adentros- Lo haces bien.

Era extraño como nos encontrábamos. Entonces reí imaginándonos cómo nos veríamos desde arriba; él al escuchar mi risa introdujo uno de sus largos dedos en mi sacándome un pequeño gemido de sorpresa.

-¿Te ríes de mí, babygirl?

-De ambos, podría decirse. -sinceré- imaginé cómo nos veríamos desde arriba.

Él no dijo más y sentí cómo introdujo dos dedos más enseguida sacándolo y metiéndolo de manera lenta.

(...)

Taehyung no paraba de estar encima mío insinuándose. ¿Cuánto falta para que esta semana acabe y él vuelva a trabajar?

PapiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora