Save me (1° Temporada) (En Edición)

Capítulo 46

Apenas al llegar Jimin fue a su despacho junto con Jung Soo. Ambas puertas, tanto la del despacho como la de la habitación se encontraban abiertas, por lo que pude escuchar a Jung Soo decir casi en un grito:

—¡¿Niño que hizo?!

Dejé de inmediato lo que estaba haciendo y fui al despacho, no sé por qué imaginé que había ocurrido algo malo, antes de llegar escucho a Jimin:

—No seas exagerada. —Reía a carcajadas, su risa me resultó muy linda. Era la primera vez que lo escuchaba reír.

Llego a la puerta y él terminaba de colocarse la capucha de la campera.

—Señora.  —dijo Jung Soo y Jimin giró sonriendo.

«Que linda sonrisa.»

—Ah, estás aquí... ¿Que pasa?

—Es lo que yo me pregunto, ¿que pasa? Escuché a Jung Soo gritar y pensé que había pasado algo. —dije media enojada.

—No es nada, no te preocupes. Aquí la señora es algo exagerada.

—Entonces me retiro. Permiso.

—No, quédate.

—La que se retira soy yo. En unos minutos la cena estará lista. —dijo Jung Soo.

—Enseguida bajamos. Cierra la puerta por favor. —Una vez que Jung Soo dejó la habitación rompí el silencio.

—¿Que quieres?

—Estar contigo ¿Qué más podría ser?, te extrañé. —Se acercó a mí —Y también quiero quitarte la curiosidad. —Quitó la capucha, pero no la gorra. Lo que noté de inmediato es que se había hecho una perforación en la oreja izquierda.

—¿Era eso lo que ocultabas?

—¿Que cosa?

—La perforación. —dije tocando mi oreja izquierda.

—Que observadora eres. —Me abrazó por la cintura —Bueno... Digamos que es una, ¿quieres descubrir la más importantes? —Me pegó más a él.

—N… no hace falta que sea ahora, cuando tu quieras. —Me quise mover, pero no pude. Tomó mis brazos e hizo que lo abrace también.

—Lo que ocultaba era esto. —Con una de sus manos quitó la gorra.
Lo miré sorprendida, arregló su cabello y volvió a abrazarme. No podía creer lo que veía, ¿acaso le agarró un ataque de rebeldía de adolescente? Volvió a abrazarme con ambos brazos. —¿Y? ¿Qué opinas?

—¿Tu amiguito te convenció de que te hagas eso?

—No, quise hacer un cambio y lo hice pensando en ti. ¿No te gusta?

—Te tiene que gustar a ti. —Me encogí de hombros.

Al principio me resultó impactante verlo de rubio a Jimin, no lo voy a negar. Pero debo reconocer que no le quedaba para nada mal. Intentó besarme, pero lo evadí con la excusa de que debíamos bajar a cenar.

—Bajemos, sino Joon Soo se enojara con los dos.

—Tienes razón. —Igualmente me dió un pequeño beso.

Durante la cena hablamos de mi viaje. Se lo notaba muy interesado en mis anécdotas, luego quedé sola un momento disfrutando de un café antes de ir a la cama.

Pensando que Jimin estaría en su despacho ocupado con algo que había quedado pendiente, me dirigí a la habitación para "dormirme" antes de que él se acueste, pero apenas abrí la puerta, me llevé la sorpresa de que ya estaba acostado.