En Miraculous

11 - Casi beso y beso

Narra Sophie

Después de que Ladybug nos gritara eso, Falcon me agarró y me llevó a la casa donde estamos hospedados, ahí estaba Fu. Le dijo que me quede y a Fu que me vigile, a veces este chico es demasiado sobre protector.

Fu me miró y luego a mi pierna lastimada, ya estaba destransformada.

— No debes transformarte con tu fractura.

— Lo sé.

— Se lo advertí, maestro, pero no quiso escucharme.

— Gracias, Ariana. — le dije sarcásticamente por delatar lo sucedido.

— Perdón, Sophie, es que tú debes estar descansando.

— Tu kwami está en lo cierto. — empezó a decir Fu dirigiéndose a mí — Aún estás herida y no puedes luchar.

— Lo sé, solo... quería ayudar.

— Ayudas estando aquí, ¿ok?

— Ok

Me paré con las muletas y subí a mi cuarto.

Es increíble que esto esté pasando. Hay un akuma allá afuera y no puedo hacer nada. Al menos quiero ir a ver si están bien, si Adrien está bien, si Marinette está bien... si Eric está bien. Pero claro no puedo por esta estúpida lesión.

Me quedé pensando hasta que alguien abrió mi ventana.

— Que bueno que estás bien. — le dije algo alterada abrazando al héroe ya destransformado.

— Claro que estoy bien, ¿por qué no lo estaría?

— Es que yo me preocupé por ellos, Adrien, Marinette, y por ti... — me interrumpió.

— Oye... siempre te protegeré con mi vida.

— Gracias. — le sonreí cálidamente y él se acercó a mí.

Eric se acercaba poco a poco, juraría que estaba mirando mis labios. Dirigí mi mirada a sus labios que tanto me llaman así que me acerqué a ellos.

Antes de unirnos nos separamos porque alguien tocó la puerta.

— Lo siento... — dijo del otro lado Fu abriendo un poco la puerta — Pero tienen visitas.

— Ahí vamos. — le respondí yéndome con las muletas hacia abajo y dejaba atrás a Eric en mi cuarto.

Narra Eric

No puede ser... no puede ser... ¡LA IBA A BESAR! ¡Casi la beso! ¿Ahora qué? Tal vez se sienta incómoda... ayyy... soy un idiota.

Cuando vi que se fue la seguí a paso lento para vigilar que no se caiga ni nada.

Ambos llegamos al final de la escalera y nos sorprendió al ver a nuestra maestra ahí.

— ¡Rita! — exclamamos ambos yendo a abrazarla.

— Hola Eric, Sophie, ¿cómo están? — mencionó abrazando a Sophie.

— Bien. — le respondió mi amiga.

— Bueno no tanto... — indiqué a lo obvio — Sophie se fracturó la pierna izquierda.

— Ohh... lo lamento tanto, ¿puedo verla?

— Claro. — le contestó Sophie.

Ayudé a Sophie a sentarse así Rita veía a la herida, nos dijo que no duraría tanto, debía hacer reposo por dos semanas, como Fu nos había dicho.