24 - Siempre te he amado

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Narra Sophie

—... Entonces — empecé a decir — ... ¿también te gusto?

Se separó de mí.

— ¡Lo lamento! Ahora debes estar muy incómoda que no me hablaras y no me querrás nunca y me dirás que no soy más tu amigo y... ¡estaré muy solo!

Me quedé algo impactada por eso.

— ¿Qué caraj-?

— ¡Perdón! ¡Perdón! ¡Perdón! ¡Perdón! — me suplicó mientras me tomaba la mano.

Rodeé los ojos. Que dramático. Y me reí.

— Oye... — levantó la mirada — Está bien. De hecho, me gustó.

— ¿En serio? — preguntó algo confuso.

— Claro que si, porque... — tomé mucho mucho mucho mucho aire — ... estoy enamorada de ti.

Estaba muy muy muy sonrojada en ese momento, seguro más que el tomate de Nathaniel. Y noté que también él estaba un poco sonrojado, aunque... ¡¿sonrió?!

Me está dando una de sus sonrisas y no es cualquiera. Es una bien sexy que dice que bese esos labios de... ok me controlo.

— ¿Por qué sonríes así? Me están dando ganas de violarte, ¿lo sabias?

Él río. Maldito Dios que lo creo bien perfecto a este hombre.

— ¡No te rías! ¡Esto es serio! — grité algo alterada.

— Es solo que estoy enamorado de ti hace mucho. Siempre te he amado.

Me sonrojé más por eso.

— ¿Cuánto exactamente?

— Dos años. — murmuró.

— ¿Dos años? ¡Yo hace como dos meses! — me reí y él se río conmigo.

Él me miró a los ojos.

— Me alegra verte un poco mejor. — hizo una pausa — Te juro, verlos a ustedes tan débiles, pálidos incluso hambrientos. Nos dolió a Mari y a mí.

— Sip. Lo sentimos por eso.

— Ya está bien. Porque ahora están aquí. — me dio un beso en la mejilla.

Se me prendió el foco pensé y sonreí.

— Mmm... ahí no lo quiero, señor.

— ¿Ah no?

Me besó la mano.

— ¿Ahí?

Negué con la cabeza y me besó la frente

— ¿Ahí?

Volví a negar, es mi nuevo juego favorito. Me besó la nariz.

— ¿Ahí?

Negué con la cabeza.

— ¿Dónde?

Señalé mis labios, él se acercó y me besó. Le correspondí y puse mis brazos en su cuello atrayéndolo más a mí.

Narra Eric

No puede ser.... ¡La estoy besando! ¡Estoy besando al amor de mi vida! ¡No lo puedo creer! Sabía que amaba a alguien pero no a mí. De hecho, tenía miedo de perderla o algo así. Pero ahora la estoy besando. Quien lo diría. Amo con locura a esta chica.

La tenia de la cintura y estábamos ambos sobre la cama de ella.

— Te amo. — dije en sus labios.

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