𝐓𝐖𝐈𝐓𝐓𝐄𝐑 𝟐 - 𝐍𝐇 𝐁𝐘 𝐍𝐀𝐓𝐇 🥀

7.

Capítulo 7.

No quiero abrir los ojos, quiero seguir durmiendo. Quiero que el reloj se detenga para poder dormir algunas horas más.

-Uhmmm, no.-murmuro cuando siento que el minino está tocando mi cabello, me da cosquillas, pero mi sueño es más grande, así que le permito que lo haga, después le daré algo de comer.

-Oye.-¿uhmm?¿Desde cuando el michi habla?.-Elena, debes ponerte en pie, acabo de apagar la alarma de tu móvil.-¿desde cuando los gatos apagan las alarmas?.-Dios mujer, que perezosa estás.

-Después te daré tu atún.-murmuro adormilada.

-¿De que hablas?.

-Tu atún.-digo al mismo tiempo que caigo en la realidad. Maldición.

-¿Me gusta el atún?.-escucho decir fuerte y claro, es niall.

Cuando abro los ojos, él está sentado a mi lado mirándome.

-Niall.-susurro intentado despegar los ojos, debo ser un asco.

-Hola cariño.-me dice él con voz tranquila.

-Hola.-respondo. Ninguno hace ademán de acercarse.

-¿Como haz dormido?.-me pregunta y mientras lo hace, recuerdo al gato. Él se durmió a mí lado.

-Bien, gracias.-respondo mientras me incorporo, lentamente me siento en la cama buscando al minino, pero no lo encuentro, ni siquiera llora.

-¿Que sucede?.-me pregunta y yo me quedo mirándolo.

-Nada.-le digo y por una breve fracción de segundos pienso ¿lo imaginé? ¿Imaginé que tenía un gato aquí?.

-¿Estás buscando a esa cosa peluda que estaba maullando cuando llegue?.-me pregunta sin ninguna expresión en el rostro.

Ah mierda, tendré problemas.

-Sí.-susurro sintiéndome culpable.-¿donde está? ¿Lo echaste a la calle?.

-No, lo deje en el salón.-me explica.

-Ah, menos mal, gracias.-digo agradecida.

-¿Que hace ese gato aquí Elena? No nos permiten tener animales en el edificio.-me dice y puedo sentir su no rotundo cuando le pregunte a mi proposición de hogar temporal.

-Es una larga historia.-le digo y ambos nos quedamos mirando por unos segundos.

-¿Porqué estás enfadada conmigo? Ni siquiera me haz abrazado.-me dice.

-No estoy enojada.-digo rápidamente.

Él sonríe un poco.

-Llevamos mucho tiempo juntos, te conozco Elena, sé que algo pasa, tú no eres así. Y me gustaría saber que es.-me dice al mismo tiempo que toma mi mano.

Extrañaba mucho su contacto.

-Bueno, como te dije, no estoy enojada, pero... -

-¿Pero qué? Vamos, confía en mí.

-No lo sé niall, me sentí mal cuando leí tu mensaje, me sentí sola.-le digo y no puedo mirarlo, porque me da vergüenza.

Él no me dice nada inmediatamente, solo se acerca y me abraza, yo también lo abrazo.

-Perdón cariño, sé que prometí estar contigo y no dejarte sola.

-No me digas eso, sabes que eres libre de hacer lo que quieras, no puedo obligarte a tenerte aquí, no quiero ser egoísta contigo, entiendo que es parte de ti, no poder decir que no aún evento.-le digo.-más aún cuando es un evento de caridad.

-Ese fue mi único motivo por el cual acepté ir. Créeme, que estando aquí he recibido un montón de ofertas, pero las he rechazado todas.-me explica.

-Está bien.-susurro.

-Te amo, ¿lo sabes verdad?.-yo asiento.-no vuelvas a dejar mis mensajes sin responder Elena, estaba preocupado por ti.

-Lo siento.

-Vale. Ahora dime, que hace ese gato aquí, hay que llevárselo hoy.-me dice y se me rompe el corazón.

-Niall... -comienzo a decir, pero él se aleja para ver mi rostro.

-Elena, no.-me dice sin siquiera preguntar.

-¿Pero porqué?.-maldición, quiero llorar.

-Porque no permiten tener animales en el edificio.

-Pero no molestará.-maldición.

-No se trata de eso, quizás no moleste, pero es la regla del edificio cariño.-me dice intentando tranquilizarme, pero no puedo evitar sentirme molesta y frustrada.

-Pero puedes hacer algo.-le digo, o más bien le ruego, aunque sé que es imposible.

-No puedo.-me dice y se encoge de hombros.

Su actitud me molesta, no tiene porqué ser así.

-Vale.-le digo.-me iré a duchar.-agrego alejándome de el.

-Tú móvil está vibrando.

-Gracias.

-¿Quién es Tyler?.-me pregunta cuando lee el nombre en la pantalla.

-Un compañero de curso.-digo antes de encerrarme en el baño.

Ah, sé que eso no le gustará, pero su ceño fruncido al leer el nombre de mi compañero me pone nerviosa.

Además que, se lo merece, no tiene porqué ser tan frío con respecto al minino.

(...)

Cuando salgo de la ducha, niall sigue sentando en la cama. Está mirándome, sus ojos no dejan de seguirme por toda la habitación, mientras busco mi ropa interior y mi ropita de casa.

-¿Quién es Tyler?.-él vuelve a preguntarme.

-Ya te dije, es un compañero.-le respondo con normalidad.

-¿Que quería?.

-Decirme que han cancelado las clases de hoy.

-Ah.-murmura.

-En la tarde me llevaré al gato.-le digo.-buscaré donde puedo dejarlo.

-Esta bien.-me dice así sin más.

-Necesito cambiarme.-le pido.

-¿Porqué estás haciendo esto?.-me pregunta con el ceño fruncido.

-¿hacer que?.

-Enojarte por un gato, no es culpa mía que no permitan animales.

-Niall, ya fue.-le digo.

-No, no fue. ¿Estarás así todo el día?.

-¿así como?.-pregunto nuevamente con normalidad sin sonar pesada.

-Enfadada, distante, no sé Elena.

-No estoy así, solo te estoy pidiendo que me des espacio para cambiarme de ropa.

-Pero si te conozco entera mujer ¿desde cuando el pudor?.

-Porque estoy con la regla y no quiero que me veas cambiandome.-digo seca, pesada, así como el dijo que estaba.

Su gesto cambia inmediatamente, sin decir una palabra, se levanta y sale de la habitación, cerrando con un portazo.

Mierda ¿que está pasandonos?