XVIII-Una situación así.

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—¡Ta-da!— señaló el lugar de forma divertida, se separó de Lan Wangji y comenzó a caminar por el gran lugar con emoción, era como ver a un niño pequeño en una juguetería, cada cosa que veía quería tenerla.

—Ten cuidado, te caerás si no prestas atención—En respuesta a eso Wei Ying le saco la lengua a forma de juego y siguió caminando de manera descuidada, si bien no era el restaurante que Lan Zhan había reservado a su parecer el lugar tenía su encanto.
Había bancas y mesas en medio de todos esos camiones de comida que iban desde pizza hasta platillos de restauran, era el lugar perfecto para una cita.

—¿Verdad que es lindo? Hay muchas cosas que podemos comer~ quiero probar los pastelitos que están cerca de la entrada—

—hmmm— murmuro viendo a su alrededor, había mucha gente en las mesas y sinceramente no le agradaba estar rodeado de tantas personas.

—pienso lo mismo— río cuando vio la mirada confundida y sorprendida de Lan Zhan quien se comenzó a preguntar si lo de hace un momento lo había dicho o lo había pensado  —No te sorprendas ya puedo entender lo que piensas con solo verte o bueno, algunas cosas simples como el que no te gustar estar rodeado de tantas personas— sonrió divertido y le pareció ver a su amigo sonreír muy suavemente, Lan Wangji pensaba que el que Wei Ying pudiera comprenderlo sin ni siquiera preguntar o decir algo era maravilloso. —Busquemos un lugar donde podamos sentarnos sin que haya muchas personas— dicho eso caminaron entre las mesas hasta que encontraron un lugar solo para dos, estaba un tanto alejado de las secciones de postres pero no estaba tan mal, después de todo habían conseguido no estar cerca de tantas personas.

Ambos pidieron baguettes, esto a elección de WuXian, y disfrutaron su improvisada comida, WuXian quería hablar de muchas cosas pero cada cierto tiempo la voz de Lan Wangji diciendo "No se habla mientras comes" le interrumpía haciéndolo guardar silencio, aunque no por mucho tiempo ya que después de un rato volvía a hablar.

—Ahhhh~ estuvo delicioso— dijo mientras se daba leves golpecitos en su estómago —Aun así siento que faltó algo más— Wangji le miro un tanto confundido ¿Que podría faltar?
Wei Ying se levantó y su compañero hizo lo mismo pero este negó rápidamente —No, no, no, quédate aquí Hanguang-Jun, yo iré por el postre! No tardo así que no me extrañes demasiado— soltó una carcajada para después comenzar a caminar por entre las mesas y así poder llegar a su dulce destino.

20 minutos habían pasado desde que Wei WuXian había dejado a Lan Zhan esperando en aquella mesa, el joven Lan miro nuevamente su reloj y decidió levantarse, tomo la sudadera de su compañero y camino hacia donde había ido Wei Ying, cuando llegó al área de los postres busco con la mirada esa cabellera rebelde pero no tuvo suerte, pregunto en los establecimientos pero solo uno pudo darle una respuesta.

—oh si, vino un chico con esa descripción pero tan pronto le di su orden salió huyendo hacia alla— señaló con su dedo la parte trasera del parque donde solo había árboles y un pequeño sendero que recorría el lugar — Fue como si hubiera visto un fantasma, incluso me dejó su cambio.—

—hmmm— camino hacia la dirección donde se suponía que había salido huyendo Wei Ying, camino un poco hasta que escucho unos fuertes ladridos seguidos de algunos quejidos y llantos en la lejanía.
Rápidamente corrió hacia la dirección de los ladridos y lo ahí lo vio.... Wei WuXian se encontraba sentado contra un árbol mientras abrazaba sus piernas y cubría su cabeza con sus manos, frente a él había tres perros callejeros, uno de ellos estaba comiendo unos pastelillos que parecían haber sido lanzados contra ellos, mientras los otros dos seguían de pie y de forma amenazante le ladraban al chico que apenas y se movía, estaba paralizado por el miedo.

—P-por favor...v-vayanse...déjenme en paz— Su palabras apenas eran entendibles a causa del amargo llanto —L-largo..y-ya no tengo comida— A pesar de tener la cabeza escondida en sus piernas Lan Wangji estaba seguro que su rostro debía estar horrorizado y cubierto de lágrimas —A-ayuda...alguien ayudeme...¿lan zhan donde estás?... — Su voz suplicante fue lo que hizo reaccionar al joven Lan quien se acercó rápidamente y se puso frente a Wei WuXian, pisoteo fuertemente el suelo logrando poner nerviosos a los animales que solo se fueron de ahí cuando Wangji tomo una rama y la golpeó contra el árbol haciendo un fuerte sonido.

Una vez los canes huyeron giro su vista hacia el aterrorizado Wei WuXian quien parecía seguir sumido en el pánico, el más alto se agachó hasta su altura y puso su mano sobre la cabeza del chico quien rápidamente levanto la vista, sus ojos estaban rojos y su mirada tenía rastros de temor —Lan zhan...— se lanzó a los brazos de su compañero mientras temblaba, había vivido una situación horrible y lo único que necesitaba ahora era sentirse protegido y sabía que entre los brazos de Wangji lo estaría.

—calma... Los perros huyeron ya.— le confirmo mientras dejaba que se aferra a él con tanta fuerza, una vez dejo de escuchar los suaves sollozos  del chico se separó suavemente para así poder ver su rostro. —¿Estás bien?—

—Lo siento Lan Zhan, deje caer los pastelillos....— evito la pregunta y hablo intentando usar un tono de voz despreocupado pero por el contrario su voz salió un tanto temblorosa y apagada, nunca antes había escuchado a Wei Ying hablar de esa forma tan triste.
El de ojos grises paso sus manos por sus mejillas un par de veces limpiando cualquier rastro que pudieron dejar las lágrimas que derramó, además de que en todo momento evito el contacto visual con Hanguang-Jun, se sentía avergonzado, no quería que nadie lo viera en ese tipo de situación y mucho menos Lan Wangji.

—No te disculpes, vamos comienza a oscurecer— se levantó y le ayudo a levantarse también, ambos chicos caminaron en silencio hasta llegar a una banca donde se sentaron sin decir nada ya que Lan Wangji no sabía que decir o hacer nunca se imagino ver a Wei WuXian de esa manera.

—debes estar pensando que soy patético por asustarme hasta el llanto con unos simples perros...— dijo soltando una pequeña y apagada risa.

—No pensaba en eso— afirmo rápidamente para evitar que su compañero pensara cosas erróneas, se acercó un poco más a Wei Ying tanto como para que sus hombros chocarán levemente. —¿Por qué les temes tanto a los perros?—

—No es una historia interesante o divertida...¿En verdad quieres escucharla?—

—solo si quieres contarmela, si no es así está bien— WuXian sonrió suavemente y asintió, la historia de su fobia hacia los perros solo la sabía la familia Jiang y obviamente él, nunca se imagino en una situación así.

—lo hare—

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Primero que nada gracias por las 2K leídas! Pensé que mi historia no sería tan relevante pero afortunadamente me equivoqué, muchas gracias a todos los que votan y comentan, eso me motiva a seguir un ritmo de actualización más constante.
En fin, ya basta de ponerme sentimental porque lloro :")
Voten y comenten.
Los quiere chibineko 💖

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