Nø cønfíes en nađie. [OffGun]

14. 5 de Mayo

EL DIARIO DE GUN ATTHAPHAN POONSAWAS

Domingo, 5 de mayo.

Más tarde vi a Off. Estábamos detenidos en un semáforo, le había llamado por la mañana casi inmediatamente después de leer mi diario y anotar el sueño que probablemente era un recuerdo. Necesitaba hablar con alguien; la noticia de mi hermano, que aún me dejaba en shock, y el sueño que había tenido sobre Nawat, me provocaba un desgarro mental que no sabía cómo arreglar. Me sentía roto, destrozado, parecía que en lugar de avanzar fuese retrocediendo aún más. Cuando hablé con Off por teléfono me notó muy angustiado, por eso me propuso adelantar la cita de esta semana a hoy.

Traje mi diario como me pidió. No le conté lo que me pasaba porque quería esperar a que estuviéramos en su consulta, pero no sabía si podría contenerme. El semáforo cambió por fin y nos pusimos en marcha. Al igual que mis pensamientos, porque volvía a pensar en el sueño que tuve, en lo horrible que fue y en que ojalá no fuese un recuerdo.

- ¿Por qué dejamos de estar juntos? - me oí decir - ¿Qué nos pasó?

En ese momento no creí haber preguntado eso de verdad, lo dije sin pensar, era algo que me rondaba la cabeza por mucho tiempo, quería saber lo que había ocurrido.

Me miró sin responder y siguió conduciendo. Unos minutos después se aclaró la garganta y comenzó a contarme lo que había pasado.

- No te lo conté antes porque no quería asustarte, quizá te hubieras negado a que siguiera siendo tu médico si hubieses sabido la verdad. Cuando me enteré de tu accidente esperé para ir a verte, no sabía cómo acercarme a ti, ni siquiera sabía la gravedad de tu situación en ese momento. Pero entonces me decidí y fui a verte, fui a tu casa. No estaban ni tus padres ni tu hermano Chimon, pero sí Nawat. De hecho, él fue quien abrió la puerta, lo cual me extrañó muchísimo. Me dejó pasar y hablé contigo, él se quedó en la cocina preparando la merienda. Y... no sé, lo que me dijiste me dolió muchísimo. No sabías quién era, me preguntaste por mi nombre, pero cuando te lo dije no te sonaba de nada. Ni siquiera recordabas el teatro, nada. No sabía qué hacer, te había perdido.

- ¿Por qué no te quedaste? Quiero decir, no te recordaba, pero si te hubieses quedado a mi lado quizá hubiese empezado a recordar mucho antes. ¿Por qué te fuiste?

- Tus padres me lo pidieron...

- ¿Mis padres? ¿Qué...?

- Sí, no sé por qué, pensaba que les gustaba, además, no me lo dijeron personalmente, me enviaron una carta, cosa que me sorprendió bastante. No se suelen mandar muchas cartas hoy en día. Me pedían que no fuese más a verte, que estaba siendo muy duro para ellos y para Chimon y que creían que lo mejor para ti en ese momento era estar con la familia. Quizá tenían miedo de que te apartara de ellos, pero no tenía sentido. No quise aceptarlo, así que al día siguiente de recibir la carta fui a tu casa, pero nadie me abrió. Y poco después supe que os habíais mudado.

- Lo siento, no sé por qué mis padres hicieron eso, ni siquiera les veo haciendo algo así, no tiene sentido...

- No, yo lo siento, tendría que haberte buscado, haber hecho caso omiso, porque sé que si hubieses podido recordarme no habrías querido que me rindiera tan pronto, fui un cobarde.

- No lo fuiste, al menos estás aquí ahora...

- Sí, y me alegro de poder ayudarte. ¿Sabes? La carrera que elegí, mi trabajo, fue todo por ti. Porque sentí que no te ayudé, y no quería que eso le pasara a más gente, quería poder ayudarles de alguna forma.

Sentí un nudo en el estómago y cómo se me encogía el corazón, no podía creer lo que escuchaba. ¿Lo hizo por mí? ¿De verdad? Las lágrimas en mis ojos presionaban por salir, pero las aguanté, no quería llorar, no ahora, no quería que me viese tan vulnerable, que supiera que él me sigue afectando. A pesar del accidente y a pesar de los años, Off me seguía afectando.