Tras pasarse toda la tarde cocinando, Seonghwa se dio cuenta de que, una vez más, había cocinado demasiado para él solo. Últimamente, eso pasaba muy seguido. Entre que Wooyoung pasaba casi cuatro días a la semana en su casa y que Jongho se dejaba caer sin avisar, Seonghwa siempre necesitaba tener mucha comida lista para comer por si alguno de sus retoños que no eran suyos venía con gran hambre. Aquel día, sin embargo, ni Wooyoung estaba chillando en su salón ni Jongho estaba sentado en una esquinita del sofá viendo la televisión. Podría haber guardado lo que no fuera a comerse, pero vio más aceptable meter en unos recipientes las sobras. Iría a casa de los vecinos porque Seonghwa sabía que ese par de inútiles se alimentaban a base de los trece tipos de cereales que Yunho tenía en un armario y ramen barato de la tienda de la esquina. El cocinero en Seonghwa lloraba cada vez que pensaba en la dieta de sus vecinos, ¿cómo habían sobrevivido tanto tiempo esos dos niños grandes viviendo solos? Seonghwa no tenía ni idea. Aunque, no era por tirarse flores a sí mismo, pero tenía más que seguro que en parte seguían vivos gracias a él. (Seonghwa no quería ni pensar en el accidente del microondas, porque de solo recordarlo, sentía como le salían canas en su bien arreglada cabeza). Seonghwa se miró en el espejo que tenía en la entrada antes de salir, se peinó las cejas y agarró sus llaves.
Tras los cinco pasos que separaban su puerta con la de la residencia Kim-Jeong, Seonghwa tocó el timbre. Escuchó el ruido de un cuerpo cayendo al suelo y un grito agudo que no podía ser de nadie más que de Hongjoong. Seonghwa se preguntaba qué cosa rara estaba haciendo aquel hombre ese día, había tantas posibilidades... Seonghwa había aprendido pronto a no cuestionar a Hongjoong, era más fácil así. Seonghwa escuchó los pasitos rápidos de Hongjoong acercándose a la puerta y esperó pacientemente a que le abrieran.
ㅡ¿Quién es?
ㅡSoy Seonghwa, ¿me abres la puerta?
ㅡOh, mi mejor vecino Mars Park.
ㅡTe he dicho muchas veces que no me llames Mars.
ㅡMars suena mejor que Seonghwa. Puede ser tu nombre de stripper si alguna vez lo del restaurante falla y necesitas otro rumbo en tu carrera profesional.
Seonghwa suspiró, muy, muy cansado.
ㅡAunque lo del restaurante falle, no voy a convertirme en stripper. En fin, ¿me puedes abrir la puerta ya?
ㅡUhm ㅡHongjoong dudóㅡ. ¿No puedes decirme lo que tienes que decir desde ahí, es necesario que entres?
ㅡBueno, traigo algo para ti y para Yunho... ¿Por qué no puedes abrirme la puerta?
ㅡNo estoy presentable ㅡHongjoong rió un pocoㅡ. No tengo cejas, no puedes verme así.
ㅡ¿Cómo que no tienes ce-? Mira, ¿sabes qué? No voy a preguntar. Da igual que no tengas cejas y que no estés presentable, te he visto tras treinta y seis horas sin dormir, borracho y al borde del colapso comiendo cereales en el suelo de tu cocina mientras el microondas echaba humo y Yunho llorado a tu lado. Dudo que estés peor...
ㅡBueno, tienes razón...
Hongjoong abrió la puerta unos segundos después y Seonghwa casi se tragó la lengua al verlo. Hongjoong acostumbraba a vestir con ropa muy cuestionable, casi toda de segunda mano o modificada por él mismo. Seonghwa había visto a Hongjoong usar las prendas más extravagantes y horteras solo para bajar a comprar ramen a la tienda de la esquina, así que no se sorprendía con facilidad ya por el sentido de la moda de su vecino. Sin embargo... Hongjoong estaba usando un vestido. Más bien, era un camisón gris de tirantes que no dejaba mucho a la imaginación porque era muy corto. Muy corto, tan corto que Seonghwa podía ver un poco de sus bóxers por debajo. Hongjoong estaba usando un camisón lencero con encaje en la zona del pecho y por supuesto que Seonghwa no estaba mirando fijamente esa parte del cuerpo de Hongjoong. Claro que no. Qué demonios... Seonghwa quiso dar media vuelta y volver a su casa, tirarse al sofá y llorar por media hora. Qué estaba haciendo Hongjoong usando un vestido que parecía una camiseta larga a esas horas del día, dónde estaba Yunho, qué estaba haciendo Hongjoong. Seonghwa era un hombre débil y ver a su raro pero muy atractivo vecino con un vestidito poco decente estaba provocando cosas. (¡¡Además!! ¡¡Estaba usando sus orejitas de gato!! Seonghwa iba a llorar). Tratando de mantener la compostura y evitando mirar de más los tatuajes en la piel al descubierto de Hongjoong, Seonghwa le miró a la cara y se llevó una sorpresa al ver que, en efecto, no tenía cejas. Normalmente, Hongjoong tenía, por lo menos, la mitad de sus cejas, tres pelitos al comienzo de éstas. Según él, era más cómodo casi no tener cejas para cuando necesitaba maquillarse y ocultarlas. Pero ahora, de verdad que no tenía nada.
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Door 1117 {ATEEZ}
FanfictionEn donde Yunho y Hongjoong son compañeros de piso y Seonghwa es el vecino.