Una conversación telefónica

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ㅡ¿Y qué tal en el restaurante? ¿Qué se siente al pasar de ser princesa mimada a una trabajadora que cobra el salario mínimo en el negocio de su madre?

Mingi y Hongjoong llevaban los últimos diez minutos hablando por videollamada. Mingi no estaba muy pendiente de la pantalla, ocupada organizando su armario repleto de prendas que ya no se ponía y tratando de no pisar a Dubu, que no dejaba de dar vueltas entre sus pies o de acostarse en el montón de ropa tirado en el suelo. Por otro lado, Hongjoong también estaba a lo suyo: dibujando sin pausa en su iPad y murmurando maldiciones cuando las líneas no le salían como él quería. Mingi suspiró por lo que había dicho Hongjoong y lanzó un vestido rojo que ya no le entraba a una esquina (no se dio cuenta de que le había caído encima a Dubu, pero la gatita se limitó a maullar y a sacar la cabecita).

ㅡSigo siendo una princesa mimada, que te quede claro.

ㅡSí, sí, lo que tú digas.

ㅡYa te he dicho que me gusta trabajar con mamá. Tampoco es que esté todo el día ahí.

ㅡNo, luego estás ayudando a tu padre en la casa. Mingicienta.

ㅡTe voy a colgar como sigas por es rumbo, Hongjoong.

ㅡPero no te enfades.

ㅡNo me enfado, pero deja de actuar como si estuviera infeliz aquí. Estoy bien. Y volviendo a lo de antes, sigo siendo una princesa mimada porque Hyojin noona sigue hablando conmigo. Incluso nos vamos a ver en una semana.

ㅡOh, damn. Puedes sacar a la sugar baby de la ciudad, pero siempre será una sugar baby.

ㅡYa deberías saberlo... Cambiando de tema. Dice mamá que hay un cliente que le ha preguntado varias veces por mí. No sé quién es, si hemos coincidido en el restaurante, ha sido cuando estaba repleto. Tengo curiosidad.

ㅡConociendo a la gente del pueblo, no creo que sea nadie que merezca la pena, así que no te emociones.

ㅡ¿Y si es guapo?

ㅡPuede ser guapo y no merecer la pena.

ㅡMamá dice que es lindo. Que es un poco tímido y que se pone tan nervioso al preguntar por mí que empieza a tartamudear.

ㅡSuena a que es un perdedor.

ㅡMe gustan los hombres patéticos. Me hacen sentir poderosa.

Hongjoong soltó una carcajada y ambos hicieron contacto visual a través de la pantalla. Hongjoong negó con la cabeza y Mingi hizo un gesto burlón, sacando la lengua y entrecerrando los ojos.

ㅡEres todo un caso, Mango. Pero bueno, ¿y sabes cómo se llama?

ㅡNo me acuerdo. Lee algo.

ㅡ¿Un Lee? Gracias por nada, podría ser cualquiera.

ㅡLe preguntaré a mamá luego. Si tengo suerte, hasta puede que le vea más tarde cuando vaya al restaurante.

ㅡNo te acuestes con él si es más bajito que tú.

ㅡOppa, creo que no hay nadie más alto que yo aquí.

ㅡ¿Ves? No merece la pena ninguno.

ㅡGeonhakie no era mas alto que yo y no tenías ningún problema con él.

ㅡYa, pero no es lo mismo. Geonhak es buen chico, y es guapo y te trataba bien. Que hablando de, ¿qué es de su vida?

ㅡPues ahí sigue, como siempre. Dimos un paseo el otro día y hablamos por horas.

ㅡUys, ¿reviviendo la llama del amor?

ㅡNah, eso es cosa del pasado. Y creo que le gusta alguien más.

ㅡUna pena.

ㅡMmh, estamos bien siendo amigos, así que no pasa nada.

ㅡInterrumpiendo esta agradable conversación, hazme el favor de mirar este dibujo y dame tu opinión.

Mingi se acercó a la mesa donde estaba su teléfono y observó en silencio lo que tenía delante. Nada más ver la naturaleza sexual de la ilustración, supuso que era alguna de esas comisiones raras que Hongjoong aceptaba a gente de Twitter.

ㅡEsas son unas tetas muy grandes.

ㅡLo sé, me han pagado un extra para hacerlas así. Pero ignorando las tetas, ¿qué dices del resto?

ㅡEs imposible ignorar las tetas... Pero está muy bien, oppa. Aunque está un poco bizca, haz algo con esos ojos.

ㅡAh, es verdad... Gracias, Mingi-yah~.

ㅡDe nada... Oye, ¿y tú qué tal con tus novios?

ㅡPues viviendo mi mejor vida, obviamente. El otro día Hwa hyung y yo tuvimos una cita, y casi acabamos por revolcarnos en su coche. No pasó al final, porque a Hwa hyung no le gustan esas cosas. Pero no fue problema porque luego nos revolcamos en su cama. Y con Yunho la otra noche hicimos pancakes y no quemamos la casa. Lo cual hizo llorar a Hwa hyung, estaba muy orgulloso de nosotros.

ㅡDios mío, tú y Yunho sois un desastre en la cocina.

ㅡTenemos un novio chef, aprender a cocinar es innecesario en este punto de nuestras vidas.

ㅡSupongo. Pobre Hwa oppa, se buscó los dos novios más inútiles.

ㅡ¡Más respeto, Mango!

ㅡNo me odies por decir la verdad... ¡Ah, pero mira qué hora es, me tengo que ir ya!

Awee, de vuelta a la vida de trabajadora, Mingicienta. ¡Dale un beso a Dubu de mi parte y asegúrate de averiguar el nombre de tu admirador, chao pescao!

ㅡ¡Hasta luego, muaks, muaks!

✨✨

Ni me voy a molestar en decir nada, because nobody cares. Anyways, hello a las cuatro personas a las que aún les interesa esto. Si hay algo raro, no, no lo hay. Nos leemos. Bye.

Door 1117 {ATEEZ}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora