PRÓLOGO

3.2K 177 58
                                    

-¿Ya va a empezar? – Preguntó una mujer dejando el delantal sobre el respaldo de su silla y acomodándose en esta – Por favor, ¿me puedes pasar mi cerveza? – Preguntó mirando a un hombre anciano, nervudo y de anteojos metálicos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-¿Ya va a empezar? – Preguntó una mujer dejando el delantal sobre el respaldo de su silla y acomodándose en esta – Por favor, ¿me puedes pasar mi cerveza? – Preguntó mirando a un hombre anciano, nervudo y de anteojos metálicos.

-¿Cerveza? – Preguntó el hombre - ¡Por dios, Jeanette, ya deja eso!

-¡No hagas un escándalo, Joao! – Murmuró un hombre moreno de espeso bigote – Jeannette sólo bebe en los acontecimientos especiales y...

-¡Este es un acontecimiento especial, Joao! – Murmuró Jeannette, una mujer madura de cabello rojizo – Miguel tiene razón.

-¿Van a callarse? – Intervino una chica joven de uniforme azul y delantal blanco – No me dejan escuchar al presentador con su alegata y... ¿Señor Joao, sería tan amable de pasarnos el six pack de cervezas? – Sonrió de manera angelical - ¡Ya, no me haga esa cara! Nadie le dice nada cuando toma su vino tinto...

Joao refunfuñó y pasó las cervezas, no estaba muy contento con la idea que su equipo de trabajo estuviera bebiendo en horas indispuestas. El señor Blackwood podría aparecer en cualquier momento y seguramente tomaría medidas muy severas contra ellos.

-¡Si el señor Blackwood aparece! – Exclamó Joao - ¡Le diré que todo esto fue idea suya, señorita Valery! – Dijo el hombre y le sonrió a la joven de uniforme.

-¡No haga eso, señor! – Dijo Valery enseñándole la lengua – Sólo será una cerveza.

-¡Simio no mata simio! – Intervino Miguel y todos en la cocina se echaron a reír ante el comentario -Ademas, ¿cómo no festejar por el gran logro de la señorita Marisa? – Preguntó el hombre.

Joao se puso serio. Miguel tenía razón, hacía algún tiempo que no tenían noticias de Marisa Davison, ella había desaparecido sin dejar rastro. La señorita era una mujer grandiosa que se ganó el corazón y el respeto de todos. E inesperadamente, Marissa apareció como una de los participantes de "Greatest Chef"; un programa culinario de televisión muy famoso en San Francisco. Ellos, al enterarse de su participación, no se perdieron ninguno de los programas; de esta manera, mostraban su apoyo incondicional a la chica. En dicho show, la joven destacaba siempre con sus platillos tradicionales y uno que otro exótico que dejaba a los jueces con la boca abierta.

Ese día se transmitía la repetición de la final, en donde Marisa recibió la ansiada presea del ganador, además de un jugoso premio de doscientos cincuenta mil dólares, un número especial en la revista "Greatest Chef", así como la transmisión de un programa especial a cerca de su vida y trabajo.

Todos se acomodaron frente al televisor, bebiendo cerveza, comiendo bocadillos de atún y charlando emocionados sobre lo agradable que había sido tener a Marisa viviendo en la casa.

Angus Blackwood entró en su enorme mansión, cerrando la puerta con violencia. ¡Había sido un día terrible! Le dolía la cabeza y estaba muy hambriento. Miró a todos lados y le pareció extraño no encontrarse con la presencia de Joao, su mayordomo, quién siempre lo esperaba en el salón para darle la bienvenida. De hecho, también le extrañó no encontrarse con Miguel, quién siempre lo saludaba con una enorme sonrisa y le contaba algún chiste que lo hacía lanzar una sonora carcajada.

ONE & ONLY [Tom Hardy Fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora