Diario de un chico perdido (Kookmin, jikook)

Capítulo 3

Junio 5

La vida es simplemente impredecible. Un amigo a quien quiero mucho se encuentra enfermo, ya desde hace un par de años que lleva una lucha intensa contra el cáncer y gracias a su carisma y humildad es que ha logrado salir adelante sin sentir los estragos de la enfermedad de una manera tan intensa. Gracias a él he aprendido mucho. Es por eso que dije que mis problemas son sólo una gota en el inmenso mar. Él es una de esas personas que en serio está pasando por un proceso difícil... ¿cómo podría quejarme de mis cosas entonces? Simplemente no me atrevo.

Y el día de hoy su madre me ha dicho que ha recaído y que los doctores le han dicho que posiblemente no logre salir de ésta. Por lo que me he preocupado, pues antes los doctores dijeron lo mismo pero su madre nunca me dijo nada. Siento que si me ha dicho algo es porque ella también presiente algo. Así que he decidido ir hasta donde él para cuidarlo. Su mamá me ha dicho que le preocupa no poder estar con él por completo, debido al trabajo y a su otra hija, la más pequeña, así que le he dicho que dejara de preocuparse pues yo iría a apoyarla.

Y en eso estoy.

Me encuentro poniendo en orden mis cosas. Ya he avisado a mi papá y a mi hermana, y ellos me han comprendido. Llevo conmigo mi viola para practicarla en ratos, además, a mi parecer, la música es sanadora y él adora escucharme. Siempre me dice que le envíe grabaciones con las canciones que toco y muchas veces me he negado, por vergüenza, pero dejaré a un lado eso. Cuando estábamos cerca uno del otro me pedía que le tocara el tema de Pokémon (está obsesionado con ese anime).

"Ojalá hubiera tocado más para él".

Por cierto, él no sabe qué me gusta cantar... si lo supiera, apuesto a que me haría cantar frente a todos. Aún así me hace tocar cada vez que puede, lo que es más fácil de evitar si nunca llevo mi instrumento. Él canta y su voz es hermosa, debo decir. Tal vez podríamos hacer algún dueto juntos, yo tocando y él cantando... o tal vez ambos cantando (sería un buen momento para decirle que también canto).

Jimin es mi mejor amigo y de las pocas personas que aún conservo desde que era niño, aún a pesar de que es dos años mayor que yo. Y pese a la distancia, pues él se mudo a otro lugar desde hace cinco años, aunque nunca perdimos comunicación.

Me alegrará verlo de nuevo. Espero que no sea muy tarde... "Ojalá hubiera tocado más para él". Ese pensamiento vuelve como si hablara de él en pasado. "Pero no, no lo digas más. Aún no es tarde. Él estará bien". Las lágrimas salen mientras escribo ésto.

Creo que aunque las palabras se escriban de ésta forma, con un "todo irá bien", mi corazón siente que algo no anda bien.

Jimin, ¿estás sufriendo?

Ya voy de camino hacia Busan. Me he venido en autobús desde Seúl y son de 4 a 5 horas de camino. Son las 6 de la mañana, probablemente llegue al medio día a su casa.

Ya quiero verlo.

Quería hablarle por mensaje pero su mamá me dijo que no le dijera que iba porque seguramente se molestaría. Y es que Jimin es de esas personas que detestan causar molestias. Un poco orgulloso, pero es un niño muy lindo. Creo que es la única persona por quien no sólo siento aprecio sino también una gran admiración. Lo quiero muchísimo. Gracias a él incursioné en el mundo de la música de una manera más profunda; gracias a él decidí vivir de la música, tocar la viola; gracias a él aprendi a cantar e inclusive entré a un coro.

Como dije, no sabe de lo último, no sabe cuánto bien ha hecho en mi, pero me gustaría que lo supiera si ello le da fuerzas. Además yo he hecho tan poco por él, que no puedo más que pensar en retribuírle todo lo que me ha dado mientras aún puedo hacerlo.

El cáncer es un tema complicado por lo que seré cuidadosa al escribir de ello. He pasado por esa situación con personas cercanas a mí y la verdad no se lo desearía a nadie.

Cuídense mucho, les envío abrazo fraterno.

💕SoraPark