Junio 12
12:00
Desayunamos juntos y luego de eso nos subimos a arreglar para nuestro paseo a ese lugar secreto que quería mostrarme con tanto anhelo. Justo ahora yo he salido de bañarme y él ha entrado apenas a la bañera. Volvimos a ser los de antes en un instante.
Estoy poniéndome ropa limpia y peinando mi cabello pensando en todo lo que dije. "Por supuesto que extrañaría sus besos, pero prefiero dejar eso a verlo infeliz". Lo que menos quería era que Jimin pretendiera ser algo que no es, así que sabía que ésto era lo correcto. Aunque no dejaba de preguntarme qué lo había orillado a actuar de esa forma. Es como si se esforzara por agradarme. "¿Será que ahora es así con todas las personas?" Porque no recuerdo que actuara así antes. Pensándolo detenidamente, creo que es la primera vez que lo veo actuar de una manera tan sumisa ante alguien y no creo que sea por la enfermedad. Así que, ¿qué habrá provocado dicho cambio? ¿Debería preocuparme? ¿Tal vez debería indagar en ello...?
Presiento que hay algo más en el fondo y no siento que pueda ser algo bueno.
***
Estamos caminando descalzos por la arena. Me ha tomado de la mano y lo he dejado hacerlo pues alegó que eso lo hemos hecho desde siempre y tiene razón. Entre nosotros siempre hemos sido demasiado cariñosos.
Basado en mis pocos conocimientos sobre psicología (carrera que estudié sólo un año, debo aclarar), comienzo a buscar rasgos distintos a los de su comportamiento habitual. No había notado que ahora camina mirando constantemente al suelo, siendo que antes miraba al cielo o a los árboles, a las personas. Sus huellas en la arena son distintas a como eran antes... ahora las puntas de sus pies se dirigen al centro a cada paso que da. Su otra mano, la que no se encuentra entrelazada con la mía, se encuentra oculta tras su bolsillo derecho del short. También es una sorpresa que lleve un short tan corto. Normalmente no muestra demasiada piel, a pesar de vivir en un lugar con clima cálido. Incluso hoy usa una simple playera de tirantes color negro. Eso también me ha sorprendido. Y lleva el pelo de forma que le cubre un poco los ojos. Otra cosa que difiere de lo usual. Normalmente lleva el pelo revuelto y colocado hacia el lado izquierdo.
Puedo pensar muchas cosas preocupantes pero debo admitir que se ve hermoso. Incluso me siento nervioso de verlo así. Es demasiado atractivo.
- ¿Por qué me miras tanto?
Soltó de repente, como tirarme un balde de agua fría en el rostro.
- Nada.
- Vamos, dilo ya, Jungkook. No te besaré ésta vez. Lo prometo.
Ese comentario me dolió aunque no tenía por qué. Después de todo yo le dije que no lo hiciera.
- Bien. Lo diré. Te ves guapo.
Me miró sonriente.
- Y... ¿qué más?
- Como que, ¿y qué más?
- Te noto preocupado - aclaró.
- Bien, me atrapaste... Es sólo que te noto un poco más introvertido. Quizá un poco inseguro.
- ¿Por qué piensas eso? Incluso me he lanzado a ti.
- Creo que es por eso que lo pienso. Siento que tienes miedo de algo y no entiendo de qué - lo miré pero él enseguida desvió su mirada de la mía. - ¿Puedes decirme qué pasa?
Seguía sin mirarme a los ojos.
- Ya te dije que estoy teniendo muchos cambios de humor por la enfermedad.
- Lo sé... lo recuerdo. Pero no puedo dejar de pensar que hay algo más.
- Pues no hay nada más.
Soltó mi mano y caminó más rápido. Lo seguí, caminando a su paso.
- Entiendo que no quieras decirme pero creo que podría ayudarte más si me explicas.
- Ya te dije que no es nada, Jungkook - se detuvo en seco - ¿sabes qué? Ya no quiero ir a ese lugar. Lo has arruinado de nuevo. Quiero irme a casa.
Ni siquiera me molestó que dijera aquello. Al contrario me hizo darme cuenta del dolor y el enojo que le causaba tratar aquel tema, y por ello decidí no insistir más en ello.
- Está bien. Perdón. No preguntaré de nuevo.
Me miró. Sus ojos brillaban por las lágrimas contenidas en ellos, pero ni una lágrima era capaz de filtrarse.
- Regresemos - tomé su mano y no me rechazó. Miró hacia nuestras manos y luego dijo con timidez.
- Dijiste que podíamos darnos caricias, ¿no?
- Sí, lo dije.
- Bien... Jungkook, quiero que me acaricies. Sólo tú.
¿A qué venía el sólo tú? No pensé mucho en ello. Preferí concentrarme en aquella petición y me acerqué sin demora a abrazarlo a lo que respondió enseguida rodeando mi cintura.
- Por favor, llévame a casa.
Me atreví a cargarlo en mi espalda y él abrazó mi cuerpo con sus piernas. Caminé con él de vuelta hasta su casa y en cuanto entramos me pidió que lo llevara a su habitación. Una vez adentro, lo senté en la cama, pidiéndome él enseguida que me sentara a un lado suyo. Lo obedecí.
Se sentó de pronto sobre mis piernas, su rostro frente a mi.
- Dijiste que podíamos darnos caricias - repitió de nuevo. - Por favor, acaríciame tú, Jungkook.
- ¿Cómo?
- Como desees. Sólo hazlo. Hazme olvidar todo de nuevo.
Sus ojos comenzaron a soltar aquellas lágrimas contenidas, haciéndome sentir un fuerte dolor en mi pecho.
- Está bien. Lo haré.
Asintió a mis palabras y enseguida cerró sus ojos. Comencé a tocar su rostro con cautela. Rozando con mis dedos cada facción. Sus párpados... sus mejillas... su barbilla... sus labios. De pronto deslice mis dedos hacia su cuello y de ahí a sus hombros y los acaricié con ambas manos. Luego sus clavículas... marcadas y finas. De ahí me dirigí hacia su espalda, bajando poco a poco por su columna hasta su cintura. Sus manos me acercaron más a ella, dándome a entender que podía seguir.
Recargó de pronto su cabeza en mi cuello haciéndome sentir su respiración y entonces me atreví a bajar hasta sus glúteos. Sólo rozando levemente la parte alta de los mismos. Dirigiendo mis manos de un lado hacia el otro. De pronto una de sus manos tomó una mano mía y susurrando en mi oído - dijiste caricias - la dirigió hacia sus glúteos, presionando con fuerza contra éstos. Comencé a acariciar esa zona con sumo cuidado, como estudiándolo, suave, de un lado a otro, rodeando esa zona con mis dedos, por encima de su short, abrazando toda su forma con mi mano. Comenzó a soltar pequeños suspiros y enseguida llevó mi otra mano a su pierna, llevándome a recorrerla toda, a lo largo y a lo ancho.
De pronto abrió sus ojos y me miró, aún con lágrimas en ellos.
- Perdóname, Jungkook.
Y me besó en la mejilla con dulzura.
- En serio, lo siento.
Negué, notando su arrepentimiento al pedirme hacer aquello.
- No pasa nada, Jimin.
Lo acomodé en la cama y me recosté junto a él, sin dejar de mirarlo. Se acurrucó en mi pecho y cerró sus ojos de nuevo hasta caer dormido en un profundo sueño.
Ya no sabía qué pensar. Tal vez estaba equivocado y lo que pensé que era un pago por una falsa deuda podría ser más bien una llamada de auxilio.
![](https://img.wattpad.com/cover/218645770-288-k518740.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Diario de un chico perdido (Kookmin, jikook)
FanficJungkook es un joven solitario que guarda un secreto muy grande: Es gay... y está perdidamente enamorado de su querido amigo de años, Jimin. Jungkook desea confesarle a Jimin todo pero hay un gran problema: Jimin no es homosexual y además se encuen...