Tímido ─── lixjin

OO7 ; pecoso solitario.

Suspiró con los ánimos por los suelos, revolvió su batido con el sorbete sin ganas de beberlo. Estaba solo y no tenía a nadie con quien charlar, sus amigos se habían retirado y no tenía a nadie más.

Miró a los demás, se encontraban charlando y riendo en compañía. Se sentía triste sin la presencia de sus amigos, sin aquellos idiotas hablando estupideces o sumergidos en su mundo tanto que parecían ausentes, pero al menos podía observarlos y sentirse afortunado de tenerlos. Pero ahora no podía, ellos no se encontraban.

Entonces, sin nada más qué hacer. Miró de nuevo allí, ellos charlaban con sonrisas en sus caras y sintió algo de envidia, porque él se encuentra sólo. HyunJin la observó con cariño y rió, acarició su larga cabellera negra con cuidado y delicadeza. De repente deseó ser una chica y poseer aquella misma belleza que ella, ser consentido así por el ojizarco.

Al parecer la pelinegra sintió una intensa mirada observarlos, y volteó hacia todos lados hasta dar con él y su mirada. Lo vio solo y con una mueca un tanto triste, se sintió algo mal de verlo sin amigos, así que decidió ir hacia el pecoso. Sus amigos la miraron confundidos y la vieron irse hacia aquel rubio de ojos miel.

La pelinegra se sentó a su lado sin más, lo miró y sonrió de forma dulce. Lee pudo examinarla más a detalle y notó que debajo de sus verdes ojos portaba un pequeño lunar, tal como HyunJin.

──Uhm, ¿hola? ──saludó algo dudoso.

──Hola, chico bonito. Te he visto aquí solo, ¿a qué se debe? ──su voz salió dulce y suave.

──Mis amigos se retiraron hoy, eso es todo. ──contestó.

──¿Quisieras venir conmigo por hoy?, es bueno conocer a más personas, te aseguro que mis amigos y yo no mordemos.

De repente empezó a sudar, recordando que allí está HyunJin. Sabía que no podía estár así de cerca de él o podría terminar en la camilla de un hospital. Bueno, quizá está exagerando un poco.

La chica lo observó esperando una respuesta, extrañamente no se veía impaciente, al contrario. Felix dudó de si decirle que sí, era extraño para él que le ofreciera ir con ellos. Aunque, era una gran oportunidad para acercarse a HyunJin y ser por lo menos un amigo.

──S-sí. ──su voz lo traicionó y habló por él. Apenas lo dijo y aquella pelinegra lo tomó por el brazo y lo dirigió con contento hacia JiSung y HyunJin.

Ella lo posicionó a un lado del chico de tiernas mejilla y se sentó de nuevo con HyunJin con una gran sonrisa. Los amigos se observaron, suponiendo que la fémina lo integró porque se encontraba solo y ella era muy empática

Sin mucho más que hacer, JiSung es el primero se atrevió a saludarlo regalando a la vez una de sus bellas sonrisas.

──Hola, supongo que ya sabes mi nombre, pero no importa. Soy Han JiSung, un gusto.

Felix le sonrió algo tímido y volteó hacia la chica, esta seguía sonriendo y le dio un codazo a HyunJin para que se presentara.

──Ya sabe que me llamo HyunJin. Deberías presentarte tú, bonita.

"Bonita" repitió en su mente, una y otra vez, torturándose a sí mismo con ello. De nuevo se sintió celoso, pero se resistió a cometer algún impulso que lo hiciera quedar mal o en ridículo.

──Bien, mi nombre es Seo SooJin ──sonrió dulcemente. Ella se veía amable y linda, eso hacía sentir mejor de cierto modo a Lee──. Soy hija de la profesora Seo, y prima de este chico que ves aquí. ──señaló al ojizarco a su lado, este sonrió hacia él y agitó su mano. De repente se sintió extremadamente estúpido y ridículo, también algo acalorado porque Hwang le dedicó una de sus sonrisas.

Se quiso golpear allí mismo por haber sentidos celos de la muchacha, que tan sólo se había tratado de su familia. Eso explicaba los ojos de color y el lunar bajo estos, los caules cautivarían a cualquiera. Sin excluir a Felix en ningún momento.

──Oh...es un gusto, yo soy Felix, Lee Felix. ──se presentó y de un momento a otro el rostro de la ojiverde se tornó de sorpresa, volteó al pelinegro, mirándolo como si le estuviera preguntando algo y quisiera una respuesta. El de ojos azules se vio un poco nervioso de repente, asintió despacio en respuesta, como si supiera lo que ella quería decirle. Se acercó a su oído y le susurró algo, SooJin murmuró un sí y se alejó.

──Perdón por eso ──se disculpó con una sonrisa inocente──. Bien, ¿de qué quisieran charlar ahora?

En cuanto Seo dijo aquello, la campana avisando la culminación del receso sonó y los cuatro se vieron interrumpidos por ella. El chico de pecas suspira aliviado, no tendría que soportar una incómoda charla con los chicos, al menos por ahora. Felix no decía que les caía mal, no podía hacerlo si jamás había conversado con ellos de frente. Era la presencia del chico perfecto la que causaba su incomodidad dentro de ese pequeño grupo.

No sabía bien si volvería al grupo, pero en caso de que eso fuera cierto, debería aprender a controlar sus sentimientos por Hwang, aunque no sabía bien cómo lo lograría.

Fotito de la beba SooJin para quien no la conoce y porque
es hermosa.