Enséñame a Amarte

❤️Capitulo 12❤️

6 MESES DESPUÉS

—Mi pequeña y adorable hija, no puedes ser tan mala con la mamá —dice Mike en tono infantil mientras pone suavemente su cabeza en mi enorme barriga.

Tengo seis meses y tres semanas de embarazo y se nota que la pequeña bebé está muy curiosa por salir y conocer el mundo ya que los mareos y las ganas de vomitar están cada día peor. Mike está muy preocupado por mi situación y se la pasa todo el día hablando con la bebé, creyendo que podrá convencerla para que deje de darme náuseas. Debo admitir que es muy lindo verlo hablar con ella.

Oh, por cierto. El doctor dijo que el bebé era una niña, pero Mike y yo no hemos planeado qué nombre ponerle.

Aún no puedo creer que haya pensado en abortarla. Ahora que la siento dentro de mí, ahora que la he visto moverse y que he escuchado palpitar su diminuto corazón, me he dado cuenta de que el haber quedado embarazada es la mejor cosa que me pudo haber pasado.

Sí, es cierto que no fue planeado. En ese entonces pensaba que había quedado embarazada por error y de un hombre a quien no quería, pero ahora todo ha cambiado. No me arrepiento de estar embarazada y Mike, a ese chico lo quiero con todo mi corazón.

Hace seis meses le pedí que me enseñara a amarlo y se lo tomó muy en serio. Poco a poco me fui enamorando de él hasta el punto en el que siento que una vida sin  él a mi lado no sería posible.

—Ve a bañarte, saldremos a comer —me informa Mike, levantando su cabeza y sacándome de mis pensamientos para luego irse de mi habitación.

Como la mujer obediente que soy, me levanto de la cama y me dirijo al baño. Después de una rica ducha entro a mi cuarto dispuesta a vestirme pero me sorprendo al ver un hermoso vestido sobre mi cama. Me acerco para poder apreciarlo y veo una pequeña nota sobre él.

Póntelo. Estoy seguro de que te verás hermosa con él.

Sonrío y sin pensarlo dos veces me pongo el vestido. Minutos después, salgo de la habitación ya organizada y me encuentro con un hermoso Mike parado en la sala y mirando por la ventana. Mike nota mi presencia por lo cual se da media vuelta dejándome ver lo hermoso que está.

Él tiene un traje negro bastante elegante que me hace querer tomarle una foto y presumir lo guapo que es mi novio.

—Hermosa, simplemente hermosa —comenta caminando hacia mí para luego tomar mi mano.

—¿Por qué estamos tan elegantes? —pregunto.

—Siempre vamos a comer a lugares casuales, pero hoy no. Esta noche cenaremos en un elegante y muy distinguido restaurante.

Sin decir nada más, salimos de la casa y veo como Mike se acerca a un carro y abre la puerta.

—¿Qué? ¿Dónde lo robaste? —pregunto incrédula ante tal hermosura.

—Lo compré con mis ahorros. ¡¿No es genial?! —da un pequeño brinco de emoción y me mira con una hermosa sonrisa —Entra.

Entro al auto y segundos después Mike entra también y pone en marcha su carro. Después de varios minutos nos detenemos y salimos del vehículo. Caminamos y entramos al hermoso restaurante donde unos señores nos saludan como si nos estuviesen esperando.

—Señor, su mesa ya está lista —informa una de las meseras.

—Gracias, señorita —agradece Mike, para luego tomar mi mano y caminar junto conmigo hasta una de las mesas.

—¿Reservaste esta mesa?

—Sí, me siento como todo un millonario —bromea y ambos reímos.