DOS

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Llegué a casa.

A pasado tanto tiempo... Ahora mismo no sé qué hacer, me siento cómoda pero no se a donde ir, no sé qué pasará cuando me encuentre con alguien.

Sumergida en mis pensamientos oí que en el salón estaban discutiendo, pude mirar sin que se dieran cuenta, ahí estaban.

—Es un simple monóculo, ¿Quién va a cogerlo? — Diego parecía molesto.

—Por eso, quien lo cogió era por temas personales, sigo pensando que no fue una muerte natural, alguien cercano a él... — el ambiente estaba muy tenso, parecía que Luther estaba insinuando que alguno de ellos mataron a papá.

Salí de mi escondite, interrumpiendo a Diego, quien iba a hablar.

—No se si os dais cuenta pero parece que insinúa que uno de vosotros ha matado a papá — todos me me miraban boquiabiertos.

—Número Ocho...

—Buenas — sonreí.

Vinieron a mi encuentro envolviendome en abrazos y palabras, cosa que extrañaba, aunque hace años no lo hacíamos tanto, a papá no le gustaban las muestras de afectos en público.

—Os e echado muchísimo de menos, a todos y a ti también fortachon — dije abrazando a Luther quién me correspondió.

—¿Porqué sigues siendo una niña? — me preguntó el anterior nombrado.

—No lo sé ni yo, pero la verdad estoy bastante bien ¿eh? — sonreí mirando mi cuerpo, a lo que los otros rieron, Luther parecía preocupado.

—Ahora que número ocho está aquí, hablemos sobre lo de antes, yo... — Diego no lo dejó terminar.

—Sobre lo de antes, ¿No está claro? Como ___ a dicho, insinúa que uno de nosotros a matado a Papá — Luther se quedó callado ante el comentario de Diego, ¿de verdad lo pensaba?.

Todos nos fuimos a los que eran nuestros antiguos cuartos. Por el camino choqué con Diego, quien me arrastró hasta su habitación y me sentó en su cama.

—¿Cómo has? Ya sabes...

—¿Vuelto?, no lo sé, estuve en una especie de nada, mi cuerpo estaba como en trance, no tenía hambre, sed, sueño... De ahí que parezca una niña de 13 años, mi cuerpo no debió crecer en ese "trance".

—Lo importante es que estas aquí, todos de nuevo, juntos.

—Bueno, no estamos todos...

Me interrumpió un gran estruendo en el jardín, corrimos para ver qué pasaba, en este había un gran ¿portal?, parecido del que había salido yo, salió Klaus con un extintor en sus manos.

—¡¿Qué demonios haces con eso?! — antes de que acabara mi frase Klaus lo lanzó en dirección a ese agujero.

—¿Qué se supone que ayudará eso Klaus? — Allison parecía alterada.

—¡No lo sé!

Vimos a alguien que salía de ahí, parecía un anciano, pero poco a poco se iba haciendo joven hasta convertirse en... Espera... No puede ser...

—¿Soy yo o alguien más está viendo al pequeño cinco? — Klaus parecía que me hubiera leído el pensamiento.

—Mierda — dijo al mirarse, supongo que al descubrir que volvía a ser un niño, aunque bueno tampoco estaba nada mal, nos miró y se dirigió a la cocina como si nada, nos sentamos esperando a que dijera algo.

—¿Qué fecha es hoy? La fecha exacta — Cinco empezó a preguntar.

—24 — contestó Allison.

ᴇɪɢʜᴛ || ᴛʜᴇ ᴜᴍʙʀᴇʟʟᴀ ᴀᴄᴀᴅᴇᴍʏDonde viven las historias. Descúbrelo ahora